He publicado con editorial y te cuento todo

APRENDE A RECHAZAR UN CONTRATO EDITORIAL

¿Estoy loca?¿Cómo vas a decir que no a una futura publicación? ¿Cómo se te ocurre rechazar un contrato? ¿No te das cuenta de que si hoy dices que no, no van a volver a ofrecerte nada nunca más?

Oh, sí, qué drama perder el 10% de nada y una breve exposición en rrss...

TIENES QUE APRENDER A DECIR QUE NO. Y para eso, debes conocer cómo se trabaja en el mundo editorial, cuáles son tus derechos y qué es aceptable que figure en un contrato y qué no. Te adelanto que yo lo he hecho mal muchas veces, así que sirva mi experiencia para que no la cagues tú también y la aventura de publicar acabe con tus ganas de volver a escribir para siempre.

Yo os voy a dar cuatro pautas que con los años he aprendido que son Red flags, pero lo primero que tenéis que hacer es leeros lo que dice la Ley de Propiedad Intelectual (está en el BOE). Es un coñazo, sí, pero el conocimiento será vuestra mejor arma (y espero que no tengáis que usarla), porque los editores a veces hacen cosas como vender a terceros sin comentaros nada y luego querer barrer bajo la alfombra, como le ha pasado recientemente a un compañero del gremio (dibujante, si no me equivoco), que lo contaba en Twitter tal que así:

Podéis leer el hilo entero en su perfil, pero como veis, es más habitual de lo que parece.

A tener en cuenta que las editoriales no son seres de luz, no están ahí para hacerte famoso o rico o llevarte de viaje por todo el país presentando tu libro (me estoy descojonando de la risa). Así que descarta ese pensamiento romántico sobre la profesión y empieza a verlo como lo que es: un negocio. Si quieres seguir viendo y viviendo tu literatura como algo artístico y emocional, te recomiendo que no caigas en el mercado editorial porque te va a joder el aesthetic (a mí me lo jodió, equisdé).

Y si después de todo sigues queriendo sacarle partido a tu escritura, ahí van unas cuantas premisas de las que huir:

🚩Que sea una editorial de nueva creación.

Como escritor, no puedes lanzarte a publicar con una editorial sin referencias. Tienes que conocer cómo trabajan, no sólo a nivel de contratos o trato con el autor, sino cómo resulta el producto final.

🚩Que el producto final (o sea, el libro) esté mal maquetado o lleno de erratas.

Esto no se le perdona a un autopublicado, sin embargo, he leído libros, tanto de editoriales independientes como de sellos de las grandes, llenos de erratas de esas que te hacen sangrar los OHOS (y la gente tan de chill casi suplicando que les publiquen). ¿Todo vale por publicar? Preguntátelo.

🚩Que sus novedades solo se publiciten durante el periodo de preventa y después ya no las vuelvas a ver en sus rrss.

Se estila mucho el fastreading, y como la fastfashion o el fastfood no es beneficioso para nadie excepto para el empresario. Valora tu trabajo. No has pasado meses escribiendo y corrigiendo como para estar dos semanas en el candelero y que después tu libro ya esté obsoleto.

🚩Que publiquen (casi) siempre a los mismos/as autores.

Es un grupo cerrado y para entrar tendrás que convertirte en un escalador social, hacerte amigo de este y de aquella y salir en todas las fotos juntos antes de que el editor se pare a leer tu manuscrito. Tú mismo.

🚩Que las cubiertas de los libros estén poco trabajadas.

Ojo con este punto. No me refiero a que a ti personalmente te gusten más o menos, sino a que objetivamente el diseño sea amateur (cutre, vaya). Va a ser la imagen de tu trabajo y ya sabemos que mucha gente no le da la vuelta al libro para leer la sinopsis si la portada no le llama la atención. ¿Quiere esto decir que una editorial con cubiertas maravillosas trabaja bien? Rotundamente NO. En demasiadas ocasiones nos dejamos llevar por lo estético y luego nos llevamos los disgustos. Hay que valorar el conjunto.

🚩Que algunas de sus cubiertas destaquen sobre las de los demás libros.

Si una editorial tiene una línea de cubiertas de x estilo o, incluso, más bien cutres, y de tanto en cuando saca algún libro con una imagen maravillosa, desconfía. Ahí están valorando más a unos autores que a otros, están poniendo más pasta en unas cubiertas que en otras porque creen que ese libro va a venderse más y por lo tanto es posible/probable que le dediquen más publicidad, que le busquen más eventos, etcétera. En resumidas cuentas, vas a ser el relleno en la mesa de novedades para que la competencia no ocupe el sitio y se venda el libro bonito que la editorial quiere vender.

🚩Que los editores muestren comportamientos poco profesionales en redes.

Que sí, que todos nos calentamos a veces, pero un editor tiene que saber poner límites porque al final si quiere ganarse la vida con los libros tiene que trabajar bien. He sido testigo demasiadas veces de hilos redactados desde el perfil de la editorial que tienen un tono condescendiente que no mola nada, de perfiles editoriales que entran al trapo de todas las polémicas de twt, de otros que cuentan lo mal que les va (y se ofenden con las réplicas) o incluso perfiles que aseguran guardar capturas de pantalla de todos los que 'hablan mal' de ellos. Creepy.

🚩Que los editores/as se publiquen entre ellos.

Nada que decir al respecto. Bueno, sí, que no me parece adecuado que hagan esto cuando publican certámenes, concursos, en los que, casualidad o no, salen seleccionados amigos editores/as de otras editoriales. Está feillo.

🚩Que no den adelanto.

Uff. Polémico punto este.
Que te ofrezcan adelanto significa que tienen una previsión de ventas, que creen que van a sacar ese dinero y más con tu libro; en definitiva, que pueden venderlo. Si te adelantan 100€ en royalties es porque creen que van a vender, al menos, 100 ejemplares (dependiendo del pvp y toda la mandanga). Todo un logro.

Pero siendo honesta, pocas editoriales de las independientes dan adelanto, lo cual te deja un poco con la sensación de estar trabajando gratis. Y muchas veces así acaba siendo.

🚩Que el contrato editorial sea de larga duración.

Contratos de dos, tres, cinco y hasta diez años... En mi opinión, lo ideal son dos años. Tiempo suficiente para ver si la editorial te gusta y si el libro se vende. El contrato siempre se puede renovar; de ser más largo y no estar a gusto, vas a tener tu obra retenida por mucho tiempo.
De todas maneras, también te aviso de que pocas editoriales quieren publicar un libro que ya ha sido publicado anteriormente. Vaya, que si te sale mal la jugada te lo vas a acabar comiendo con patatas.

Voy a dejarlo aquí por hoy y continuaré con este tema en la siguiente entrada porque veo que se me está alargando. ¿Se os ocurren más Red flags? Os leo.