᯾ ✩ Todo Comenzo Con Una Broma... ✩ ᯾ - Aonunete

Las Compras

Ese mismo día, en la noche, Tsireya le contó todo a su hermano.

-¿Porque demonios le enviaste ese mensaje?

-Piensalo, en esa cita te podrás declarar...

-¿Pero y si me rechaza? ¿Como lo miraré a los ojos?

-No te rechazará...

-¿Como lo sabes? -Hubo un breve silencio-. Tsireya, ¿cómo lo sabes? -Preguntó ahora en un tono más severo. Silencio de nuevo. Ella respetaba a su amigo y no iba a decir que el tenía un crush sobre su hermano. Dentro de todo, lo respetaba.- ¿Porque no me rechazará?

-Por qué... ¿No te viste en un espejo? ¡Eres un galán! -Mentira. Espanta hasta a las moscas. Pero una mentirita Blanca no daña a nadie-. El punto es que mañana iremos con Kiri y Lo'ak de compras. Le comprarás algo lindo a Net y te le declararas ¿Oiste?

-Aja... -Hablo desinteresado, fingiendo oír lo que ella decía. La verdad es que, sea cual sea su opinión, Tsireya iba a arrastrarlo de todos modos.

-A veces eres extremadamente irritante, ¿sabias eso?

-Aja...

-Y detesto tus "aja"... ¿También sabías eso? -El chico la miro unos segundos fugaces para luego sonreírle burlonamente.

-Aja...

-La vida es imposible contigo. -Se oyó otro ''aja'' de fondo y Tsireya rodó los ojos para luego voltearse y darle la espalda a su hermano mientras le hablaba.- Y, si mañana no vas, yo misma me encargaré de declararme a él por ti... Así que piensa bien lo que harás... -Aonung resopló, sabia que no tenía ni voto ni palabra en esta situación. Su hermana sonrió victoriosa. Sabía que iría con ellos mañana, lo tenía por hecho. Cuando salio de la habitación de su hermano tomó su celular y le escribió a sus amigos.

Tsireya rodo los ojos y apago su teléfono. Este siguió vibrando con notificaciones emergentes del chat, pero no se molestó en abrirlos, sabía que se trataba de los hermanos peleando así que puso su celular a un lado y se recosto en su cama a escuchar Taylor Swift, como hacía todas las noches antes de cenar.

Al día siguiente, Tsireya levanto a su hermano con parlante en mano a todo lo que podia, reproduciendo el reguetón más ruidoso que encontró.

-¡Buen día, persona con atracción física hacia personas de su mismo sexo, en otras palabras, homosexual! ¿Listo para ir de compras?

-¡¡Tsireya!! ¡Es sábado y son las siete de la mañana! ¿Quieres callarte?

-Nop, ¡a desayunar que tenemos que ir de compras!

Ao'nung bufó y se levanto a cuestas de la cama (con algunos empujoncitos de su hermana mayor), se cambió y fue a desayunar. Apenas tomó el último sorbo de su café con leche, Tsireya ya lo estaba arrastrando hacía el centro de Pandora.

Pandora era una ciudad conocida por tener varios emprendimientos lindos y originales en la zona que abarca la parte central del lugar. Muchos turistas pasaban sus días paseando por el centro de la ciudad y observando las bonitas vidrieras de las tiendas.

Había muchos establecimientos y Ao'nung sentía que se cegaba por el sol que brillaba de una manera exagerada.

-¿Lo'ak no vino? -Consultó Tsireya a su amiga, quién observaba su teléfono buscando locales románticos y tiendas llenas de cursilerías.

-Nop, se quedó dormido y me amenazó con el cuchillo de la manteca hoy por la mañana... -Confesó Kiri guardando su teléfono.

-Voy a comenzar a implementar esa táctica... -Comentó Ao'nung quien caminaba junto a las dos chicas.

-Que ni se te ocurra. -Sentenció severa su hermana. Ao'nung no planeaba hacerle caso.

.

.

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Luego de caminar, caminar, caminar y caminar, llegaron a una florería.

-¿Flores? ¿De verás? ¿No se les ocurrió algo más cliché? -Se quejó Ao'nung detrás de las chicas.

-No compraremos cualquier flor. Escuché que por aquí venden rosas azules. Ese es el color favorito de mi hermano. -Explicó Kiri al hermano de su amiga, quién se vio extrañado.

-¿Rosas azules? ¿Eso siquiera existe?

Sin respuesta, Ao'nung bufó y camino detrás de las chicas. Salieron de la tienda con una sola flor. Él esperaba algo más pero no pensaba entrar de nuevo. Tampoco iba a quejarse, puesto que lo más probable era que Tsireya y Kiri comiencen a recorrer toda la tienda otra vez y, de ser necesario, quizás todas las florerías del centro.

Luego de otro largo rato caminando, llegaron a una juguetería... ¿Que demonios?

-Todos aquí sabemos que Neteyam tiene 17 años, ¿cierto? -Preguntó Ao'nung en parte curioso y en parte preocupado.

-Pues como no voy a saberlo, soy su hermana. -Comentó Kiri, como si la pregunta de Ao'nung haya sido la más estupida de todas.

-¡Pues le compraremos un osito de peluche! ¿No son tiernos? -Habló Tsireya arrastrando las palabras.

-Me parece suficientemente cliché regalarle sus "flores favoritas". -Rodó los ojos mientras caminaba tristemente derrotado detrás de las chicas.

Al final no hubo osito, ya que Ao'nung vio una pista de carreras de medio metro de alto. Neteyam no era un niño, lo sabía, pero Ao'nung estaba tentado a comprarla. Finalmente lo hizo, luego de un argumento con su hermana, pero lo logró.

Ya podía imaginar su primera cita... Él, Neteyam, pista de autos... Perfectamente  perfecto.

-No se a quién vas a enamorar con esa estupidez. -Dijo su hermana cruzándose de brazos y rodando los ojos.

-Hey, las flores son mi límite de cursilería. No trates de modificar mis límites.

-¿Que hay de romántico en eso? Ni los mosquitos van a querer picarte.

-Es perfecto, lo invitaré a casa y jugaremos a los autitos.

-¿Que tienes? ¿Cinco años?

-O también podrías regalarle la pista de autos. -Sugirió Kiri, separando a los hermanos gruñones.

-¿Y entonces que haremos en la cita?

-Pueden ir de picnic -Comentó Tsireya sonriendo.

-¿Quieren acabar con sus tonterías clichés? -Ao'nung rodó los ojos-. Ya lo dije, flores es igual a mi límite.

-Irás de picnic y punto.

-¡Vayamos al supermercado! ¡Allí encontraremos comidas ricas para el picnic entre tú y mi hermano!

¿Más compras? Quien diría que tener una absurda cita sería tan difícil...

HOLAAAA
¿Se acuerdan de mi?
El cap es cortito pero ya nos estamos acercando a lo spicy de la serie 😍

(aunque tbh no creo que haya gente que siga leyendo esto 😭)