Desperté temprano, todavía no salía el sol, Eren dormía a mi lado.
Su rostro estaba hinchado por dormir, me senté en la cama observando su pacífico rostro.
Tarian: ¿Por qué olvide ese detalle?
Susurré mientras pasaba mi mano por su cabello y me acerque dejando un beso en su frente.
Baje de la cama y me cambié al uniforme de gala, mientras me ponía las botas mire a mi mejor amigo dormir.
¿Realmente no diría nada? ¿Ni por accidente?
Tenia muchas dudas cruzando mi cabeza, me puse de pie cerrando el cinto de mi gabardina y luego salí de la habitación.
Iría a ver a Historia y luego a Zeke.
Pero primero pase por la cocina y tome un pan dulce, lo comí en silencio viendo como los únicos despiertos eran quienes estaban por terminar sus guardias y ser reemplazados por otros.
Al terminar mi simple desayuno camine hacia la habitación de Historia, me quedé afuera de esta pensando en si tocar pues era muy temprano.
De mi bolsillo saque las cartas de Ymir, una al nombre de Historia y otra a mi nombre.
Acaricié suavemente dónde aparecía mi nombre y volvi a guardarlas.
Fui al sótano, las habitaciones que estaban ahí estaban acomodadas para los portadores de titanes, entre a uno y mire a Pieck quien dormía pacíficamente, le cubrí bien con la manta y apague la velas que habían puesto, al salir cerré con llave por seguridad y luego fui a dónde estaba Zeke.
Este dormía sin camiseta y su pantalón roto, mire la ropa que le trajeron pero era muy chica, así que salí y fui a conseguirle algo más cómodo.
Le encontré una camisa de vestir crema y tome una chaqueta vieja de Miche, un pantalón de vestir oscuro y botas que supuse le quedarían.
Igual tomé un poco de agua, una tetera y algunas hojas de té; con todo en mano fui de vuelta y lo deje en la mesa que le habían dejado ahí.
Me senté en la orilla de la cama y lo mire durante unos segundos.
No era parecido a Eren, tampoco a Grisha, o bueno, tal vez si se quitase esa barba podría encontrarle el parecido a alguno.
Del bolsillo interno de mi gabardina, el cuál yo cosí, saque una bolsa no muy grande de cafe, lo había tomado de su mochila mientras revisaban sus cosas.
Lo deje en el bolsillo de la camisa que le traje y luego me levanté de la cama.
Tarian: Espero lleguemos a un acuerdo...
Susurré para mi una vez llegue a la puerta.
Tarian: Me gustas mucho en el anime y en el manga como para odiarte aquí... Por favor tu no me decepciones
Seguí susurrando, abrí la puerta y salí para luego cerrar con llave.
Después de eso me fui a tomar aire a la explanada, mire atento la reja, había personas afuera durmiendo con capas de sus difuntos hijos usandolas cómo mantas
No estaban haciendo protesta por odiarnos, no, estaban ahí porque querían que hiciéramos algo para hacer la memoria de los que fallecieron antes de poder llegar a dónde estábamos.
Trepe la barda para salir, pues estos estaban apoyados en la reja.
Les mire a todos hasta que encontré al abuelo de Gunter.
Tarian: Señor Schultz, debería ir a su casa
S. Schultz: Oh pequeña, es que realmente quisiera que
Tarian: Se hará algo para recordar a todos y cada uno, lo prometo, en especial a Gunter... Ahora que soy la comandante me aseguraré de que pase
S.Schultz: El hubiera peleado de maravilla ahí ¿no es así?
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Those distant stars - realidad deseada
RandomSegunda parte de Rewrite the stars, una historia sobre mi realidad deseada.