[32] Vínculo

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El peso del cuerpo de Taehyung cayó sobre él, tembloroso y débil, buscando apoyo.

Mío.

Tenía los ojos cerrados de placer, la boca abierta cubierta de baba y los labios rojizos debido a la presión de los de Jungkook contra ellos.

Mío.

Sentía el temblor de la cintura de Taehyung bajo sus palmas, la forma en que se amoldaba en sus manos pidiendo que lo tocara.

Mío.

Sonidos incoherentes seguían saliendo de su boca incluso cuando ya habían terminado, esos maullidos diciendo su nombre lo instaban a tomar más incluso sabiendo que Taehyung no podría soportarlo.

Mío.

Suyo. Todo era suyo.

Eso es en lo único que pensaba Jungkook.

Rompió a una persona. Lo convirtió en nada, y mierda, se sintió mucho mejor de lo que jamás hubiera imaginado.

No quería detenerse. El hecho de que su lujuria se hubiera ido no significaba que su necesidad también.

Quería cada centímetro de la piel dorada de Taehyung para sí mismo. Quería marcarlo, dejar chupones donde su cuello ya no estaba apretado por el cinturón, herir sus muñecas, dejar marcas de mordiscos en sus muslos y huellas de sus manos en su trasero. Quería que el rostro de Taehyung se manchara permanentemente de negro y azul.

Besaría todos los moretones que florecieran en su piel y haría otros nuevos antes de que los viejos se desvanecieran por completo. Deseaba vivir en un mundo donde Taehyung no necesitara cubrirse, donde pudiera hacer alarde de todo lo que Jungkook le daba.

Y Jungkook quería mostrarles, a todos aquellos a quienes les importaba y a los que no, con sus brazos alrededor de la cintura de Taehyung mientras sus labios acariciaban la obra de arte que tenía en el cuello, que Taehyung le pertenecía a él y solo a él.

Mío

Mío

Mío

Con una de sus manos sosteniendo firmemente al peliazul, usó la otra para salir de él, poniendo todo su esfuerzo en ser lo más cuidadoso posible.

Taehyung se quejó por la pérdida y el sonido fue directo a las entrañas de Jungkook. Él tampoco quería moverse.

Cuando se relajó por completo, Taehyung se apretó alrededor de la nada, haciendo que el semen goteara, deslizándose por todas sus nalgas y muslos. Jungkook gimió ante la vista y todo el cuerpo de Taehyung se estremeció contra él.

El chico era tan malditamente receptivo.

"¿Puedes sentarte para mí, cariño? Tenemos que quitarte tu bonito collar."

Jungkook no pudo reconocer su propia voz. Era ronca y áspera, pero al mismo tiempo suave, tierna y cariñosa, completamente inusual en él. Y el apodo también salió de sus labios como si nada, a pesar de que solo había hablado así una vez en su vida, años antes, cuando pensó que estaba enamorado.

Ahora le parecía gracioso cómo lo que alguna vez consideró amor, era mil veces menos poderoso de lo que Taehyung le hacía sentir.

Era gracioso, pero confuso. Aterrador.

Taehyung luchó un poco, sus movimientos temblorosos e inseguros mientras trataba de juntar las piernas y sentarse sobre los pies.

Jungkook se acercó un poco más, su cuerpo quedando pegado al de Taehyung de nuevo, disfrutando de cómo el otro chico suspiraba con rebeldía cuando su cabeza se inclinó hacia atrás sobre su pecho. Tocó la barbilla de Taehyung para animarlo a levantarla, y así lo hizo, exponiendo su cuello.

I want (to punch) you so bad ☆ KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora