Ryūjin: El rey dragón. [+18]

Encuentros afortunados.

T/N: Me tomo casi dos semanas poder acabar este capitulo, tuve algunos problemas emocionales, pero ya estoy bien. Así que me esforzare por actualizar el otro fic Cristarito "Placeres ocultos".  

Les recuerdo que contiene lenguaje subido de tono y algunas escenas +18. Si eres menor de edad te agradeceré abstenerte de leerlo, al igual si no te gusta te pido pases de largo. ¡Gracias por sus lecturas!

Capítulo 3: Encuentros afortunados.

Había pasado un mes desde que Javier se acostó con aquél alfa dominante. Algunas noches soñó con él, para fortuna justo cuando regresó a su recámara. Lo que su hermano menor Diego le había dicho sobre la mala interpretación y la imagen de inscesto que tenía al estar con Guillermo lo hizo replantearse que cada uno necesitaba su privacidad. Y que el bicho estuviese en sus más bajas pasiones mientras Morfeo lo tomaba en su regazo, realmente le preocupaba.

Tenía duda si pudo quedar preñado esa única vez, si era así no tendría que preocuparse más por el heredero, por el contrario, si no lo estaba tendría que buscarlo nuevamente, de algo estaba seguro y era que no iría de cama en cama con todo alfa que se cruzara en su camino. Un omega dominante como él no podía ser el pasatiempo de cualquier idiota, si algo tenía Javier era ser la reina más asesina y su único poseedor tenía que ser otro dominante, hasta en ello había jerarquías.

— Chícharo, deja de estar así de crispado. ¿Qué te pone tan nervioso? — se dijo a sí mismo al mirarse al espejo sosteniendo una prueba de embarazo. El resultado era incierto, pronto tendría su ciclo de calor en caso de no estar embarazado. Así que lo normal sería correr hasta ese lugar y volver a coger con el alfa, aunque su orgullo no le haría rogar por ese enorme miembro. — Bien, sólo debes orinar sobre esto y así sabrás si es necesario buscarlo.

Con mucho cuidado dejó salir el líquido mañanero que era más concentrado, esperó unos minutos hasta que la prueba arrojó un "negativo". Decepcionado pensó en una solución para ello, tal vez necesitaba estar en celo para que ocurriera. Aunque era algo peligroso, si lo ponía en esos términos, no sólo el bicho podría abrirle las piernas, en ese estado sería vulnerable y no quería que cualquier pene entrara en él. Reconocía que ese alfa dominante era guapo, era bueno en la cama y también tenía un enorme paquete. Si, Javier comenzaba a pensar que tenía falofilia.

— Javier. — Escuchó tocar la puerta y rápidamente escondió en el bote de basura la prueba de embarazo. — Javier, pronto será la junta con los socios, es mejor que te apures. — Escuchó la voz de James quien sería su acompañante, no se sentía feliz de estar cerca, no obstante, era el único confiable después de sus hermanos que sabía su origen como omega.

Salió de la habitación y miró al alfa quien portaba un elegante traje color Oxford que hacía juego con la camisa blanca, resaltando una corbata azul. — Sé que odias que venga a tu espacio, pero tenemos el tiempo contado.