CAPÍTULO 4: JUGANDO EN CASA

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Y llegó el mini lemon 🌚

Disfrutad 😉

Aunque los dos se habían visto desnudos desde que eran niños después de lo sucedido en la cabaña era como si fuese la primera vez que se veían desnudos. El cuerpo de los hermanos no era el del típico musculitos, pero para ellos era como si estuvieran viendo la belleza personificada. Ya desnudos se fueron al sofá del salón. Por las noches echaban las persianas de todas las ventanas, y que suerte para ellos porque en verano habían bastantes mosquitos. Así nadie que pasara por la calle a altas horas de la noche les descubriría.

M: “Bueno, cuando estés listo empezamos.” 

L: La cara de Luigi estaba más roja que un tomate. “S-sí, estoy preparado.” No lo estaba del todo como la primera vez. El hecho de que harían algo nuevo no le daba seguridad por si acaso Mario quería llegar más lejos. “¿Mario?, ¿q-qué haces?”

M: Puso su cara en frente del pene de Luigi. “Voy a meterme en mi boca a tu amiguito.” Dijo tocando el miembro de su hermano, el cual palpitaba. “Relájate Luigi, esto es como tomarse un polo helado. Solo cierra los ojos y déjate llevar.”

Se metió de un solo golpe el pene de su hermano, lo succionaba de arriba abajo sin parar disfrutando de su sabor y envolviéndolo con su saliva. Volviendo con Luigi éste al principio estaba algo confundido, pero tener su pene dentro de la boca de Mario volvió a sentir ese peculiar placer. Podía sentir como su cuerpo se empezó a calentar literal y metafóricamente mientras arqueaba su espalda contra el reposabrazos del sofá y apretaba sus ojos y manos.

L: “¡Espera, va a salir!” No pudo evitar soltar su semen en la boca de Mario, y fue bastante. De sus ojos salieron pequeñas lágrimas. “P-perdón Mario, no pude controlarme.”

M: Se sacó de la boca el pene de Luigi y se traga su semen. “No te disculpes bro. Lo has hecho muy bien.” Luigi no daba créditos a que Mario se tragase algo que había salido de él. Mario se relamió los labios. “Tienes un sabor bastante dulce.”

L: “P-pero M-mario, ¿por qué has…?”

M: “Sabía que te excitaría más.” Muy inteligente por su parte el saber que a Luigi le excitaba cualquier tipo de contacto físico de su hermano y que tomase su semen. “Es tu turno.” Mario se sentó y Luigi quiso ponerse entre sus muslos. “Tranquilo, sé que lo harás mejor que yo.” Luigi no estaba del todo seguro. ¿Y si le mordía por accidente y le hería? ¿Y si no le daba el mismo placer que Mario le dio a él? “Puedes empezar lamiéndome si necesitas un empujoncito.” Muy amable por su parte.

L: “Por favor, corrígeme si me equivoco en algo.”

M: “Lo haré bro, adelante.”

Luigi tomó el pene de su hermano y empezó a lamerlo como si se tratase de un bastón de caramelo. Al principio no le gustó el sabor de su pene pero terminó por acostumbrarse. Ya estaba listo para meterse en la boca el miembro de Mario, con decisión y determinación lo succionaba. Mario volvía a sentirse orgulloso por el trabajo de Luigi, lo hacía como un profesional a pesar de ser la primera vez que daba una mamada a alguien.

M: “¡Ah Luigi, lo haces genial!, ¡sigue, sigue!” Podía notar el calor de la boca de Luigi y como empapaba su pene con su saliva. En un pequeño desliz Luigi le mordió. “¡Auch!”

L: “¡PERDÓN, FUE SIN QUERER!” Estaba temblando por el miedo a que Mario se enfadase con él y quisiese parar.

M: “No te preocupes bro, creo que exageré. Por favor continua, ya casi estoy a punto de correrme.” Luigi volvió con la mamada con la decisión de también tragarse el semen no solo para disculparse por el mordisco, también para demostrarle cuanto ama a Mario. “Ya llega, ya llega…. ¡LUIGI!” No se lo pensó dos veces y terminó corriéndose en la boca de su hermano.

L: Al principio sintió arcadas por tener el semen de Mario, pero con determinación se lo tragó como lo hizo Mario. No paraba de jadear. “Wow, creo que me he emocionado otra vez bro.” Mientras se tragaba la semilla de Mario éste dirigió su mano al pene de Luigi dándole una última paja. “¿M-mario?”

M: “Te mereces una recompensa bro. Lo has hecho IN-CRE-Í-BLE.” Lo que Luigi no se esperaba era que Mario le iba a dar un beso en los labios. Los bigotes de los hermanos, manchados por su semen, se rozaban con suavidad.

L: Luigi se quedó sin aliento, pero también le excito el que sus labios rozasen los de otra persona, y más si eran los de su hermano.  “Mario, ese ha sido mi primer beso.”

M: “También el mío.”

Continuó masturbando a Luigi mientras éste palpaba el pecho y el vientre de Mario. Creía que así podría darle placer, pero Luigi no sabía que a Mario lo que más le excitaba era ver a Luigi excitado mientras “jugaban”. Estuvieron así un rato cuando cayeron rendidos por el cansancio. El primero en dormirse volvió a ser Luigi. Mientras Mario le contemplaba dormir y le acariciaba con si fuese un gatito.

M: “*Oh Luigi, eres demasiado bueno y puro. No dejaré que te vuelvan a herir, siempre te protegeré. Dios, tienes la piel más suave que la de un bebé.*” El acariciar la piel de Luigi le estaba dejando en un estado hipnótico. “Buenas noches bro.” Y se quedó dormido sosteniendo la cabeza de Luigi entre sus muslos.

No ha sido hermoso?

Y eso que es solo el principio 🌚
Aún quedan otros "juegos" más.

Nos vemos 💕

Juegos privados entre hermanos (Mario x Luigi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora