Capitulo 3

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Giyuu y Tanjiro siguieron caminando por un buen rato, en varias ocasiones el menor había intentado tomar otro rumbo pero el azabache no lo dejo

Giyuu: Ya casi llegamos, ya tranquilizate

Le había dicho lo mismo hacía cómo 2 horas, y Tanjiro ya estaba bastante arto, solo quería derrumbarse en el piso, estaba a punto de hacerlo hasta que por fin

Giyuu: Ya no te quejes, ya llegamos

Giyuu abrió la puerta y Tanjiro escuchó algo que creía haber olvidado

🎶 Kon Kon, Koyama no usugai wa. Naze ni o mi-mi ga nagaugazara. Chïsai toki ni kasama na. Nagau Konoha o tabeta yue. Sore de o mi-mi ga nagaugazara🎶

Eran 2 cosas, la dulce voz de una pequeña niña y…… una televisión

Giyuu: Toc Toc, ya llegué

Un segundo… ¿¡Cómo carajos ese lugar estaba en tan buen estado!? Ese lugar estaba impecable  y ¿¡Cómo carajos tenía electricidad!?

¡¡¡¡Papi!!!!
Giyuu: Hola Natsumi

Tanjiro miró a la pequeña, Yae…, fue lo primero que pensó, por supuesto, ¿Cómo se le ocurrió que Giyuu ya no estaría con ella? Era realmente un estupido, la pequeña Natsumi lo miro, esa pequeñita era una omega, realmente hermosa, su cabello negro con puntas moradas y largo que caía sobre sus hombros y su lindos ojos verdes, su piel ligeramente tostada

Natsumi: Tu cabello es muy lindo, ¿Cómo te llamas?
Tanjiro: Soy Tanjiro Kamado, un placer pequeña Natsumi

Tanjiro sonrió amablemente, la niña puso atención al olor y aroma que despedía el omega

Natsumi: Me gusta tu aroma a granada ¿Y por qué estás triste?
Tanjiro: ¿Triste? ¿Yo? Para nada, bueno ya me tengo que ir

El pelirrojo dio media vuelta dispuesto a irse

Giyuu: ¿Tienes a dónde ir?
Tanjiro: Pues claro que…… eh esté
Giyuu: no ¿Verdad?
Tanjiro: No
Natsumi: ¿Te quedas?
Giyuu: Sin problemas, te puedes quedar el tiempo que quieras, hay mucho espacio
Tanjiro: ¿Seguro?
Giyuu: Claro, además, me vendría bien una mano extra, vamos, es hora de cenar

Por fin cerraron la puerta y se dirigieron al comedor, Tanjiro solo rezaba por no ver ahí a Yae

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