Jennie, una gatita muy pequeña y bonita llega a manos de lisa, ella la va a amar para siempre sin importar lo que suceda.
- Hola gatita hermosa mami está en casa - lisa sonrio mientras la gatita jennie la miraba con ternura
- Te extrañe tanto, tengo...
No sabía que hacer, mi pequeña ardía en fiebre y sus manitas apretaban fuertemente mi camisa.
Fui por el termómetro, lo puse en su axila izquierda y lo saqué al minuto, tenía 38, sus labios estaban temblando y rápidamente quite toda su ropita.
- No - dijo en un susurro entrecortado y se enrrollo en la cobija
- Chiquita, necesito bañarte para que tú fiebre baje - la desenrrolle cómo pude y la pegue a mi cuerpo inmediatamente, su calor traspasa mi ropa
Jennie suelta alaridos y una que otra lágrima se escapa de sus ojitos, la acuesto en la tina calientita y me relajo al ver que me mira y me llama.
- Mami - susurra débilmente y sigo mojando su cabello y solo paso jabón por su cuello, no la voy a bañar toda, lo hice en la mañana
- Shhh - bese su frente y cuando estaba lista la saqué de la tina, seque su cuerpito y la vesti rápidamente
Peine su cabello suavemente, me acosté a su lado y me dispuse a darle cariñitos y calor corporal.
Sus piecitos se acercaron a mis pies por debajo de las cobijas y me apego más a ella, calenté mi mano y la metí debajo de su camisa, hice caricias suaves en su pancita y pecho, abrió sus ojitos y me miro, es una masita hermosa.
- Duele - hizo puchero y yo también inmediatamente - me duele la pancita
- Mami lo soluciona ahorita - me acosté en su pancita, a ella le gusta que haga eso y más cuando dejo besos y caricias, lo hago y ella suelta una risita hermosa
- Me hace cosquillas - rio con ella y siento más la necesidad de protegerla
- Cómo te sientes? - toco su frente y ya no quema tanto pero su rostro se ve cansado y le digo que duerma
- No quiero dormir - me jala de la camisa y me acuesta a su lado para luego acostarse en mi pecho
Oh ya entendí.
- Alguien tiene hambre - ella sonríe al oír eso y luego estornuda bajo mi brazo - salud! mi vida - hago una pausa para preguntar el sabor de su biberón - fresa o normal?
- Normal mami - me sorprendí por eso, ella siempre pide de fresa o manjar - porfavor
- Claro que si, mi gatita linda - me levanto de la cama y voy rápidamente a la cocina
Mientras le hago su biberón, busco una manera buena para llevarla al hospital, no creo que con mis cuidados este bien 100%, primero quiero que la revisen y después yo me haré cargo, mi gatita es mía y no quiero que esté en manos de alguien que no sea yo.
Suspiré y ya listo el biberón subi a la habitación, abrí lentamente la puerta y me encontré con lo más lindo del mundo, una Gatita, mi gatita hermosa, durmiendo con Kuma, es lo las tierno del mundo.
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Me acerco lentamente, para no despertarla así que solo beso los labios rojitos de mi pequeña y me alejo, pero de pronto suena mi teléfono fuertemente y jennie despierta con el ceño fruncido.
- Shhh - apagó la luz y me acuesto a su lado mientras contesto el teléfono - hola?
Es madre, le pedí que cuando pueda me llame para que me ayude con jennie y como hace que se mejore.
- Solo la mantengo bien alimentada y en cama? - pregunto de nuevo, suena fácil y no lo creo
- Si, mi niña - sonrió y veo a jennie que se durmió otra vez - adiós corazón
- Adiós mamita - apague el teléfono y volví mi total atención a mi gatita - bueno chiquita arriba
La moví un poco, bese su cuello haciéndole cosquillas y así abrió sus ojitos enojada.
- No quiero, mami - se puso encima de mi y de nuevo se durmió
- No no no - la senté en mi abdomen y le enseñé el biberón - abre la boquita
- Mío - tomo la botella con sus manitos y comenzó a beber la leche
- Acuéstate y dime si tienes calor o frío, si te duele o no algo, si algo te incomoda y eso - la acosté en mis brazos mirándola y después solo me empujó suave y se levantó - Hey hey a dónde vas tu?
- Pipí - me rei y me levanté - quiero ir al baño mami si?
- Si, pero ponte calcetines - la senté en la cama despacio, busque sus calcetines más peludos y acolchados y se los puse
- Me hago chis, mami - me dijo casi afónica y la metí al baño rápido
- Rápido porque hace frío, mi amor - me enseñó sus pulgares y me dió su biberón mientras hacia chis
En menos de dos minutos salió del baño, me abrazo fuerte y cerro los ojitos, después se quejó y tallo su carita en mi camisa.
- Que te duele, gatita? - la acosté en la cama y me señalo su cabeza
- Espérame aquí voy por las pastillas - bese su frentecita y de nuevo regreso la fiebre
Fui por todo lo necesario y regrese con jennie, me vio y se apego a mi rápidamente, le di la pastilla y se la tomó con su biberón, volví a tomarle la temperatura y subió otra vez pero no tanto.
- Ya no quiero sentir esto mami, duele mucho - me partio el corazón y solo me acosté a su lado
- Mami está aquí, te va a cuidar y todo va pasar mi vida, lo prometo - la abrace despacio y le di un besito en sus labios - te amo
- Te amo también y mucho - sonreí y reparti besitos en su frente hasta que callo rendida en mis brazos
Mejórate pronto, gatita hermosa.
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