Relatos de una mente violenta

La granja

Por fin eran vacaciones, mis amigos y yo estuvimos planeando un viaje de fin de curso, pensamos en un día de campo, pues sería el jugar ideal para tomar fotografías, tanto como de nosotros como de paisajes.
Sólo sería un fin de semana así que... Había que aprovechar.

Todo estaba listo, la comida estaba empacada, madera para la la fogata, ropa cómoda, las casas de campaña.
Nos reunimos en mi casa, la primera en llegar fue Grace, quien siempre era puntual, llevaba una pequeña valija así como su mochila, después Jared que llevó a su novia a algo que se suponía que era sólo de amigos, no había mucho que decir, había que ser amables y quizás podría ser divertido, Ross quien llevaba demasiado equipaje y al final; Dennis quien tardó demasiado en llegar y todo porque esperó a Lilia, la cual tardó una eternidad en alistarse.
Cuando por fin llegaron todos, nos dispusimos a partir.

-¿No crees que estamos demasiado apretados en este carro?- dijo Grace con fastidio-.
-No puedes quejarte, ni siquiera tienes auto.- dijo Dennis-
-No, pero si alguien no hubiera traído a su novia, esto no estaría tan apretado.-
-Basta, tratemos de que las vacaciones sean buenas para todos, ¿okay?- dije.-
-Sí mamá.- dijo Dennis.-

Pasaron dos horas en la que seguimos la ruta exacta, hasta llegar a un cruce de carretera, se empezó a escuchar demasiado estruendo, había un accidente eespantoso.
Desde lejos se podían ver los trozos de carne de las personas que habían salido disparadas en el impacto así como toda la sangre regada por todos lados.

-No puede ser, eso es una maldita pierna.- dijo Lilia dando un grito.-
-Deja de ver por la ventana y de hablar, Lilia, no quiero voltear.- dijo Dennis.-
-Este es el perfecto momento en el que no quisiera estar conduciendo, estoy viendo todo.- dije.-
-¿Por que aún no llegan los paramédicos?-
-Dah, quizás porque estamos en la mierda, no creo que haya mucha gente cerca.- dijo Grace.-
-Deberíamos llamar a alguien, ¿no creen?- dije.-
-Buena suerte, no hay señal, también lo pensé.-
-Hey, ¿cómo están? Julia y yo estamos... asqueados.-
-Apretados, Jared.-
-No quisiste venir en mi auto, ¿o sí?-
-Estamos bien, sigamos el camino hasta...
-Debb, cuidado.- gritaron.-

Un segundo impacto.- resultó ser que el primer impacto fue creado por un deslave de la parte superior del camino, la cual se repitió.-
Traté de esquivar, pero al estar el auto de Jared a lado, al final, ambos salimos del camino yendo directamente a una zona totalmente insegura, todos los intentos por frenar fueron inútiles bajamos en picada durante quien sabe cuanto tiempo, se sintió tan largo que ni siquiera tengo la seguridad de decir cuanto tiempo ni distancia fue.-
El auto al final quedó estrellado contra un árbol, lo cual fue pertinente, ya que el frenado voluntario no fue opción.
Por otra parte, Jared bajó todavía más hasta que quedó volcado.

-¡Oh por Dios, OH POR DIOS!, estoy sangrando.- dijo Grace aterrada.-
-¿Están... Están todos bien?- dije teniendo un zumbido y mucho sueño producido por el impacto.-
-Yo no, no estoy bien.- dijo Lilia, quien en segundos salió del auto vomitando.-
-¿Cómo está Dennis?- dije.-
-Estoy bien, mi nariz, creo que está rota y está doliendo como el carajo.-
-Jared, tenemos que ir a ver a Jared.-dijo Grace histérica.-

En ese momento desperté más que nada, salí del auto como si no hubiera pasado nada y corrí hasta su auto, el cual estaba de cabeza.
Jared y su novia estaban inconcientes, en eso, llegaron los demás para intentar sacarlos.

-Tenemos que sacarlos, si el carro comienza a tener una falla y se incendia, van a morir ahí.- dijo Dennis.-
-No creo que eso pase, pero sí, debemos sacarlos.-
-Ustedes de ese lado, nosotros de este lado.- dijo Ross.-

Dennis y yo sacamos a Ana, era delgada, así que no fue difícil sacarla, estaba comenzando a recobrar la conciencia.
Mientras que los demás sacaron a Jared, quien fue más difícil tanto por su altura y peso.
Pasamos unos minutos haciéndolo recobrar su conciencia hasta que fue posible poco a poco.