Memorias Perdidas (2#CB)

Parte 5

Casa de tía Elisa (Distrito XV)

Domingo 7 de Mayo del 2017

12:15

Un hombre aparentemente de la edad de mí papá entró por la puerta, acompañado de un viejo gran danés que mueve su cola muy emocionado.

—¿Bastián?

—¿Gabriel?

—No te veo hace años ¿Como estás? Cariño, siéntate, yo haré café para todos. No quiero que te esfuerces.

—Estoy bien, yo lo termino.

—No, no –La acompaña hasta una silla vacía en la mesa, tomándola de la mano – mis mujercitas se deben cuidar mucho.

—¿Mujercitas?

—Estoy embarazada Gabriel –dijo mí tía mientras es ayudada a sentarse despacio y con cuidado– es un embarazo de riesgo por mí edad y algunas enfermedades hereditarias.

—¿De cuántos meses estás? –Pregunta Adrián sorprendido.

—Ya estoy de 5 meses, pero no sé me nota la panza aún. Tampoco se ve demasiado porque subí mucho de peso.

El ambiente de repente se volvió muy tranquila, cálido y animoso.

Bastián empezó a servir café para todos, menos mí tía, de una cafetera.

—¿Qué los trae por aquí? –Pregunta alegremente quien presupongo es la pareja de mí tía mientras coloca las tazas en frente de nosotros.

—Hemos venido a hablar de algo en familia...

—Entonces puedes contarlo para todos –Sigue diciendo de forma animada Bastián. Se vuelve a la cocina a prepararle a mí tía una malteada.

Mí padre no habla, se muestra muy serio, sé que está dudando entre contar con lo más descabellado que se enfrentó hasta ahora.

—Vamos Gabriel, somos buenos amigos.

Se sienta al lado de mí tía, le da su taza a ella y ella toma la taza con ambas manos. Adrián toma su taza y le da un sorbo. Mí padre lo mira fijamente a los ojos y yo soy incapaz de dejar de mirarlos a ambos. Puedo sentir como vuelve a instalarse la tensión en esta mesa solo que un poco más fuerte que antes.

—También hicimos la promesa de volver a hablarnos, ni encontrarnos nunca más.

Se ríe entre dientes, le da un sorbo a su café y suelta una frase que duele un poco, un poco más que antes...

—A veces las cosas no salen como lo planeamos.

★★★