no te odio, creo que en realidad no podría hacerlo, y no porque esté cegada por ti, simplemente no te creo capaz de hacer algo con la suficiente mala intención como para lastimarme, así que supongo que muy en el fondo debo admitir que soy una completa ilusa. Pero en fin, no te odio, ni estoy enojada contigo, pero tampoco te mentiré; si me siento un poco triste y decepcionada, sé que estás confundida pero creo que tus actitudes me dan señales de cuál podría ser tu posible respuesta, empezando por tu falta de interés y preocupación por mi. Cómo te dije hace un tiempo, en verdad no te odio, solo que constantemente haces pequeñas cosas que me lastiman y ese es el único mecanismo de defensa que sé utilizar, más después de lo que pasó -lo cual me dejó una increíble inseguridad y miedo constante de cómo actuar contigo- sin embargo, aún así me disculpo contigo si en algún momento te llegué a herir con ello, te aseguro que esa no es ni será, jamás, mi intención.
A su vez, tampoco pensé que mis actitudes te importarían tanto, creí q te darían completamente igual, y me tomó muy por sorpresa que yo estuviese un poco equivocada, lo que me hace reiniciar el ciclo nuevamente porque otra vez, haces que mi cabeza se vuelva un gigantesco signo de interrogación -haces que me sienta locamente confusa-.
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Lamentos desesperados de un alma herida
Non-Fictionel punto de esto es poder expresarme libremente en un lugar donde ninguno de mis conocidos pueda encontrarme, esperando que este absurdo intento de libro pueda ayudarle o serle útil a alguien en algún momento. si es que alguien alguna vez lee esto y...
