Antifrágil

Capitulo 6: Fuego y sangre

La noche cayó sobre Desembarco del Rey abrumadoramente, los pasillos estaban en completo silencio y el sonido de la grava era claro para cualquiera que quisiera escuchar, la luz del crepúsculo iluminaba las afueras de la fortaleza.

Lucerys caminó incansable por las habitaciones de su madre, con pensamientos obsesivos en mente, el fuego calentando el interior y las paredes de piedra que albergaban a madre e hijo.

- Lucerys, mi amor, necesitas calmarte un poco. - La madre se acercó al cuerpo tembloroso y acarició las mejillas enrojecidas por el viento frío que invadía los marcos de las ventanas.

El omega nunca se llevó bien con el frío, siempre se enrojecía y se sentía mal e incluso podía pasar días en cama bajo el cuidado de los maestres , quienes alegaban la débil inmunidad del omega al clima templado, tal vez por eso la idea de vivir en Driftmark le atraía tanto que no tener que preocuparse por un invierno cortante era ciertamente tentador.

- No puedo mantener la calma cuando Aemond se está poniendo en peligro por mí, él no tiene que hacer esto, ¿por qué tiene que ser tan terco? . - Lucerys había llorado en silencio por un rato, compartió sus inseguridades mientras estaba en los brazos de su madre que siempre fue tan comprensiva.

- Mi amor, él está haciendo esto por ti, eso en sí mismo demuestra cuán honorable es . - Rhaenyra trajo a su hijo para que se sentara con ella en el borde de la cama. - Admito que tenía muchas preocupaciones sobre mi hermano, pero la forma en que te defendió hoy me hizo darme cuenta de que tal vez sea digno de ser tu futuro esposo y alfa.

Luke no pudo evitar sonreír brevemente, era cierto que Aemond siempre tenía ese rastro de arrogancia en su mirada, pero era extremadamente honorable, no tenía ninguna obligación con el omega y, sin embargo, está cumpliendo su promesa de intentarlo.

Aemond se arriesgaría contra un Lord del Norte por él.

Y ver a Aemond Targaryen hacer todo lo posible por alguien hizo que Lucerys se sintiera especial, porque ese alguien era él.

- Quiero vestirme de verde mañana, quiero que sepa que estoy pensando en él todo el tiempo . -  Lucerys le preguntó a su madre esperando no sufrir una negativa.

- Ciertamente eres muy decidido, hijo mío . - Su madre lo miró con expresión orgullosa. - Bueno, no me gusta verte vestida de verde y tampoco lo apruebo Lucerys, pero me temo que se volverá algo común en el futuro, ¿verdad?.

¿Era tan predecible que Lucerys se pusiera lo que Aemond le pidiera? Los colores, las joyas, el cabello. Cualquier cosa que Aemond quisiera, Lucerys la usaría con el mayor de los placeres porque le gustaba complacer, le gustaba sentirse cuidado, la sensación de usar algo que Aemond había elegido para él, pensando en él, trajo una cálida sensación debajo de su estómago.

- Te agradecería si pudieras hacer esto por mi madre, sé que no es apropiado desviarme de los colores de mi casa, pero necesito hacer esto mañana, por favor.

Sabía que estaba pidiendo mucho, a su madre no le quedaba afecto por los Hightower, pero haría cualquier cosa por él.

- Le pediré a las modistas que preparen prendas verdes para mañana, ¿algo más? - .Rhaenyra ahora se estaba preparando para salir de las cámaras seguramente, la cena se había servido durante bastante tiempo.

- Quiero que me ayudes a verlo esta noche - .Lucerys estaba haciendo una petición arriesgada, pero dadas las circunstancias actuales, dudaba que su madre se negara.

- Bueno, espera aquí entonces, le pediré que venga y tendrás un tiempo para hablar con él y nada más, él debe descansar y la gente no debe tener más motivos para hablar.