A tu lado en todas partes

Parte 8

 - Ver mis errores así es más difícil de lo que esperaba. Supongo que siempre supuse que estabas enojado conmigo por lo que hice, y sé que es verdad - dice antes de que Dean pueda intentar protestar en vano - pero nunca me di cuenta de cómo te afectó mi traición. Cómo te afectó mi ausencia.

Castiel se tambalea en el depósito. Leviatán, listo para salir de él. Desaparece bajo el agua. La sustancia pegajosa negra de los Leviatanes ondea a través del agua. Dean observa desde la orilla, estupefacto. Dean mira hacia el agua y ve el abrigo flotando en la orilla. Se agacha, sacando la gabardina. Sam y Bobby mirando.

- Está bien, entonces se ha ido - Él traga. No puede decir más.

Vuelca toda la emoción que sabe que no puede mostrar en doblar el abrigo.

- Estúpido hijo de puta - Dice, con la voz entrecortada. Aprieta el abrigo hecho una bola en su mano y vierte todo lo que no puede decir en él.

- Pensé que te habías ido para siempre, hombre - Su voz se quiebra - El Leviatán se hizo cargo tan rápido al final y no había nada que pudiera hacer para ayudarte. Luego entraste en ese depósito y eso fue todo. Te habías ido.

Dean mira a Sam y Bobby, una vez más testigos de cómo el mundo de Dean se desmorona - Y lo peor fue que ni siquiera podía hablar de eso, no es que Sam y Bobby no lo intentaran. Me preguntaron durante meses si estaba bien y siempre respondía lo mismo, estoy bien. Pero no estaba bien y ellos lo sabían .

Cas le da otro apretón tranquilizador a la mano de Dean - Si te ayuda, puedes hablar ahora.

Dean asiente con la cabeza: - No creo que hayamos hablado realmente sobre esos pocos meses que te fuiste.

Cas niega con la cabeza.

- Bueno, eran terribles - Se ríe amargamente - Estaba plagado de pesadillas de ti caminando en el agua. Y además de eso, estábamos constantemente en movimiento. Tuve que deshacerme de Baby y usar autos al azar, pero siempre me aseguré de llevar tu abrigo conmigo. Sé que Sam me vio tomarlo la primera vez, pero no dijo nada. Sólo me miró con lástima, triste. Nunca me preguntó por qué lo guardaba. ¿Por qué tuve que pasar por la molestia adicional de llevarlo de un automóvil a otro? - Decano se encoge de hombros.

- Decano, lo siento - Cas ni siquiera está seguro de saber por qué se está disculpando. ¿Por no estar ahí? ¿Por crear ese lío en primer lugar? ¿Qué Dean pasó por todo esto solo?

Dean niega con la cabeza, - No depende de ti, Cas. Y menos cómo lo manejé. Por lo general, ignoraba sus preguntas, pero luego, el par de veces que, tal vez, aludí a que no estaba bien, me dijeron que me aguantara - Dean puede ver a Cas enojándose por eso, con razón, pero le aprieta la mano - Está bien Cas. Tuvimos mucho que hacer y la verdad es que no me esforcé tanto. Si lo hiciera, significaría realmente pensar en por qué me quedé con tu abrigo, por qué me aseguré de llevarlo conmigo, y no estaba listo para eso.

Un remolino de luz blanca y violeta los envía desde la orilla de un embalse hasta las afueras.

~*~*~*

Un demonio es arrojado por las escaleras que aterrizan a los pies de Castiel, o más bien de Emmanuel. Un Dean estupefacto observa desde el porche.

- Ni siquiera puedo comenzar a describir cómo me sentí al verte allí. Creo que ni siquiera me conocía a mí mismo en ese momento - Dean dice ver a su yo pasado quedarse sin palabras.

- ¿Así es como me encontraste? - él pide. Cas no recuerda mucho de este tiempo, por lo que es interesante presenciarlo ahora. Se siente un poco culpable porque puede ver lo difícil que es esto para Dean.