Expreso americano (Con tres de azúcar)

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Esta historia es irreal y grosera, por su contenido nadie debería verla, pero ya que estas aquí quedas advertido/a.

Te recomiendo echar un vistazo a las canciones mencionadas durante los capítulos, valen la pena, según yo ayudan a dar ambiente. 

Gracias por el apoyo, comentarios, sugerencias, y las que me comenzaron a seguir en Instagram ja,ja, malditas psicópatas les quiero <3

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- Ya no creo que sea buena idea que Tweek siga con Craig - Se quejaba Richard en la habitación matrimonial mientras su esposa tejía en silencio. - Deja de lado el trabajo, tiene ideas que antes no tenía, pareciera que por mas que aumentamos sus medicinas no le hacen nada - La mujer seguía tejiendo en silencio mientras tarareaba la misma melodía de siempre. 

- Me agrada Craig -

El varón caminaba de un lugar a otro en la habitación, el comentario de su mujer lo irritó mas. - A mi no, me tiene cabreado. Antes si nos ayudaba la publicidad y todo pero ¡Ay mas maricas en el mundo! Tweek debería buscarse a otro menos entrometido - 

- Hum, es una lastima. -me agrada Craig -

- Maldita perra ¿No estás escuchando? Ahora Tweek se dedica menos a la cafetería ¡Tenemos deudas que pagar! me romperán las piernas mujer, las putas piernas y a ti parece que no te importa -

- Hum, hum ... Tweek está tan grande ¿Crees que estos guantes protejan sus manitos? no me gusta que se queme - Respondía la mujer sin apartar la vista de su tejido. Richard sabia que su esposa no estaba bien, y el gran parte era por él. Abrió la cajonera y sacó una biblia, esta solo era una fachada dentro escondía un sobre con pastillas. - Tus antidepresivos, querida -Le puso una píldora en la boca como si fuera una niña y ella la tomó sin ningún tipo de objeción. 

- Gracias querido ¿Podrías ver si Tweek se durmió? está muy nervioso desde que se quemó la mano con el cigarrillo -

A veces Richard no sabía si esos lapsus de perdida de noción del tiempo eran real o era una forma de su esposa para atormentarlo. 

- ¿Cuándo llegamos a esto, querida? -

- Hum, hum. Creo que cuando dejaste que tu hijo pagara nuestros pecados, querido - Respondió la mujer siguiendo con su tejido. Unos guantes como para manitos de un bebé.

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"Brillando en la pista, saliendo de noche

y volviendo de día.

Na - na - na - na, na - na - na - na"

 (Canción: Himno para los que están jodidos/ interprete La La Love You, Allison).

La música inundaba la sala mientras la luz tenue permitía bailar a gusto entre las parejas. A pesar de toda la mierda en la que estaban envueltos, por esta noche se querían permitir disfrutar la música y el baile. Que el mundo se vaya a la mierda allá a fuera y les permita ser felices aunque sea los tres minutos y algo que duran las canciones.