Jennie, una gatita muy pequeña y bonita llega a manos de lisa, ella la va a amar para siempre sin importar lo que suceda.
- Hola gatita hermosa mami está en casa - lisa sonrio mientras la gatita jennie la miraba con ternura
- Te extrañe tanto, tengo...
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Ya han pasado dos semanas enteras y Jisoo no despierta, los médicos me insistieron en desconectarla pero me negué rápidamente, estoy segura que ella va a despertar muy pronto y nos hará compañía en casa un largo rato, también le han hecho más chequeos y el impacto del choque hizo que pierda la mitad de su memoria y hace falta que despierte para saber que sucedió exactamente.
Por otro lado ayer fui con Jennie al ginecólogo, la verdad creo que yo era la más nerviosa, ví a mi hijo y es un frijol, en unas semanas más podré verlo o verla mejor y oír sus latidos, por ahora solo existe en su pancita.
Sobre Rosé... Ella vino a ver a Jisoo en la mañana y estuvo un largo rato hablando con ella en la habitación, estaba empapada en lágrimas y cuando entre a verla me abrazo con todas sus fuerzas, no había visto su rostro con claridad y cuando me miro a los ojos en su mejilla había un moretón muy grande que hasta a mí me dolió, intenté comunicarme con ella para saber quién le hizo eso; porque eso es un golpe pero, solamente salió casi corriendo dejándome con la duda.
Ahora Jennie está dormida encima de mi, me estuvo cuidando toda la noche, fue la primera que pase en casa luego del accidente y estaba muy alerta, pero gracias a ella dormí lo suficiente, me acomode colocandola en mis brazos en el colchón y la besé con tanto amor que sonrió en su sueño.
- Pareces muy feliz ahí, en tu sueño - Sonreí ampliamente y coloque mi mano en su vientre - y tú frijolito, solo que sepas que te amo
Tome la mano de mi esposa, la sentí como siempre tan cálida y suave, me sentía tan en paz que me volví a dormir con el sol entrando por la enorme ventana y el increíble sonido de los ronquidos de mi Jennie, tan bonitos.
...
Desperté por el sonido de mi teléfono, con los ojos cerrados lo tome y conteste sin ver la pantalla.
- Lisa - Esa es Rosé y su voz se escucha cortada y parecía susurrar, de alguien se esconde sin duda- ayúdame
- Rosé ¿Dónde estas? - hablé susurrando
- En casa - Se escuchó un sollozó de su parte - en el infierno
No dije nada, deje el teléfono a un lado aún en la llamada y me levanté con cuidado para no despertar a Jennie pero fue inútil.
- Uhg - se quejó abriendo los ojos - Lisa... Hace frío
- Mi amor, Rosé está mal y voy por ella - Dije y ella abrió los ojos
- Voy contigo - se paró rápidamente y me quedo viendo - vamo
Me apure como ella siempre dice.
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