14| LEAVING MY LOVE BEHIND

2.2K 256 122
                                    

We used to wait up and talk for hours on end/
Solíamos esperar y hablar durante horas y horas.

And it's got me thinking that lately something's changed/
Y me hace pensar que últimamente algo ha cambiado.

'Cause I've been feeling you leaving/
Porque he estado sintiendo que te vas.

Cracks in conversations way too long/
Grietas en conversaciones demasiado largas.
-Leaving My Love Behind, Lewis Capaldi.

14|

Dicen que lo que más duele no es aquello que termina de pronto, sino lo que avanza con lentitud, consumiendo poco a poco, dejándote admirar todo lo que destruye a su paso sin que puedas impedir o hacer algo al respecto. Y puedo asegurar que es verdad.

Derek y yo no nos distanciamos de inmediato, fue un proceso que se tomó su tiempo y que me dolió, porque sabía que era inevitable.

Seguimos hablando, incluso recordamos lo que habíamos hecho aquel día, con sonrisas y bromas de por medio en la conservación por teléfono.

Pocos días después me enteré que él sí que había hecho caso a lo que le pedí. Volvió con ella. Me lo dijo por un mensaje de texto.

¿Me dolió?

No hay necesidad de mentir, porque su confirmación me calo hondo. Pero yo sé lo había pedido y no podía retractarme, no ahora. También me contó acerca de Heather estando celosa de nosotros. ¿Y quién en su situación no lo estaría? Yo había sido el cuerno y su, ahora novio de nuevo, seguía hablando como si nada conmigo. Esa confesión fue el inicio de un próximo punto final en nuestra historia.

Por algún tiempo siguieron las visitas, hasta que le pedí que no viniera tan seguido utilizando la excusa de no salir tanto para evitar el contagio del virus. Me costó mucho convencerlo, y es que solo quería que ellos dejarán de hablar sobre nosotros y de lo que posiblemente teníamos, hasta que al final cedió. Ya no sé si eso me alegro o solo me dolió.

Fue difícil y doloroso ver cómo nuestras charlas interminables ahora no parecían tener un motivo por el cual seguir, perder esas llamadas constantes para solo hablar de tonterías. Fue extraño no recibir sus mensajes de texto tan seguido y ver cómo, poco a poco, estos se hacían más escasos. Había un gran vacío entre nosotros que no dejaba de crecer, aumentando cada día la distancia que terminaría por separarnos.

Me dolía ver cómo lo que un día tuvimos se nos estaba escapando de las manos y no hacíamos nada para detenerlo. Simplemente lo dejamos estar, dejamos que se acabará a su ritmo tortuoso. Que se llevará entre sus cenizas las risas, las charlas nocturnas, los recuerdos de su tacto, de sus caricias y de su voz, llevándose todo para dejar el vacío que solo alguien como él podía dejar tras su partida.

Recuerdo su última visita, yo aún tenía su sudadera y él la quería de vuelta, no quería soltarla, me parecía lo único que me quedaba de él porque todo lo demás se estaba agotando. ¿Y cómo te deshaces de algo que sabes que no volverá? No puedes, no puedes hacerlo sin destramar unas cuantas lágrimas en el proceso y sin recriminarte a cada nada tu decisión.

Y después de miles de excusas fue que le dije que pasará por ella, aún conservaba su perfume a pesar de los días que llevaba guardada en el fondo del armario para que nadie la encontrará.

Verlo de nuevo fue como un soplo de aire fresco, como si alguien hubiera encendido de nuevo todos esos sentimientos que había acumulado con el tiempo y lo único que pude hacer fue sonreír, porque tenía a mi otra mitad justo frente a mi, a pocos metros de distancia. Me dio un beso en la mejilla, alguien estaba hablando de parejas y entonces él se acercó a mi, con esa sonrisa divertida y bromista que hoy en día me hace tanta falta y que nadie más podrá igualar nunca y lo dijo, con el volumen suficiente para que solo yo pudiera escucharlo y nadie más.

-Y por poco casi novio de Aryl.

Casi, la palabra clave de está historia. Porque pudimos serlo todo sin ser nada más que amigos, en realidad.

Ese día, su visita no duró mucho más. Pasados unos pocos minutos después de su llegada y desde que le entregara el motivo de su recorrido hasta aquí, él se fue, no sin antes dejarme el último beso en la mejilla de esta vida. Y de dejarme unas cuantas sonrisas más para la colección.

Derek nunca volvió, y hasta la fecha siguen preguntando qué pasó con él que ha dejado de venir a verme. ¿Cómo les explico que yo lo aleje por ser una cobarde que nunca ha sabido enfrentarse a nada?

¿Cómo les cuento sin querer romper en llanto que aunque quiera que todo vuelva a ser como antes eso no puede pasar, porque nos perdimos y no hay manera de encontrarnos otra vez?

No se cómo responder a sus preguntas, simplemente me excuso diciendo que llevamos tiempo sin hablar y que ya ni siquiera sé si sigue por aquí. Y es que la verdad no lo sé. No se más nada de la persona que una vez ame y que sigo queriendo como el primer día.

La misma persona con la que hablaba sin cansarme y a la que nunca me molestó si tenía que coger el móvil a las tres de la madrugada solo para escucharle hablar. Esa que un día, después de tanta espera y distancia lenta, dejo de enviar textos y puso punto final a una historia que no sé si tuvo tiempo de comenzar de verdad.

Confieso que en más de una ocasión entre en nuestro chat y me quedé viendo la hora de última vez de conexión, esperaba encontrarme con un escribiendo pero eso nunca paso. Tampoco tuve el valor de ser yo quien tomara la iniciativa y te enviará un mísero "Hola". Por mi mente rondaba la misma pregunta cada que revisaba nuestras conversaciones: ¿Seguirá queriéndome o habrá olvidado lo nuestro? Me torturaba con aquella interrogante y no hacia más nada que solo dejar que siguiera así.

Creo que hasta aquí no tengo más que decir, excepto por una pregunta más, una para ti, Derek.

¿Cómo hago para que los recuerdos no desparezcan del todo? Te estoy olvidando y eso duele más. Porque prefiero mil veces que me torturen los recuerdos a vivir en paz solo por no tenerlos. Y es que aunque haya escrito toda una historia he dejado espacios en blanco, mi mala memoria no da para tanto a pesar de esforzarme.

También, quiero decir que valió la pena. No importa que haya días en los que desearía haberme quedado con ese me gustas atorado en la garganta y evitar que aquel beso pasará, solo para tenerte de nuevo. No importa, porque después de todo, esa fue nuestra historia y no hay manera de cambiarla, y es que me he puesto a pensar, y ni siquiera haciendo las cosas de otra manera tendríamos un final distinto. Porque tarde o temprano tendría que pasar y, aún cuando me jode no tenerte en mi vida ahora, se que el tiempo que estuviste en ella no lo cambiaría por nada.

Tal vez sea en otro tiempo, en otra vida o en cualquier otro lugar donde los finales felices existan, tú y yo tendríamos otra oportunidad y un final feliz a la vuelta de la esquina. Así que te esperaré allí, con un pote de helado y una sola cucharilla para compartir como aquella vez. Y tú me brindaras una de esas sonrisas que te caracterizaban y que a mí tanto me encantaba ver en ti. Me dirás te quiero cada vez que se te antoje y yo responderé con la misma sinceridad de siempre. Llegarás a mi casa de visita inesperada y soltarás comentarios sexuales a cada momento que puedas. Llamaras y hablaremos por horas sin importar lo tarde que se haga. Te recomendaré canciones que nunca sabré si escuchaste o solo guardaste para dejarlas allí con la promesa de darles alguna oportunidad un día. Volveré a sentir la calidez de tu tacto y lo reconfortante de tus abrazos, escucharé tu risa y no tendré que preocuparme de olvidar tu voz... pero mientras eso pasa, seguiré aferrándome a este pedacito de nuestra historia que, aún sin tener un buen desenlace, fue más de lo que una vez pude imaginar. Porque ame nuestra historia, con sus puntos suspensivos, con sus comas, con sus interrogantes e incluso con aquel punto final. Porque a pesar de todo, ame todo lo que te incluía a ti.

 Porque a pesar de todo, ame todo lo que te incluía a ti

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
SI LOS FINALES FELICES EXISTIERAN ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora