Skylanders Academy: Tormento

Sombras del pasado

La tensión en la sala se empezó a formar en la sala de la chimenea antigua, mientras que el demonio de escamosa piel purpura y placas que bajaban por su pecho, colocando unos ojos enojados al ver como el espíritu de aquel mabu, se le acercaba a la loba blanca; la cual residía en el suelo tras haberse dado contra el muro, este acercándose le clavó el cuchillo en la pata delantera, provocándole una punzada que pensó a sangrar de forma leve, las gotas de la herida cayeron en el suelo manchándolo.

Al ver esto, enseño sus dientes afilados en sus fauces, dejando brillar sus ojos de iris carmesí de forma especial, concentrando sus poderes demoniacos para seguido, avanzar para colocarse a un lado de ellos, donde la loba de pelaje blanco forcejeaba con el aspecto del mabu, sujetando la navaja que este llevaba en mano con ambas zarpas, concentrando algunas chispas rojizas en su boca, lanzo una bola de fuego rojizo con negro en el centro, la misma se acercó rápido al aspecto, "¡Pan!" se escuchó cuando esta le impactó con éxito en su lateral, provocando que saliera volando hacia atrás, quedando con la espalda pegada a otra puerta corrediza que residía en la pared de la izquierda.

—Me-me salvaste.... —contesto la loba con unos ojos agujados del dolor, debido a que la herida aún seguía abierta, derramando el espeso liquido rojizo, adolorida se sentó en el suelo para ver como manchaba su bello pelaje blanquecino, este alzo la vista para los ojos del aquel demonio, empezando a llorar de forma sonora, dio unos pasos para abrazarlo y sentir con el hocico las palcas de su pecho—. Tuve tanto miedo.... ¡Gracias por salvarme Spyro!

—Tranquilízate.... Ya paso, buscamos algo para vendarte —dijo el mismo dejando de lado sus penas y vergüenza, suavemente extendió los carilargos de sus alas: dejando ver los cartílagos rojizos que recibirán sus huesos, palpando el suave pelaje de la peluda hembra, esto hizo que se apenara un poco, extendiendo las alas para dejar de abrazarle—. ¿Podías soltarme, Linda?

—Perdón, creo que no es bueno que me acerque de esa forma, más si das desnudo... aunque seas un lindo machito —conto ella con una leve sonrisa a pesar de sus lágrimas y el dolor de la herida en su patita, la cual seguía sangrando con gotas leves, dejándose de apoyar del pecho del demonio púrpura, este puso una cara apenada e inquieta, ladeando la cola para taparse la intimidad en su entre pierna, dejando escapar algunas risas suaves, seguido sin apoyar la pata que tenía herida, se giró para ver la puerta donde residía aquel espíritu, notando que este ya no estaba—. Creo que lo derrotaste.... Mira, es la nota de un viejo diario.

—Es verdad, a ver que dice —contesto Spyro dejando de lado su vergüenza.

Sin embargo, el seguía con la cola doblada para tapar la parte media, esto era para que Linda no le viera más su órgano reproductor, dejando escando escapar un poco de humo para concentrarse en lo importante, dio unos pasos con sus dos patas para caminar junto a Linda, la cual con dificultad se acercó aquel misterioso papel, la misma adolorida se sentó en el mismo lugar; donde había caído aquel espíritu, sin tiendo que la superficie de esta era madera de roble o algún tipo de árbol café, extendiendo la cola para sentarse de forma cómoda y no pisarla sin querer, tomo aquella nota del suelo para mostrársela.

—Esto parece parte del diario de ese Mabu que me ataco —señalo la loba con expresión curiosa, alzando una ceja de forma pensativa.

—¿Si? ¿Por qué ese villano nos atacó? —quiso saber el demonio púrpura con un rugido molesto, culpándose por la herida de ahora tenía la peluda hembra, cuya cola se sentía muy suave al tocarla.