I want (to punch) you so bad ☆ KookV

[36] Desenmascarado I

Jungkook sabía muy poco sobre estar enamorado.

Sus padres nunca se tomaron de la mano, ni siquiera se besaban, o al menos no podía recordar demasiados momentos.

Una vez, en el cumpleaños de su mamá, su papá llegó con un ramo de rosas como sorpresa. Su mamá sonrió - fue un espectáculo algo extraño ya que ella casi siempre estaba frunciendo el ceño - y luego se besaron.

Jungkook estaba tan emocionado que les preguntó si solo se besaban en sus cumpleaños, pero luego de su inocente pregunta, su madre volvió a fruncir el ceño y estaba bastante seguro de haber visto lágrimas en sus ojos.

Jungkook lloró mucho ese día. Lloró porque pensó que finalmente sus padres se amaban y que él lo había arruinado todo.

No sabía mucho sobre sus vidas antes de que él naciera, solo sabía que eran diferentes. En las fotos estaban tomados de las manos, se besaban, su mamá siempre estaba sonriendo.

Entonces, cuanto más crecía Jungkook, más pensaba que el amor solo podía ser suficiente para una persona, por lo que cuando él llegó a sus vidas, su mamá trató de amarlos a su papá y a él con todo su corazón, pero algo salió mal, algo se rompió dentro de ella y ahora ninguno era amado.

Así que cuando Jennie le sonrió en su tercer día de clases y su corazón dio un vuelco dentro de su pecho, se asustó. Ella lucía como alguien a quien él podría amar.

Sin embargo, no sucedió de inmediato. Pasaron meses hasta que hablaron entre ellos. Jungkook, en ese momento, no estaba muy acostumbrado a que chicas lindas se le acercaran y le preguntaran su nombre, pero lo comprendió a la perfección, ya que de alguna manera terminaron teniendo una cita. Se besaron una semana después, durmieron juntos un mes después y se dijeron te amo tres meses después.

Jungkook era feliz. Su amor se parecía al de las películas y ese era el único amor que conocía. Le gustaba tener una mano que tomar y unos labios que besar. Le gustaba sentirse amado.

Era una tontería ahora, pero él realmente pensó que algún día se iba a casar con ella, que iban a tener una gran boda. Pensó que sus padres los observarían y tal vez, si veían su amor, podrían recordar cómo amarse entre ellos. Tal vez, solo tal vez, podría reparar lo que arruinó.

Después de su ruptura, se dio cuenta de que todas esas veces en las que él hablaba de algo y ella parecía no escuchar, no tenía nada que ver con que tuviera problemas de atención, tenía que ver con que a ella no le importaba.

No fue amor, fue un desesperado intento de.

Jungkook siempre tuvo tiempo para ella. Siempre la escuchó, la consoló, cargaba su equipaje en la espalda sin darse cuenta de que ya tenía suficiente con el suyo propio, el cual poco a poco fue aplastándolo.

Su corazón no se rompió cuando ella le dijo que lo había engañado, pero su ego se sintió herido. Él no podía soportar el hecho de no hacer algo bien, más incluso cuando ponía todo su esfuerzo en ello, por lo que después de un año de solo dar lo mejor de sí, que le dijeran que no era suficiente, dejó una marca en su persona.

Comenzó a alejar a la gente mentalmente y a atraerlos físicamente. Después de un tiempo se acostumbró a repetir la misma técnica - sonríe, asiente con la cabeza, di un cumplido o dos, sé asertivo pero no agresivo, al menos no hasta que la tengas en la cama.

Cuanto más lo hacía, menos tenía que esforzarse. Las personas se empezaron a acercar, y rara vez tenía que explicar lo que realmente esperaba de ellas - quítate la ropa, mantén la boca cerrada y deja que yo haga todo el trabajo - Jungkook no las forzaba a nada, no importaba cuanto quisiera hacerlo, pero si no podían soportarlo un poco más rudo de lo normal, al segundo estarían fuera de la habitación. Era tan simple como eso.