Pilar del Sol

Capítulo 2

El Cuerpo de Exterminio de Demonios se encargaba, de forma totalmente anónima, de asesinar a los demonios que vivían en Japón, a aquellos seguidores de Muzan que perseguían a los humanos como sus presas y que los devoraban como si no fueran nada más que comida para ellos. Eran enemigos naturales. Los demonios cazaban humanos y los cazadores de demonios perseguían a estos hasta darles un final completamente apropiado rebanando su cabeza, separándola del cuerpo para darles final a sus miserables vidas.

Una vez al año se lleva un examen que permite a los jóvenes acceder a su puesto como cazador. Este examen es preparado por el Cuerpo de Exterminio de Demonios y solo aquellos con una formación en una de las respiraciones podían tomar este examen y sobrevivir, tras el cual reciben un pedazo de hierro de Nichirin que da forma a las hojas de los cazadores, al arma que estos usaran para cazar a los demonios que asolan las ciudades de Japón.

Así como los demonios cuentan con las Lunas, los cazadores tienen a los Pilares, poderosos humanos que han superado los límites propios de un ser humano y toman el rol de líderes cuando es necesario, teniendo un poder equiparable a una Luna Demoníaca que les permite combatir por sí solos a los demonios durante cierto tiempo, pues, aunque son poderosos, siguen siendo humanos.

El incidente del Tren del Sueño Infinito dejó a diversas personas heridas, a tres jóvenes cazadores volviendo al hospital en la Mansión de las Mariposas al cuidado de los médicos. Pero no son los únicos cazadores que son cuidados por Shinobu y sus compañeras. Habiendo detenido la hemorragia, el Pilar de la Llama fue salvado de una muerte segura por otro de sus compañeros, siendo este último quien movió a Rengoku y detuvo el sangrado haciendo uso de vendas, todo mientras peleaba mano a mano contra el demonio que hizo descarrilar el tren y que casi mató al pilar, dejándolo al borde de la muerte.

Los médicos cuidaron al Pilar e hicieron todo lo posible para mantenerlo vivo, algo que lograron de milagro. Si el otro cazador no hubiera llegado cuando lo hizo, el pilar no habría salido vivo del enfrentamiento y ahora no estaría entre los vivos.

―...

El cazador encargado del rescate de los tres estudiantes de Rengoku y del mismo pilar fue citado por el líder del Cuerpo de Exterminio de Demonios dentro de su mansión, algo que este solía hacer solamente con los pilares, por lo que un cazador inferior a este rango extrañamente era llamado por el líder del grupo.

―Ah, Naruto-kun―el cazador miró directamente al hombre que lo había llamado por su nombre. Este era de cabello oscuro hasta los hombros, de ojos apagados y con la mitad superior de su rostro mostrando un color rosado―. Es bueno saber que no recibiste herida alguna durante el encuentro. ¿Tus espadas están bien?

Naruto removió su capa de viaje y mostró la katana y la espada más ancha al hombre frente a él, demostrándole que ninguna de sus dos espadas había sufrido daño alguno durante el enfrentamiento con la Luna Superior Tres, aunque esta intentó partir el acero de sus armas con sus puños y Naruto estuvo casi seguro de que lo lograría.

―Veo que cuidas esas espadas con mucho esmero, Naruto-kun.

Kagaya Ubuyashiki era el 97ª líder del Cuerpo de Exterminio de Demonios. Habiendo sido maldecido en su juventud, Kagaya mostraba la piel de su rostro sin reparo alguno, mostrando con ello a sus subordinados lo que podían sufrir en un enfrentamiento con un demonio.

―...

―Jejej a veces olvido que no puedes hablar, mis disculpas―Kagaya señaló el cojín frente a él. Naruto depositó ambas espadas en el suelo y tomó el sitio que su jefe le señaló, cruzando una pierna sobre la otra y tomando la pose de loto―. Primero debo agradecerte por haber salvado la vida de los tres chicos, de las personas en el tren y del mismo Rengoku-san, quien ahora mismo vive gracias a que llegaste a tiempo. De verdad, muchas gracias.