Me acuerdo todos los días, como si fuera ahora mismo, cuando el Mundo se paró sin avisarnos,
Estaba perdido, solo se divisaban las huellas de mis pasos en la distancia de la fría nieve,
En un cambio de nuestras miradas tropecé desfigurando al momento a otro lugar,
Al quererme levantar, me di cuenta que estaba solo,
Me sentí fuera de mí, anulado sin lograr desahogarme,
Callado sin decir una palabra al viento, me incorporé y seguí caminando,
La capota del Cielo se recrudeció aún más, daba la sensación que las nubes iban a caerse de golpe al suelo, donde entre el suelo y el Cielo estaba mi Ser,
En aquel momento, me armé de valor haciendo frente al Mundo que me venía,
Me puse a correr haciendo zancadas para sacar mis piernas de la gruesa capa blanca, que me empezaba a envolver,
Sentí dolor en la ausencia, "allí en el medio de la nada",
Se había hecho de noche,
Mi Vida la compartía con el olvido,
Había que seguir,
No podía parar,
Me decía a mí mismo, ¡Corre!, ¡Corre!, ¡Corre más rápido!,
Sentí en mis carencias desfallecimiento,
La mente me estaba buscando mis puntos débiles,
Me preguntaba una y otra vez, ¿Cómo pude llegar a esta situación?,
En mi desamparo me respondía, ¡Sólo soy un humano, tengo derecho a equivocarme!,
Volví a insistirme diciéndome, ¡Corre!, ¡Corre!, ¡Corre!,
¿Dónde estaba la salida?, ¡Mi salida!,
No encontraba el final,
Mi dolor aumentaba,
La mente me seguía traicionando,
El frío hacia llamadas a las puertas de mi Corazón,
Y mis pies acompañados por la decepción, seguían pisando la gruesa capa helada blanca,
¡Me paré!,
Sin esconderme en la oscuridad al acercarme a ti, noté como al Sol con un Rayo de Luz nos llegaba de perfil desde la ventana de nuestros Sentimientos,
Justo en ese momento recapacité y volví a tomar tu mano,
Cuando nos miramos a los Ojos, los dos hicimos lo mismo,
Cerramos los Ojos por un instante,
Salimos corriendo, sabiendo que huíamos del invierno,
Por un momento, Sentimos el Calor de nuestros Abrazos, mientras hacíamos el Amor.
Antes de darse cuenta el mismo instante, jamás pensé que nuestro Mundo helado al unirse, ardiera echando llamaradas,
Encontrarnos fue la llegada de una nueva etapa, después de un largo y gélido invierno,
Al encuentro, sin esperar nos pusimos a correr haciendo con movimientos acelerados largos pasos, "como si alguien nos persiguiera, queriendo alcanzar",
Mientras tanto, notamos la llegada de la Primavera,
La espesa capota gris que predominaba sobre nuestras cabezas, desapareció,
Observando un limpio y esplendoroso Cielo azul celeste, se sentía en los brotes de las hojas el eco del murmullo de las aves,
De lo que fue una capa blanca con huellas, se transformó en verde pradera con arroyos que conducían a las puertas de nuestros Corazones,
Me acuerdo todos los días, como si fuera ahora mismo, cuando el Mundo se paró sin avisarnos.
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La Linea Paralela 3
RandomRelatos de Reflexión - Escritos de Amor - Felicidad y Sentimientos