Cómo impedir tu muerte después de ofender al Rey de Elfora, Yahoo Respuestas!
Fue lo primero que pensó mi mente tras enterarme que tengo frente a mí al mismísimo Rey. Un Rey Elfo buenote, pinche belleza de Dios Griego, su reputísima madre. Me prende.
A todo esto, él espera algo.
—¡Rinde tu reverencia ante mi Amo! —grita el zorro.
—Ah, chucha, sí.
Y caigo como el estúpido que soy al suelo. Claramente no sé hacer reverencias, pero después de un rato, y aunque espero que me diga tan siquiera que soy un insecto y me ejecutará por maleducado, él no dice nada.
Así que levanto la cabeza y lo segundo que veo es una elfa venir hacia nosotros. Porta un hermoso vestido tejido a mano con la mejor tela del mundo y con un acabado estelar hecho con hilo lunar. Esa madre está cara.
Caritsima de París.
—Mi Rey, perdone la tardanza, mi vestido... —guarda silencio apenas y me ve. Es hermosa. Su cabello es dorado, sus ojos igual brillan bajo ese mismo tono, pareciera que tiene al sol derritiéndose sobre ella. Delgada y alta, con una figura moldeada a la perfección por el mejor escultor del universo mismo—. ¿Puedo preguntar quién es él?
—Un humano cualquiera —responde enseguida—. No es importante.
Dicho eso, toma a la elfa del brazo y la escolta a un paseo por el jardín.
—In himini cilquiri. Ni is impirtinti —arremedo y el zorro se ríe bajito—. Pues que sepa que a mí me pela un huevo y me chupa el otro. Mexicano que se respeta le parte su madre a cualquiera, pero... se trata de un rey... posiblemente no sea lo más inteligente que haga en mi vida —termino divagando entre mis pensamientos.
—¿Qué es Mexicano?
—Lo que soy.
—¿Eso es una raza entre humanos?
—Correcto. Soy una raza totalmente distinta a ustedes, y soy mucho mejor.
—¿Cómo puedes ser mejor que un Elfo?
—Créeme —sonrío orgulloso—. Soy mejor en muchos aspectos.
—Es difícil de creer... que un humano sea mejor que un elfo —aclara el zorro.
—Cualquiera pude ser mejor que otros, incluso si es una raza superior o inferior. Pero siempre se debe ganar el respeto, cuando el respeto es impuesto se crea discordia, y entonces todo se pudre entre miedo y rencor. No es bueno.
—¿Cuál es tu razón para afirmar tal cosa?
—La cualidad y particularidad que nos caracteriza como individuo.
—¿Existe algo así? No lo logro comprender del todo, de por sí los humanos ya son complicados, pero tú tienes algo que me causa intriga, aunque no sé qué pueda ser.
—Por ejemplo —intento desviar su intuición y, para mi fortuna, lo hago en cuanto sus orejas se alzan en señal de interés—, yo soy mejor que tú bailando, pero tú eres mejor que yo al ser un zorro mágico que sirve al Rey, eso quiere decir que, aunque seas un animalejo maleducado, eres especial. A eso me refiero.
—Tienes razón —afirma el zorro—. Me gusta tu pensamiento, es algo que se puede aplicar según se requiera la situación. Como hoy —salta de nuevo mi hombro y señala el interior—. El bailarín del Palacio sufrió un desgarre ensayando, así que trajeron a los dos mejores bailarines de Haena. Tú y esa humana fueron mejores que todos los demás, incluso entre los elfos que les acompañan.
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HAENA
FantasyJorge despertó en medio de un escenario. Confundido, y sin saber cómo llegó allí, hace lo único que ama hacer: Bailar. Sin saber que su baile no solo encantará a todos los presentes, sino que se robará de primera mano el corazón de un enigmático adm...