𝐗𝐈𝐕. cursed and wonderful ilu

743 72 4
                                    

Su piel aún era rodeada por el agua mientras que su propia presencia era iluminada por el sol de forma cálida, relajante y única. Única y común, era algo tan simple y ser "algo insignificante" lo hacía especial.

Sus ojos subieron y bajaron observando al individuo frente a ellos; frente a ella, específicamente.

Solo mirándola a ella, quizás disimulando de vez en cuando; no lo suficiente.
Ao'nung sonrió de lado al notar dos pares de ojos masculinos quemando, prácticamente, su existencia con furia; patético a su parecer, si le permitían decir.

Su interior reía y disfrutaba.

Le dio una última mirada a la chica pelinegra y les dio la espalda mientras que su boca emitía unos sonidos característicos que llamaban a los Ilu, criaturas ajenas a ellos hasta ese entonces.
Las orejas de Leah se alzaron ante el sonido llamativo y Lo'ak no pudo evitar fruncir muy levemente las cejas con algo de molestia. Su cola se movía bajo el agua y le molesto más ver lo ajena que estaba su novia ante las sonrisas estúpidas del "pescado".

Le'iah abrió los ojos observando a unas grandes criaturas marinas acercándose a ellos con delicadeza, pero fuerza impuesta con su sola presencia. Sonrió emocionada cuando uno rozó su mano extendida en un acto desapercibido ya que ella a diferencia de los demás, había dado un paso al frente, contrario a sus novios quienes retrocedieron con recelo y algo de desconfianza ante lo desconocido.

Él la miro relamiendo sus labios al observar su rostro emocionado. Deseaba que no fuese tan indiferente con él. — Estos son Ilu. — Pasó sus ojos por ella y luego por el dúo Sully, sumando a Tuk en los brazos de su hermano mayor. — Si quieren vivir aquí deben montarlos.

— Me gusta montar. Aunque no lo hago seguido. — Habló con alegría la pelinegra moviéndose para poder ser la primera en intentarlo, aún sin saber quién la ayudaría. Neteyam quiso seguirla, pero perdió unos segundos viendo como Lo'ak era atendido de forma rápida por Tsireya. En ese segundo Ao'nung tomo la mano de la na'vi acercándola a un Ilu, y a él.

Quizás Leah estaba siendo muy inocente, o quizás solo quería molestar... Neteyam no sabía, pero verlo ser tan descarado lo estaba matando.

El Sully borró sus pensamientos observándolos actuar en respecto a la criatura.

Leah miró su mano observando el agarre del chico y retiro la mano usando como excusa que acariciaría la piel mojada del Ilu.

Ao'nung suspiro. — Tienes que subirte. — Señaló como si fuese una niña y Leah giro a verlo con los labios presionados.

Tenía algo de miedo.

Le'iah respiro ondo tomando confianza y su aspecto cambió a uno más seguro. Colocó sus manos en posición para poder subir y se negó ante la ayuda ofrecida por el Metkayina.

Acomodó su postura al estar ya sentada y tomó su trenza neuronal colocándola hacia el frente sobre su hombro derecho. Pestañeo seguidamente sin saber que debía hacer ahora.

— ¿Primera vez? — Trató de sacarle conversación mientras que tomaba la cola neuronal del Ilu que estaba siendo montado en ese instante por la hembra.

— Puff, con un animal, sí...

Leah no pensó en lo poco reservado que había sido su comentario.

 Sintió sus ojos moverse rápido de punto en punto y cuando bajo la mirada se encontró con la mano extendida del chico que sostenía la cola a la que tendría que unirse.

Sus dedos la tomaron con delicadeza mientras que sacaba a la luz las hebras rosadas de su trenza, observando como las del animal acuático también salían un poco a la vista.

— Tiene que ser suave. — Avisó, indico y demando acariciando la cabeza del Ilu, sin quitar sus ojos de ella.

— Bien. — Se inclinó un poco sintiendo como las redes se entrelazaban entre sí mientras que sentía una ola de sensaciones transmitirse a través de todos sus sentidos.

Aspiro y exhalo tratando de controlar lo que ella misma estaba percibiendo.

— Sí, bien. Eso. — Dijo. — Respira. — Le indicó detalladamente con la intención de que ella entendiera cada una de sus palabras y no cometiera un error.

Aunque el error lo estaba cometiendo él al prestarle tanta atención a una chica que ya estaba ocupada, no con uno, sino con dos individuos.

Dos hermanos.

Y no sin omitir que ellos decían que ella les pertenecía. Olvidando que era Leah de quien hablaban.

Los ojos de Leah se desviaron observando como Tsireya se acercaba a su novio con descaro y este no hacía ningún intento por alejarla. El Ilu bajo ella comenzó a bufar molesto mientras que las pupilas de la chica se dilataban observando la mano de la chica recorrer el brazo del Sully menor.

A medida que aquella chica reía junto a él, Leah mordía su lengua evitando decir palabras que la dejaran en ridículo. Si iba a pelear con alguien, seria con su novio y le aburria el simple hecho de ser ella la que recalcara que algo le molestaba. Sin darse cuenta el Ilu tomó por si solo la decisión de avanzar y su mente tomo conciencia cuando el agua golpeó su pecho y solo le dio unos segundos para tomar aire.

Lo que le faltaba, dos machos que hacían lo que querían.

Sus manos tiraron del agarre que tenía sobre el anima mientras que insultos salían de su boca haciendo que el aire que le quedaba se eliminara. Justo cuando esto sucedió el Ilu tomo la decisión de sacarla a flote de nuevo. Neteyam se acercó a ella mientras que Leah era ayudada por su tutor.

— ¿Qué sucedió? — Ao'nung trato de aguantar la sonrisa burlona al ver como el agua escurría de ella. — Aunque estoy bastante sorprendido, en ningún momento caíste, eh. — Asintió bastante conforme y sus ojos recorrieron las piernas de la chica, viendo como ella aun mantenía su agarre firme.

— No entiendo que mierda paso. — Se dejo caer de espaldas sobre el lomo del animal mientras que cerraba los ojos.

Los hombros del aguamarino subieron y bajaron sintiendo que los Sully se acercaban a ellos.

— Te veías molesta. Sienten lo mismo y él lo manifestó.

— Yo estaba más para golpear, no para tragar agua. — Bromeó sin abrir los ojos.

Los hermanos la observan con detalle y se veían preocupados.

— ¿Le'iah estas bien? — Ignoró su voz.

Esta vez el que hablo fue Neteyam

— Linda, me asuste... — Leah abrió los ojos sin incorporarse de su lugar.

Estaba molesta y justo cuando iba a responder ante la mirada confundida del menor. Tsireya llamo la atención de los dos azulados haciendo que las orejas de Neteyam bajaran porque quería oír a su novia y las de Lo'ak subieron solo un poco. En cambio, las orejas de la hembra subieron firmes y su cuerpo volvió a estar sentado sobre el animal. A medida que la chica se acercaba a ellos con Tuk en brazos, los ojos de Leah se oscurecían. Al segundo de haber llegado junto a ellos, Tuk se cruzó a los brazos de Leah y Tsireya les sonrió a los hermanos.

— ¿Qué pasa?

— Nada. — Siguió sonriendo al escuchar al Sully menor. — Eh... quise decir; ya les toca. — Señalo a los Ilu tras ellos.

IMPULSIVE ─── neteyam and lo'akDonde viven las historias. Descúbrelo ahora