Souvenir • Jenna Ortega

13

La mañana se pasó entre hacer la mudanza y limpiar el nuevo apartamento, el tío de Daniel le había enviado un Smart TV de regalo, y él se encontraba emocionado instalandolo en la que sería nuestra sala.

Olivia había decidido darme el día libre después de todo, según ella entendía que estaría cansada, por lo que mi amigo y yo pasamos todo el día instalandonos.

Había sido un día bastante cansado pero casi a la hora de la cena cuando vimos que estaba todo listo y que ahora teníamos un nuevo hogar el cansancio se convirtió en emoción.

Era una sensación reconfortante tener un hogar.

-Andy. Debemos ir a comprar comida. No tenemos ni siquiera agua. -Señala la nevera.

Él tomó un carrito una vez llegamos al supermercado y mientras hablábamos de cómo repartirnos las tareas elegíamos qué llevar.

-A ver, ¿entonces sí me vas a contar que pasa con Jennita? ¿O me tengo que arrodillar?

Ruedo los ojos.

-¿Te gustan estas barritas? -Le muestro una caja de barras de cereal al azar.

-Deja de cambiar el tema. Quiero saber el chisme de tu novia. -Me quita la caja y la coloca en su lugar. Regresando al carrito.

-Ella no es mi novia.

-Te quedas en su casa y ella en la tuya. ¿Eso qué es?

-No tiene nada que ver. -Me defiendo. -Tú y yo vamos a vivir juntos y no estamos casados.

-No me salgas con esa. -Me regaña parando para meter algunas cajas de botellas de agua en el carro. -Cuentame, necesito actualizarme.

Lo dudé un poco, es que en realidad no sabía explicar la relación que llevaba con la actriz.

-Bueno, nos besamos anoche y... -
-Daniel detuvo el carrito de golpe, haciendo que las latas y leche que traíamos se cayeran en este. Me miró colocándose las manos en la cabeza con una sonrisa en el rostro.

-DIOS ACABO DE GANAR LA APUESTA.

-¿APUESTA? -Pregunto.

El saca su celular y marca algunas cosas ignorandome. Luego empieza a agrabar una nota de voz.

-¡Georgie no vas a creer esto me lo acaba de contar! ¡Me debes 200$! -Suelta la nota. - continúa.

-A veces eres increíble. -Él sonríe inocente haciendo ver sus ojos pequeñitos. -La cosa está en que, nos vemos, salimos, me invita a eventos, se queda en mi casa, y no hablamos de eso.

-¿O sea que se besaron y no hablaron?

-Nos dormimos porque era muy tarde y ella tenía trabajo hoy temprano, así que.

-Andy, ¿Ella en serio te gusta?

-Ella me encanta. -Le digo dejando algunos paquetes de arroz y pasta en el carrito. -Es hermosa Daniel. Como piensa, como actúa, como se expresa. Es divina esa mujer.

-Mira, sabes que amo verte así en serio. Soy muy feliz por esto. -Me mira atentamente. -Pero necesito que tengas cuidado ¿Si? Ella ya no es la misma chica que iba a tu trabajo a pedir algo de tomar para verte. No digo que te hará daño, pero salir con una celebridad debe ser complicado.

-Se que externamente no lo es. -Suspiro retomando mi camino. -pero te lo juro, ella sigue siendo la misma.

Continuamos haciendo nuestras compras, llevando todo lo necesario para al menos un mes, al no saber aún cuánto realmente necesitabamos llevar. Dividimos la cuenta y luego de pagar regresamos a casa a acomodar todo, él había comprado algunos platos y vasos anteriormente, y yo había conseguido unos utensilios de cocina que nos salvarían la vida las próximas semanas.