La guía de un bebé dragón para seducir a tu Huli Jing [WangXian]

CAPÍTULO 20: La felicidad de Hanguang-Jun en forma de girasol

Absolutamente humillante.

Hanguang-Jun no podía creer su suerte. Se le había concedido la oportunidad de su vida, no sólo de casarse con el huli jing de sus sueños, sino también de ver a Wei Ying como una diosa celestial, con su seda roja y su seducción desenfrenada, ofreciéndole un espectáculo en el mismo escenario. Pero justo cuando creía que el zorra se estaba acercando a él y que incluso le estaba gustando el hombre en el que se había convertido, la vida se niega a dárselo fácilmente y lo convierte en lo peor que podría ser en ese momento.

¡Un bebé!

¡Se ha convertido de nuevo en un bebé dragón!

¿Cómo iba a demostrar que era digno de Wei Ying en esta forma? ¿Cómo iba a mostrar su aprecio por Wei Ying, después de que el zorro había realizado una danza tan expectacular, sólo para él? Hanguang-Jun necesitó todo lo que llevaba dentro para contenerse y no saltar al escenario y mostrar su primitiva reivindicación territorial sobre el huli jing delante de los demás. En lugar de eso, se había tomado su tiempo y había esperado, queriendo reclamar a Wei Ying en privado sólo después de que todo esto hubiera terminado, para que nada ni nadie pudiera interponerse entre él y el zorro mientras se enzarzaban en un... "baile de cortejo apropiado", por así decirlo.

...Pero ahora que estaba atrapado en una forma diminuta—por no decir regordeta—que había adoptado de niño, ¿cómo iba a hacerlo?

Wei Ying nunca piensa en él más que como un bebé cuando tiene este aspecto.

Wei Ying siempre está demasiado cegado por la visión de sus mejillas gordas y tambaleantes que lo demás queda en segundo plano.

¡Maldito sea aquel hombre corpulento y lleno de granos que le había vendido aquella farsa de poción!

Demasiado para la supuesta capacidad de "convertirte en la forma que más le gusta a la persona que amas". 

¿Cómo podía saber Hanguang-Jun que eso significaría convertirlo de nuevo en un bebé dragón?

 Creyó que le crecerían un par de músculos más, o como mucho una barba. Seguro que Wei Ying no tendría expectativas poco realistas sobre el aspecto de su futura pareja. Si van a casarse mañana, Hanguang-Jun necesita toda la ayuda posible. En el fondo, sabe que el corazón de Wei Ying aún no está totalmente comprometido con él, aunque haya aceptado el matrimonio de nombre. Es propio del zorro sacrificarse por el bien de los demás; y en este caso, Hanguang-Jun es consciente de que ha sido el último recurso de Wei Ying para evitar al clan Yunmeng Jiang más guerras y angustias.

Para decirlo sin rodeos: Hanguang-Jun sabe que no es la primera opción de Wei Ying.

Pero si van a casarse de todos modos, ¿no ayudaría que Hanguang-Jun encontrara la forma de hacer el proceso un poco más fácil y llevadero para el huli jing? ¿Hacer que Wei Ying lo quiera un poco más, que lo desee un poco más? 

¿Era realmente culpa de Hanguang-Jun buscar una poción de amor con cualidades sospechosas, cuando lo único que quería era que Wei Ying le amara más?

(De hecho, es culpa de Hanguang-Jun por intentar un acto tan insensato. Tal vez, si su desesperación no le hubiera llevado a lanzarse de cabeza al peligro, habría hecho caso de las advertencias de A-Yuan y habría investigado la poción mucho más a fondo antes de consumirla ansiosamente. Pero en lugar de eso, se dejó dominar por su ego y se creyó inmune a cualquier efecto secundario que pudiera tener la poción.

Porque, después de todo, ¿no es un dragón tan poderoso? ¿Y qué tenía que temer un dragón poderoso como él? ¡Él era el gran Hanguang-Jun! Él debía ser temido, no ser quien temiera a los demás).