La vida...es hermosa como una flor..a Nagisa y Karma les tocó vivir una vida tan hermosa como una rosa...pero después de verla, acariciarla y cuidarla...podrían lastimarse con las traicioneras espinas que porta...y al no poder tocarla más, podrían d...
• En el camino Nagisa volvió a sentir la creciente sensación de ser perseguido y observado, ahora que lo recordaba este era otro punto a tener en cuenta, se había concentrado tanto en los acontecimientos que lo involucraron a él y a Karma, que terminó olvidando una posible amenaza, esto tendría que discutirlo con Karma, ya al dia siguiente se lo contarían a koro-sensei.
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• Su camino fue algo tenso al mantenerse alerta pero nada que no era nada que no pudiera disimular. Al llegar a casa de Karma, el pelirrojo le dio la bienvenida en la puerta de su casa, donde al parecer de Nagisa este lo había estado esperando.
•Todo marchaba con normalidad o eso parecería, ya que según ellos se veían de forma muy discreta el uno al otro, según ellos, pero quién podría decirles algo sobre la forma tan obvia en la que se veían?, tan ensimismados en los movimientos del otro, solo podían concentrarse en el otro no podían dejar pasar pequeños detalles como la forma en la que caminaban, el movimiento de sus manos, como el sol que pasaba por la ventana abierta daba en sus caras, reflejaban en sus ojos, el brillo de tan hermosa luz acentuaba el color de los ojos de ambos era de lo más precioso que habían visto en sus vidas.
-Karma, tengo algo que decir... - Fue Nagisa el que interrumpió el momento.
-Eh, Si?... - Respondió Karma saliendo de su ensimismamiento.
-Es sobre algo que me a pasado ya dos veces, y tengo mis sospechas. - El nerviosismo se notaba en sus manos que temblaban de forma sutil.
-De que se trata?, implica a Koro-sensei no es así. - Lo ultimo mas que una pregunta fue un confirmacion.
-Sí, más que a koro-sensei, quienes están en peligro es toda la clase, tengo a un posible sospechoso aunque no he confirmado nada aún. - Procedió a decir Nagisa levantándose del escritorio de Karma.
-Y quien crees que podría ser?, yo tengo muchos candidatos en mente. - Movía su mano a su cabeza pensativo.
-Ya elimine a varios, entre el que más peligroso me parece, es el científico loco que experimentó con koro-sensei e Itona-kun. - Decía Nagisa pensando la lógica detrás de sus palabras.
-Lo que dices tiene bastante sentido, ese desquiciado no conoce lo que significa una derrota justa. - Comenzó Karma.
-Y por lo que veo se obsesiona bastante con sus experimentos, tanto así como para matar, extorsionar y traicionar por conseguir tenerlos de nuevo. - Le siguió el diálogo Nagisa.
-Esto tenemos que hablarlo con Karasuma-sensei pero más aún con Koro-sensei, los chico aún no tienen que saberlo, causarles miedo puede ser contraproducente, por ahora solo Nosotros y el profesorado de la clase debe saberlo. - Propuso el mismo.
-Mañana será entonces. - Afirmó Karma.
• De forma relajada Karma se levantó de su cama en la cual estaba sentado y se acercó lentamente casi como contando sus pasos hacia Nagisa. El chico de cabello celeste no se sintió amenazado así que no retrocedo y espero a que su amigo llegara a su lado.
• Cando el chico de cabello rojo estuvo a su lado Nagisa no pudo evitar el impulso de correr al baño, los síntomas volvieron a empezar, parece que olvido este otro gran detalle que le impedía seguir su vida normal, de cierta forma ya hasta había olvidado que la tenía pues ya tenía varios días sin presentar síntomas tan graves como lo haría en esos días, una pequeña tos acompañada de dos o tres pétalos ensangrentados y nada más.
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• El chico corrió por los pasillos hasta dar con el baño más alejado del cuarto de Karma, no dejaría que lo escuchara, claro que este ya sabía del asunto pero el que lo presenciara era algo que Nagisa no permitiría en la medida de lo posible.
• Sus rodillas se acomodaron de forma automática, tener sus piernas en el frío piso era algo a lo que se acostumbró más rápido de lo que le gustaría, el ardor de su garganta, el dolor de su mandíbula por mantenerse tanto tiempo abierta eran cosas a las que aún no se acostumbraba y no quería hacerlo, si se asombraba a tal cosa significaría que se ha rendido y eso jamás, él quería seguir viviendo, por las personas que él quiere y lo quieren además también de la persona que ama...
-Nagisa!, estás bien?!, necesitas algo?!. - Empezaba a golpear la puerta de baño y entrar en pánico el pobre Karma.
-Estoy bien Karma...solo dame unos minutos...por favor. - Suplicó Nagisa en un pequeño hilo de voz quebrado apenas perceptible.
-Confiaré en tu palabra por hoy, pero espero que te quedes esta noche, mis padre están fuera de la ciudad por ahora y ya es muy tarde para que regreses solo y más en ese estado. - Comenzó a decir con firmeza.
-No aceptaré un no, es por tu seguridad Nagisa, si lo que tenemos es correcto ese maniático de Yanagisawa estará al acecho esperando a que estemos vulnerables.
• Ahora que lo pensaba, es cierto, en su estado actual una pelea podría ser su perdición, su cuerpo no está como de costumbre y su cansancio era notable, los mareos eran cada vez más frecuentes los dolores de cabeza, lo débil que se sentía lo hacía sentirse impotente, no podía hacer nada aún, no sabía ni por dónde empezar la investigación de este virus o enfermedad, ni siquiera lo básico como el tipo de propagación, no saben si se propaga por contacto, por fluidos corporales o siquiera si se transmitía por vía aérea en el ambiente.
• No sabía nada de nada y eso lo estaba empezando a enloquecer, tenía a Karma y Koro-sensei para ayudarle, pero solo los tenía como recursos no con un objetivo en concreto, estaba a ciegas, iban a buscar la cura de algo que ni el egoísta poder del gobierno podría resolver. Solo era un estudiante común después de todo.
• Para sorpresa de Nagisa, Karma toco la puerta del baño interrumpiendo sus pensamientos, y así fue como salió de ese trance de ansiedad y pensamientos negativos. Parece que Karma lo salvó otra vez pero sin que esté se diera cuenta.
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