Capítulo 23

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Un fuerte dolor de cabeza sentía Suga al despertarse, aparte del dolor de cabeza también sintió dolor en sus manos y abdomen dándose cuenta que tenía vendajes en esas áreas del cuerpo. Al ponerse de pie y mirarse en el espejo, escuchó un golpe en la cocina, salió del cuarto y vio a Yeji cocinando.

- Por fin despiertas, te prepare una sopa para la resaca. -Dijo la joven al servir un plato, viendo como Suga se sentaba sin decir nada. Ambos desayunaron juntos sin decir nada, Yeji lo miraba de vez en cuando y él solo tenía la mirada en la comida con los ojos semi-cerrados.- Eres igual a un dumpling.

- ¿Qué? -Suga terminó de comer y abrió los ojos de golpe como si recién hubiera despertado.- ¿Cómo llegaste aquí? No le di a nadie mi dirección, ¿Acaso me seguiste, acosadora?

- "Acosadora" Me llamaron del club en donde estabas cuatro días tomando, te saqué de ese lugar y te lleve a tu cuarto de hotel... Deberías agradecerme. -Arrugó la nariz al ver como Suga sonreía.- Bueno aunque yo también debo agradecerte, tienes todos esos golpes por culpa mía, ya que me salvaste de Jimin, ambos se golpearon y cuando ganaste nos fuimos de allí, me indicaste donde vives así fue como llegue.

- ¿Jimin? ¿El fotógrafo de mi cuñada? ¿Por qué me pelee con él? -Él no tenía ningún recuerdo del día anterior, suele recordarse de todo pero quizás era por los días que estuvo intoxicado de alcohol.-

- Me defendiste, él intentaba hacerme tomar y luego me dio una bofetada, apareciste de la nada y lo golpeaste. -Yeji bajó la mirada al relamer sus labios.- Entonces ¿No te acuerdas sobre lo que pasó ayer?

- ¿Por qué? ¿Cometí algún error o dije algo? -Suga notó como las mejillas de Yeji se enrojecieron.- ¿Hicimos...algo ayer?

- No, para nada. -Se puso de pie torpemente al llevar los platos al lavadero, mientras lavaba recordaba como la noche anterior mientras el curaba las heridas Suga la había besado, pudo haber pasado algo más pero ella lo detuvo ya que no quería que esa noche especial entre ellos fuera producto de una borrachera, y como ahora no lo recordaba decidió dejarlo así.-

••• En el camerino de Chae •••

Chae se encargaba de curar las heridas que Jimin tenía en el rostro y en los nudillos de cada mano, Jimin estaba más concentrado en verla que en sentir el ardor por la pomada y el alcohol.

- Debes tener más cuidado, no puedes ir defendiendo sin protegerte primero; mírate, estás todo golpeado. -Sermoneaba la artista al poner las cuerdas y vendajes sobre las heridas que tenía Jimin, según él no pudo ir al hospital ya que tenía mucho trabajo que hacer.-

- Tenía que hacerlo, estaba tan indefensa que tenía que intervenir... -Jimin mentía la mayor parte del día, cada palabra que lanzaba eran mentiras muy bien elaboradas.- Hoy te ves muy linda.

- Ya hablamos sobre esto, tengo novio y eres un amigo para mi. -Chae dejaba en claro los límites y en momentos como este se daba cuenta que Jimin nunca cambiaría, así que debía buscar un buen momento para decirle que lo mejor era dejar de ser amigos.- Jimin eh estado pensando sobre esto y-

- Uno nunca sabe cuánto tiempo duran las relaciones, una simple pelea puede acabar con el amor que sienten y quiero asegurarte que yo... -Se detuvo al escuchar una voz varonil detrás suyo diciendo "cariño", era claro quién era así que dio un suspiro.-

- Parece que tú "amigo" es un poco sordo, y aunque nos separemos cosa imposible tú seguirás siendo su amigo para mi novia ¿Te quedo claro? -Susurré al tener un completo control de ira y celos, viendo como él salía del camerino.- Lo detesto completamente.

- Pensé que podíamos ser amigos pero me doy cuenta que no puede ser, buscaré un momento a solas y le diré sobre nuestra amistad... Debo terminar esa amistad, ya que él cree que podemos ser algo más y eso no es posible porque yo estoy enamorada de alguien más.

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