El amor de verano nunca termina, solo cambia de lugar.
Un campamento de verano.
Una oportunidad de ser amados.
Varias historias entrelazadas, pero todas con un nexo común, que ese amor de verano, ese que vivirán intensamente, dure para siempre.
Po...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Llego a saber que las cosas acabarían asi y me hubiera quedado la tablet, con lo tranquilita que estaba yo viendo videos de tenis y ahora me va a tocar ser la sensata de la familia siendo la pequeña de las tres hermanas.
Regulo el ritmo de mi respiración para intentar no liar más todo esto y miro a Aroa buscando ayuda, pero mi prima niega con la cabeza levantándose rápidamente.
-Bueno, yo tengo que ir a buscar a Ángel, que como lo pierda me matan en casa — Y se va corriendo la tía, tener familia para esto.
Me armo de valor y me pongo en pie para separar a mis hermanas, que estoy viendo a mi melliza con ganas de cometer un asesinato y no tengo ganas de pisar la cárcel, ni de encubrir nada ni de esconder cadáveres.
-A ver, vamos a calmarnos antes de que hagamos algo de lo que nos podamos arrepentir —
-¿Arrepentirme? Tú lo has visto Pao, solo he dicho la verdad — Resoplo frenando a mi melliza para que no la lie más -Tú ibas conduciendo Dana, tú tenias que haber muerto y no mamá, asi todos estaríamos mucho mejor, intentas ser ella pero no le llegas ni al filo de la suela de los zapatos — Quiero mucho a mi melliza, pero en esto momento me vendría perfectamente un bozal o un rollo de cinta, para que se calle y no se lie más.
-¿Quieres escucharme y dejar que me explique? — Ahora es a Dana a quien tengo que frenar, de verdad que o se me ocurre la idea del siglo para solucionar eso, o se aparece la Virgen, o yo me piro y si te he visto no me acuerdo -Eres mi hermana pequeña, no haría una cosa así de buenas a primeras — Ahi mi hermana mayor me aparta y se encara con Sara, esto va a terminar muy mal y a ver como le explico yo esto a mi padre -¿Te crees que a mí me gustó acostarme con el subnormal que llamas novio? Obviamente no, pero tuve que hacerlo porque si tuvo las santas narices de liarse conmigo, imagínate con tías que ni conoces —
-Pues por lo que se oye en el video no parecías estar sufriendo, mas bien todo los contrario — Empiezo a buscar por la habitación algo con lo que hacer ruido para conseguir captar su atención, porque o las paro o se matan, y la sangre sale muy mal de la ropa -Que mira que hay tios en el mundo que vas a por mi novio, que tú misma le pediste que fuerais dentro del coche —
-Pero vamos, él es tan culpable como yo, porque en ningún momento le obligo a nada y es él quien me mete mano, por no hablar de que accede sin problemas — Veo como mi melliza cierra los puños y sé perfectamente que o corto la discursión, o aquí acaban con un combate de boxeo -Es más, yo estoy soltera, puedo hacer lo que quiera, él es quien tiene una relación. Asi que por favor abre los ojos y date cuenta que ese tío no te respeta —
Vuelvo a buscar desesperadamente algo en la habitación para poder parar esto y mi mirada queda fijada en la radio que hay en la habitación, ni yo sé que narices hace allí pero ahora mismo me va a salvar la vida.
Voy corriendo hacia ella y la enciendo poniéndola a un volumen bastante alto, provocando un ruido muy estridente que hace que me tape los oídos al igual que mis hermanas, consiguiendo lo que pretendía, que dejaran de discutir y me hicieran caso.