Capítulo 113

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La mañana en que Han Jiang Que salió de Ciudad B, el cielo estaba gris y encapotado, y de vez en cuando caía una fina nevada en el aire. El amanecer se ocultaba tras espesas nubes, como un rostro sombrío que mirara en silencio a la tierra.

Puso el móvil en silencio en el bolsillo, la autopista hacia Jincheng estaba vacía, el mundo entero estaba tan tranquilo.

Había tanta calma que hasta daba un poco de pena.

El viaje duró unas tres horas y 15 minutos, siguiendo la ruta 13, pasando por tres gasolineras y subiendo un corto tramo de escarpados puertos de montaña antes de llegar por fin a Jincheng.

Jincheng, su ciudad natal, es una pequeña ciudad del norte.

El aire parece estar perpetuamente empañado y aquí no hay industrias lucrativas, por lo que los jóvenes se marchan año tras año, e incluso los parques y zonas de recreo van cerrando poco a poco debido al envejecimiento de la población residente.

Lo que casi nadie sabe es que Han Jiang Que suele volver solo así.

Nunca coge el tren de alta velocidad, quizá porque está acostumbrado a conducir él mismo en Estados Unidos, y prefiere conducir solo en silencio.

El largo trayecto le resulta tan natural como una bestia en una migración solitaria.

Su memoria es tan defectuosa que Han Jiang Que no es muy bueno para pensar detenidamente. Siempre vuelve a su patria helada por instinto, donde el olor de ella le llama en todo momento.

......

En invierno, Jincheng es como una larga hibernación.

Las calles suelen estar desiertas, la nieve recogida con palas y amontonada en el pavimento, y los viejos edificios a ambos lados están provistos de ventanas de seguridad de hierro, con un picahielo congelado debajo.

Se alojó en el único hotel Sheraton de Jincheng, donde apenas había huéspedes y la recepción estaba somnolienta todos los días.

Han Jiang Que paseaba lentamente por la ciudad en su coche, y en aquellos días el tiempo a veces iba rápido y a veces parecía ralentizarse.

Iba solo a muchos sitios.

Los lugares en los que había estado con Wen Ke.

Holliday KTV, el Parque de Atracciones del Lago Este, la tienda de fideos con carne de Lin'an Road, la pequeña tienda donde se hacían las fotos, todos estos lugares habían desaparecido.

Pero la Escuela Secundaria North Third sigue ahí.

La Tercera Escuela Secundaria del Norte sigue en la calle Luoyang, sin señales de renovación en diez años y con la pintura descascarillándose de las barandillas de la puerta de la escuela.

Han Jiang Que entró en la escuela por la puerta trasera, como había hecho infinidad de veces antes, y luego caminó por los pasillos fríos y ventosos del edificio escolar en la oscuridad para encontrar su aula y la de Wen Ke en aquel entonces: un aula vacía sin nadie en ella.

En el aula vacía, los pupitres estaban perfectamente ordenados.

La letra de la pizarra estaba un poco borrosa, escribiendo vagamente los deberes de las vacaciones de invierno asignados por el profesor.

La primera fila, la segunda fila, la tercera fila ......

Han Jiang Que contó el número y se dirigió a la octava fila.

El asiento estaba cubierto de polvo, no le importó, pero sopló el polvo y se sentó.

Han Jiang Que dirigió su mirada hacia el patio de recreo, a través del cristal sucio de la ventana, pero fue como si en ese momento hubiera viajado atrás en el tiempo para verles a él y a Wen Ke juntos en la pista del patio de recreo por un penalti.

Aroma a Vino [ABO] TerminadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora