Jennie, una gatita muy pequeña y bonita llega a manos de lisa, ella la va a amar para siempre sin importar lo que suceda.
- Hola gatita hermosa mami está en casa - lisa sonrio mientras la gatita jennie la miraba con ternura
- Te extrañe tanto, tengo...
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★. Jennie
Tres meses después. Mi embarazo avanzó muy rápido y mi pancita se nota por fin, Lisa está encantada con eso y pasa la mayoría del tiempo a mi lado atendiendo mis pedidos y ya estoy algo sofocada por eso.
- Cariño, déjame - Necesitaba levantarme, quiero ir a lavar mis dientes - Porfavor
- No, yo lo hago por ti - Me sonrió
- No lo harás, iré a lavar mis dientes - Dije y me levanté de la cama encerrandome en el baño
Hice lo dicho y también me la ve la cara, acomodé mi cabello y luego salí del baño cerrando la puerta a mis espaldas, camine hasta la cama y me apoye con cuidado en la cabecera.
- Te hice pasta como la vez de nuestra primera vez en la playa con un juguito de limón sin gas - Dijo Lisa dejando la comida a mi lado para luego sentarse a mi lado y mirarme con una sonrisa - ¿Que tramas?
- ¿Ah? - Dije con media cucharada de pasta en mi boca - ¿De que hablas?
- Ayer saliste en la mañana sin despertarme y regresaste con una sonrisa picarona, me veías con emoción o no lo se, hablaste con Rosé toda la noche con audífonos y viniste a do rmir con la misma carita - Se cruzó de brazos - ¿Fuiste al ginecólogo a ver a el bebé y sabes lo que es? ¿Me equivoco?
- Mi Amor, no es nada malo y pues si estás en lo correcto, ya se que bebé está en mi vientre y no te voy a decir hasta el día de la revelación - Tome juguito - por eso también estaba hablando con Rosie, para ponernos de acuerdo con el evento y ella también lo sabe, no quiso esperar y Jisoo está igual que tú - tome más juguito - vamos a juntar ambas revelaciones
- Un momentito ¿No vas a decirme? ¿Cuánto se supone que debo esperar para que me digas? No, no, mejor voy a llamar a la doctora - Saco su teléfono y me reí
- No te dirá nada, le dije que no te dijera - Acaricié mi pancita y tome la mano de Lisa igual poniéndola en mi vientre - ahora quedate aqui y descansa porque se que tuviste un día pesado, pasaste casi todo el día en esa oficina y quiero abrazarte - Cerré mis ojos y suspiré aliviada
- ¿Terminaste de comer?
- Hace rato mientras me reclamabas
No me dijo nada más, se tapo a mi lado abrazándome haciendo leves caricias en mi cintura e inconscientemente sonreí apegando mi cuerpo al suyo un poco más para sentir el calor más satisfactorio de mi vida. Lisa estaba ya dormida, se merecía descansar luego de todo el día pesado así que me encargue de que sea placentero su sueño, me aleje un poco y me levanté para apagar las luces y cerrar las cortinas y dejando solamente una lucecita en la esquina que tiene forma de gato, me da algo de miedo ya que son sus ojos los que iluminan.
Al día siguiente. Lisa ya no estaba a mi lado y ya es costumbre para mí, me levanté poniéndome mis pantuflas y camine hasta el baño para bañarme y luego bajar a hacer algo de comer.
