Touch (Traducción) Levyaku

Parte 7

En retrospectiva, hubiera sido bueno preguntar cuál es el código de vestimenta en un baile . Sin embargo, Yaku intenta no castigarse por no preguntar; esa fue una noche extraña. Estaba estresado, y eso es explicación suficiente de por qué se emocionó tanto con la pizza y los juegos. En cualquier caso, cree que simplemente ducharse y cambiarse después de la práctica es una buena cantidad de esfuerzo de su parte.

Todavía tiene que correr a su lugar de reunión en el centro.

Respira con dificultad cuando se acerca a la esquina donde se encuentran, casi tarde. Los compradores todavía están dando vueltas y la calle está iluminada por las luces y las exhibiciones de las tiendas. Cuando ve a Lev parado en la esquina de una tienda de deportes, obviamente esperando a alguien, reduce la velocidad.

Es Lev , piensa Yaku, y por supuesto es Lev, no necesita recordárselo a sí mismo, pero de alguna manera su mente se tambalea con la información. El Lev que lo espera no se parece a Lev; parece un modelo, con las manos metidas en los bolsillos de una chaqueta azul marino, la bufanda ingeniosamente arreglada sobre el cuello, jeans que le quedan mejor que cualquiera que se ponga Yaku, la cabeza volteada sobre un hombro para que Yaku solo lo vea de perfil. Es Lev, pero no lo es, porque Yaku no está acostumbrado a estar tan nervioso al ver a Lev. Tampoco es el único que mira; escucha risitas de un grupo de chicas que Lev parece estar ignorando incondicionalmente.

Yaku se siente raro. El extraño sentimiento de tal vez estoy solo, regresa, y él quiere correr, quiere darse a conocer y dejar que el entusiasmo de Lev lo atrape y lo envuelva. Este extraño-Lev es solo eso: un extraño. Una persona elegante que pareciera no tener con el ningún acercamiento.

Le da una sensación de vacío justo debajo de su caja torácica.

Debe hacer algún sonido, o tal vez su quietud se ve extraña en la visión periférica de Lev, porque de repente la cabeza de Lev gira y su rostro esboza una sonrisa. El sentimiento de vacío se disipa; esto no es extraño.

"¡Yaku-san!"

Lev parece listo para avanzar pero Yaku le indica que se quede allí. Cierra la distancia entre ellos, y cuando reúne el coraje para mirar correctamente a la cara de Lev, se da cuenta de algo. Más específicamente, tres cosas: el cabello de Lev está recogido hacia atrás con tres pasadores brillantes con cintas, obviamente originarios de Ayako. La ridiculez de esto debería estabilizar a Yaku, eliminar esa extraña visión del modelo-Lev de su retina, pero en cambio, Yaku se siente aún más a la deriva. Su cuerpo está caliente y dolorido, su mente gira muy rápidamente en torno a un hecho que ha estado dando vueltas durante un tiempo.

Me gusta el. Me gusta el. El realmente me gusta.

Traga saliva.

Lev se queda quieto mientras Yaku alcanza los clips, luchando por no congelarse cuando toca el cabello de Lev por primera vez; es suave como un susurro contra sus dedos. Él continúa, quitando los clips uno a la vez, deseando poder pasar sus dedos correctamente a través de él.

Desea no estar deseando eso, y luego se da cuenta de lo cerca que están, cómo se estira para alcanzar la cabeza de Lev, y su corazón late a toda marcha.

Deja caer los clips en la mano de Lev. Intenta no tocarlo, realmente lo hace, pero la palma de Lev roza la suya de todos modos, y los dedos fríos golpean los cálidos. Un escalofrío rueda por la columna de Yaku, agradable a pesar de que no es bienvenido.

No puede obligarse a mirar a Lev a los ojos.

"Oh", exclama Lev. Yaku resopla una carcajada, aún evitando el contacto visual.

"¿Nos vamos?" él pide.

"¡Sí!" Lev dice, recuperándose. "Mis padres nos están guardando asientos. Probablemente estén en el frente.