Cristal estaba progresando poco a poco en su recuperación, pero aún lidiaba con los efectos del trauma que había sufrido. Alan y Alonzo habían sido constantes en su apoyo y acompañamiento, pero aun así, se daba cuenta de que le costaba confiar en ellos y en los hombres en general. Alonzo seguía intentando acercarse a ella, pero con mucho cuidado y respetando sus límites.
Un día, mientras estaban sentados en el parque, Alan sacó el tema que había estado rondando en su cabeza. "Chicos, he estado pensando en lo que dijo Luck sobre convertirnos en investigadores. ¿Qué les parece si empezamos a estudiar juntos para convertirnos en detectives?".
Alonzo y Cristal se miraron sorprendidos, pero luego Alonzo asintió y dijo: "Sí, creo que sería una buena idea. No solo para ayudar en el caso de lo que nos pasó, sino también para prevenir que algo así le pase a otras personas".
Cristal asintió con tristeza. "Sí, pero no sé si yo podría hacerlo. A veces todavía me siento muy insegura y no sé si sería lo suficientemente fuerte para enfrentar de nuevo todo eso".
Alan la miró con ternura. "Lo sé, Cristal, pero no tienes que hacerlo sola. Nosotros estaremos aquí para apoyarte en todo momento. Además, creo que sería una forma de enfrentar tus miedos y superarlos".
Cristal reflexionó sobre lo que Alan dijo y finalmente asintió con determinación. "Está bien, lo intentaré. Pero necesito que me prometan que siempre estarán a mi lado".
Los chicos sonrieron y se tomaron de las manos. "Lo prometemos".
Los días pasaron y los chicos comenzaron a estudiar juntos, enfocados en convertirse en detectives. Mientras tanto, Luck les compartía información del caso en el que había estado trabajando y en el que la organización que había secuestrado a Cristal estaba involucrada.
Un día, Luck los llamó para reunirse con él en la estación de policía. "Chicos, tengo una nueva información sobre el caso que les puede interesar. Se trata de un hombre que podría estar relacionado con la organización y que se encuentra en una casa en las afueras de la ciudad. No puedo enviar a la policía sin pruebas contundentes, pero ustedes podrían hacerlo como investigadores en entrenamiento".
Los chicos se miraron y luego asintieron con determinación. "Vamos a hacerlo".
Llegaron a la casa y comenzaron a investigar. Pronto encontraron pruebas que indicaban la relación del hombre con la organización y con el secuestro de Cristal. Mientras revisaban las pruebas, escucharon un ruido y se dieron cuenta de que alguien estaba entrando en la casa.
De repente, la puerta se abrió y un hombre armado apareció en el umbral. Los chicos intentaron huir, pero el hombre los persiguió y los acorraló en una habitación. Alan, Alonzo y Cristal se abrazaron con miedo, esperando lo peor.
Pero en ese momento, la policía llegó y logró detener al hombre. Los chicos suspiraron aliviados y agradecidos.
Alan se encontraba sentado en su cama, tratando de procesar todo lo que había pasado en los últimos días. Había sido una montaña rusa emocional, y aunque estuvo contento de haber ayudado a Cristal a recuperarse, todavía se sentía abrumado por la situación.
De repente, su celular sonó. Era un mensaje de Alonzo: "Oye, ¿puedes venir a mi casa ahora? Tengo algo que mostrarte."
Alan no podía resistirse a la intriga. Se vistió rápidamente y se dirigió a la casa de Alonzo.
Cuando llegó, Alonzo estaba sentado en el sofá, con una pequeña caja en sus manos.
"Alan, tengo algo que mostrarte", dijo Alonzo, abriendo la caja. En su interior había un reloj de oro. "Es de mi abuelo, lo encontré en un viejo baúl en el ático. Pero lo que es interesante es lo que encontré dentro del reloj."
Alonzo sacó un pequeño papel doblado del interior del reloj y lo desplegó. Alan se acercó para ver qué estaba escrito.
"Es un mapa del sótano de la escuela", dijo Alan con sorpresa.
"Sí, y hay algo más", dijo Alonzo, levantando un pequeño objeto metálico del interior de la caja. "Es una llave. Creo que es para la puerta del sótano."
"¿Y por qué tienes todo esto?", preguntó Alan.
"Porque quiero ir allí", dijo Alonzo, mirando a Alan seriamente. "Quiero saber qué más hay allí abajo. Quiero resolver el misterio de lo que le pasó a Cristal, y quiero hacerlo contigo."
Alan se sorprendió por la determinación de su amigo, pero no podía evitar sentir un poco de miedo. "¿Y si encontramos algo peligroso?", preguntó.
"Entonces lo manejaremos juntos", respondió Alonzo. "Somos amigos, ¿no?"
Alan no podía negar que la propuesta de Alonzo lo emocionaba. Era como si finalmente pudieran encontrar las respuestas que tanto buscaban. Así que, sin más dudas, aceptó.
Esa noche, los dos amigos se dirigieron hacia la escuela con el mapa y la llave. No pudieron evitar sentirse nerviosos mientras se adentraban en el sótano oscuro y polvoriento.
Finalmente, llegaron a una puerta de metal con una cerradura antigua. La llave encajó perfectamente, y la puerta se abrió con un chirrido.
El sótano estaba oscuro, y los amigos usaron sus teléfonos para iluminar el camino. Descubrieron varios objetos antiguos, como libros y herramientas de carpintería, pero nada parecía relevante para el caso de Cristal.
Finalmente, encontraron una habitación cerrada con llave. Alonzo sacó la llave de la caja, la insertó en la cerradura y la giró. La puerta se abrió, y Alan y Alonzo entraron cautelosamente.
Lo que encontraron allí les dejó sin palabras. La habitación estaba llena de equipos médicos antiguos y, en el centro de la habitación, estaba...
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Detrás Del Espejo
Mystery / ThrillerUn niño que queda atrapado en sus un recuerdo de un trágico accidente en donde pierde la vida su persona especial, el se promete jamás volverse a encariñar con personas por qué cuando la quiere la pierde, pero todo esto va a cambiar con un encuentro.