༺𝐈'𝐋𝐋 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐘𝐎𝐔 𝐀𝐋𝐖𝐀𝐘𝐒༻ [𝐉𝐎𝐍 𝐁𝐎𝐍 𝐉𝐎𝐕𝐈]

⪻𝐄𝐩𝐢́𝐥𝐨𝐠𝐨⪼

›Jon & Rose‹

⪻𝓑𝑜𝓇𝓃 𝓣𝑜 𝓑𝑒 𝓜𝓎 𝓑𝒶𝒷𝓎⪼

29 de abril 1996

El juez había pronunciado las palabras finales para cerrar la unión en matrimonio de Jon y Rose. Después del reencuentro en aquel concierto hace 1 año, ambos platicaron toda la noche sobre su ruptura, sobre lo enamorados que seguían el uno del otro, querían retomar su relación y así lo hicieron.

Una vez más, a finales del año pasado, Jon le volvió a pedir matrimonio con el mismo anillo que le había devuelto cuando Rose se fue, ella alegremente volvió a aceptar, esta vez no se alejarían y si había algo que les molestara lo hablarían para aclarar las cosas.

Ahora estaban ahí firmando sus papeles de matrimonio, habían organizado algo pequeño, como lo habían planeado la primera vez, sólo eran los padres y hermanos de ambos, claramente los chicos de la banda con sus novias, y algunas amigas de Rose con igualmente sus novios, había sido algo muy íntimo.

—Por favor el testigo del novio que firme.— Richie se acercó para firmar, sí, Jon le había pedido ser testigo, era su mejor amigo, no podía pedírselo a alguien más.

—Perfecto. Ahora el testigo de la novia.— Debby, hermana de Rose, firmó para terminar todo el proceso.

—Por el poder que me otorga el estado de Nueva Jersey, los declaró marido y mujer, puede besar a la novia.—

Jon acercó a Rose por sus mejillas para besarla, los presentes aplaudieron para después alejarse y sonreírse mutuamente. La ceremonia dio por concluida para dejar lugar a la celebración que tendrían en el jardín que habían rentado para aquel día especial.

Fue un ambiente muy tranquilo, todos los felicitaron por su matrimonio, y a pesar de que a los padres de Rose en un inicio no les hizo mucha gracia que hubiera escapado de la boda con Henry para regresar con Jon, al final fueron cediendo con el tiempo.

La noche había caído y mientras todos los invitados estaban en el salón que incluía el jardín, la pareja fue a dar un pequeño paseo por el ahora solitario jardín. Iban tomados de la mano mientras veían el estrellado cielo.

—Me alegra que no hayas hecho el papel de la novia fugitiva de nuevo.— se burló Jon.

—¡Cierra la boca! Sabes que no haría eso contigo, te amo demasiado como para dejarte plantado.— respondió divertida Rose.

—¿Sabes? Cuando te vi en ese vestido blanco de novia en el escenario para llegar y acercarte a mi... supe que había ganado. Me enamoré de la mujer más increíble del mundo, por poco creí que te casarías con Henry.— admitió mientras tomaban lugar en uno de los sofás que había afuera.

—No dormí por tres días para saber cuál decisión sería la correcta, pero todos los caminos me llevaban a ti, tú eres el amor de mi vida, Jon, siempre has estado para mi, incluso cuando yo me fui de tu lado... debí darte una segunda oportunidad en lugar de huir.— dijo un poco arrepentida.

—Basta de momentos tristes, que eso quede en el pasado, ahora eres mi esposa y lo importante es que nos amamos tanto que por eso estamos aquí. Somos sólo nosotros dos contra el mundo, Rosie.— le dijo abrazándola por los hombros.

—Bueno... quizás ya no seamos solamente dos...— le dijo con una sonrisa.

—¿Por qué dices...?— en ese momento comprendió todo, la miró con sorpresa y luego dirigió su mirada al vientre de su esposa.

—¡¿Estás embarazada?!— preguntó sorprendido, casi lo gritaba, Rose le cubrió la boca mientras reía.

—¡Sí! ¡Jon, vas a ser papá!— él se lanzó contra los labios de Rose.

Él profundizó el beso mientras recostaba a Rose sobre el sofá, comenzó a besar su cuello para después subir sus besos a las mejillas de ella y terminar una vez más en sus labios.

—¡Es el mejor regalo de bodas! ¡Te amo mucho, Rosie!— le dijo sin que esa sonrisa desapareciera de su rostro.

—¡Me alegra que te gustara tu regalo de bodas!— ella lo besó una vez más.

Estaban sumergidos con los apasionantes besos que comenzaban a subir más de intensidad, el de ojos azules empezaba a levantar la falda del blanco vestido de su esposa mientras le acariciaba sus brazos y dejaba besos cerca de su cuello, Rose comenzaba a soltar pequeños gemidos por el tacto de las manos de su esposo en su piel.

—¡Oigan sus familias...! ¡Carajo! ¿¡De nuevo!? ¿¡Por qué siempre los encuentro haciendo esto!?— se quejó Richie mientras ambos recuperaban la compostura.

—¡Perdón Richie! No es nuestra intención.— Rose rió un poco avergonzada.

—¿Qué te puedo decir? Mi esposa es demasiado hermosa para evitarlo.— soltó Jon con una risa, Richie rodó los ojos con diversión.

—Como sea, sus familias los están buscando para el brindis.— les dijo y se fue.

—¿Cuando les diremos que estamos esperando un hijo?— preguntó el cantante, ambos sintieron escalofríos cuando él dijo aquellas palabras.

—En algunos meses, por ahora hay que festejar por nuestra boda, vamos o nos vendrán a buscar de nuevo, en casa podemos seguir.— ambos se levantaron y caminaron tomados de las manos para entrar al salón.

Les entregaron sus copas con champaña, tanto sus amigos como las familias Bongiovi y Winston estaban atentos a las palabras que dirían ambos.

—Cuando entré a esa sala de casting para simplemente cumplir mi sueño de volverme actriz, y conocer a mi banda favorita, no esperaba terminar enamorada del vocalista principal. Nunca pensé que cometería locuras basadas en el amor que sentía por una persona, y menos pensé que sería por ti por quien las cometería. Tuve errores, tuvimos errores pero al final pudimos solucionarlos, fue difícil pero todo esto es resultado del amor que nos tenemos, que te tengo y me siento afortunada de tener al mejor amigo, novio y ahora esposo que pude pedir, te amo.— le dijo para besarlo, todos aplaudieron.

—Antes de conocerte pasé por varias relaciones que habían terminado bastante mal, llegué a pensar que nunca podría ser suficiente para que una mujer me amara por completo, hasta que entraste no sólo a esa audición, también a mi vida, por mucho tiempo juré que sólo serías mi mejor amiga y me negaba a creer que sentía algo más por ti pero me di cuenta que siempre serás a la mujer que más amaré en toda mi vida, te dejé ir una vez y no pienso que pase una segunda vez, siempre serás especial para mi, y debo decir que, naciste para ser mi chica y yo fui hecho para ser tuyo, te amo, Rosie.— otro beso, y junto a eso más aplausos de parte de sus invitados.

Cuando nadie se percató, escaparon una vez más hacia el jardín para estar solos, el brillo en los ojos de ambos se mostraba como antes, todo volvía a ser perfecto, todo era como tantas veces los habían soñado, recuperaron sus viejos sueños y antiguas vidas, encontraron nuevamente ese lugar en donde ambos pudieron ser felices.

Ahora la noche era testigo de las caricias, las palabras, los abrazos y los besos de la pareja, nacieron para estar juntos sin importar que pasara, ellos se amarían siempre.

Fin.