agosto

últimamente me duele mucho el cora...

últimamente me duele mucho el cora, no sabía por qué.
y me fui al único sitio donde mi alma descansa, el sonido de las olas rompiendo apaciguó el caos de mi mente.

pero me seguía doliendo, así que puse música.
y aún así los trozos rotos seguían cortandome.

no lo entendía. hasta que la oscuridad entró en mi habitación y el silencio, el absoluto silencio hizo presencia.

eras tú. tu eras lo que me dolía tanto.
te habías vuelto a colar entre mis pensamientos, de manera discreta y sigilosa.

pero estabas ahí, tan guapo como siempre.
con esa sonrisa y el brillo de tus ojos azules como el mar.

tal y como yo te recordaba.
pero el pecho me dolía y mi alma estaba rota.

porque, tú ya no eras tú.
había olvidado el sonido de tu voz, el tono de tu risa, (había olvidado mi canción favorita).

y hoy volví a escucharla.
y mi alma lloró.
y mi corazón se rompió.

mi amor por ti seguía intacto, y no sabes cómo dolía.
porque no, no he olvidado la primera noche que pasamos juntos, ni el primer beso.

no he olvidado el nombre de tus mascotas, ni el camino a tu casa, ni lo feliz y triste que me hacías sentir.

no he olvidado que aún te amo.
que a veces te quiero de vuelta y que de tantas vueltas en mi cama, mis sábanas creen que soy un torbellino sin remedio.

a veces mi mente me hace una mala jugada y me recuerda la noche que nos conocimos, cuando al fin me miraste y nuestras manos se entrelazaron.

joder, estaba tan feliz y tan nerviosa.

te recuerdo. recuerdo a la persona de la que me enamoré, es a esa persona a la que solía pedirle que por favor volviera a mi lado.

te he dedicado muchas canciones, algunas más tristes que otras. te he encontrado vagando por mis sueños, y me he despertado (con cierta esperanza) buscando algún mensaje, alguna llamada.

te prometo que de ser así, te hubiera ido a buscar.
tengo la fecha en la que todo empezó tatuada en mi piel.
tengo el infinito colgando de mi cuello desde que me lo regalaste.

amor, mi más bonito, sincero y amargo amor.
no me había dado cuenta de lo mucho que te extraño.

de que aún creo en el amor, por la manera en la que solíamos ser, por cómo solías mirarme.
me he dado cuenta de que sin ti, el amor no existe.

de que he tratado de buscarte, de encontrarte.
prometo que he intentado seguir adelante sin ti, pero sigo sobreviviendo a tu ausencia, a tu silencio.

de alguna forma, sigo esperando.
realmente no sé qué es peor, estar enamorada o tener el corazón roto.

pero si que sé que ambas duelen.
a veces me pregunto si aún te acuerdas de mí, si alguna vez me cuelo entre tus pensamientos.

sigues siendo el amor de mi vida, probablemente sea así toda la vida.
no sé si algún día nos volveremos a cruzar, si alguna vez volverás a mirarme.

pero mientras tanto, espero que seas feliz, que consigas todo lo que algún día me contaste.
yo, me alegraré por ti, desde lejos.

pero contenta por saber que, hiciste todo lo que hace feliz.

hace tiempo que no me permitía sentir, porque ya sabes, no sé sentir poco.
pero hoy, esta noche, me voy a permitir sentir el dolor y el vacío que dejaste en mi vida, en mi corazón, en mi cama.

pusiste patas arriba mi vida, la desordenaste.
te fuiste y te llevaste todo contigo.
todo menos lo que yo sentía.

oh amor, no he encontrado el camino de vuelta a mí desde que me perdí en tu mirada, en ese azul que tanto me gusta.

y desde entonces estoy perdida, siempre a la deriva, siempre revuelta como el mar cuando el oleaje se revoluciona.

nunca consigo encontrar el camino de vuelta.
pero me alegra saber que mi último "te quiero" te lo dije, mirándote de cerca, con tus brazos rodeándome en un abrazo.

ojalá estés bien. ojalá seas muy feliz siempre.