De pronto me desperté por algo. Era Mitchell golpeando la puerta.
Creo que había dormido como quince minutos o tal vez media hora, wow.
¿De qué te asombras? Siempre haces lo mismo.
Sí, lo sé.
Le abrí a Mitchell y rápidamente me preguntó:
¿¡Qué carajos te pasa?! ¡Me asustaste Emma! –
Ya cállate tú eres la culpable solo por no avisarme. No quiero que vuelvas a decirme que me pasa ¿a ti que te pasa? ¡Estábamos bien hasta que nos tuvimos que enamorar de Freddy y nuestros celos! –
Tienes razón Emma, pero ya todo se arreglara, ya veras, al menos estas son como nuestras "Vacaciones soñadas" –
¡Exacto! Bien, me daré un baño. – Me prepare la ropa y entré a bañarme, solo eran la una de la tarde y ya tenía mucha hambre. Luego de bañarme me puse mi ropa y salí. ¿Mitchell había pedido dos hamburguesas? Sí, al parecer sí.
Me senté en la otra punta de la mesa y disimuladamente miré la televisión.
No disimules, sé que quieres una. Agarra. –
Sí que te conoce Emma.
Tome la hamburguesa y comencé a comerla. ¡Estaba deliciosa!
Cuando terminamos, sonó el teléfono de Mitchell, mientras estaba preparando mi look para esta tarde: Una camisa a cuadros roja y negra, unos jeans negros y las vans. Empecé a pensar que haría con mi cabello rubio y ondulado, pero como mi cerebro está de vacaciones no se me ocurrió nada.
Escuché que Mitchell dejó de hablar, así que fui con ella.
¿Qué sucede? – Pregunté.
Nada Emma. Solo Freddy dijo que nos espera a las seis en el parque. –
¿Qué parte del parque? ¡Es enorme! –
Sí, lo sé, pero dijo que en dónde está la fuente. –
Okey... –
Em...Emma, iré a la peluquería. – Asentí, entonces se fue y de pronto mi cerebro junto con mi conciencia tuvieron una simple idea.
"Alisarme el cabello"
Recordé que la mamá de Julieta era peluquera así que llame a Julieta y le dije si su madre podría venir.w
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Un Viaje Inesperado.
Ficção AdolescenteEmma y Mitchell son dos hermanas mellizas de 17 años que cumplían 18 a principios de enero. Sus padres por su cumpleaños les regalaron dos pasajes para viajar a Sydney , Australia. Pero por una equivocación terminan en Roma , Italia. Allí se...