El Indicado // Charlos//

XIII

Con Charles

Charles decidió que, probaría a llevar a Ollie una de cada dos carreras, para que no tuvieran que estar tanto tiempo separados.

Era viernes y Ollie otra vez faltó a clases. Esta vez, porque tenía que coger el vuelo junto con su padre. Esa práctica se haría cada vez más rutinaria en la vida del menor.

Sería la primera vez que el niño montara en avión pero, el único nervioso era el padre. No paraba de removerse en su asiento. Estaba pensando en que, ¿Qué haría sí esa experiencia no le gustaba a su hijo? ¿Dejaría el trabajo? Porque, definitivamente, a su hijo no lo iba a dejar, pero, por otra parte, era el sueño de su vida y no lo quería perder.

Parecía que estos últimos 7 días no podía pensar en nada agradable, siempre había algo estresante en lo que centrar su mente.

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Ollie se portó realmente bien en el vuelo, lo llevaba incluso mejor que su padre, que seguía más que preocupado, sabía que para un niño tan pequeño podría llegar a ser muy agobiante el ambiente del paddock, como ya lo era a veces para los mayores.

Charles llamó un taxi, e hizo que los llevará al hotel correspondiente. Y nada más llegar, llamó a Kelly.

- Hola Kelly - la contraria le respondió con un medio bufido, al parecer estaba durmiendo. - ¿Estabas durmiendo? - preguntó el Omega un tanto divertido.

- Sí, Charles, estaba dormida. Así que, si no es muy importante, seguiré con lo mío... - no se le oía molesta, solo cansada.

- En ese caso, ya te presentaré a Ollie después de Yuki y Lando, no hay problema - estaba jugando, sabía que diciendo eso, la tendría encima de él en cero coma.

- ¿QUÉ? NO, yo primero, yo primero, ¿dónde estás? Mándame la ubicación y en nada estoy allí. - y sin dejar que contestara, colgó.

El omega río por el comportamiento infantil, pero, a quién iba a mentir, él haría exactamente lo mismo. Así que, sin más, le mandó la ubicación a su amiga y ahora solo faltaba esperar.

- Ahora, vas a conocer unos amigos de papi, ¿Sí? ¿Te parece bien? - se dirigió a su niño. Y a este le brillaron los ojitos, estaba emocionado.

- SIII. Yo quiero conocer a los amigos de mi papii - levantó los brazos y dio un par de saltos alegres y luego uno grande, haciendo reír al mayor.

- Muy bien - le dió un beso en la frente.- pues ahora mismo vendrá una amiga, y ya más tarde podrás conocer a más. - le sacudía el pelo ligeramente, mientras que los dos Leclerc sonreían, uno de emoción y el otro de ternura.

Y Kelly los interrumpió. Llegó corriendo, se paró a su lado, se apoyó en sus rodillas inclinándose, intentando respirar y así poder decir algo.

- Con calma mujer, no te vayas a morir - carcajeó el Monegasco.

- Ya estoy ya estoy - dijo apresurada.

- Bueno pues. Ollie, esta es mi amiga Kelly, ella tenía muchas ganas de conocerte. - la mencionada miró al cachorro, se puso de cuclillas y le ofreció la mano, el contrario lo aceptó gustoso.

- Encantada de conocerte Sr. Ollie, he oído maravillas sobre tí. - y era cierto, la primera vez que se pusieron a charlar con Yuki, Charles habló mucho de su hijo, de lo que le quería, de lo talentoso que era, y que era toda su vida.

- Hola Kelly - La sonrisa del menor se ensanchó al escuchar aquellas palabras de la contraria. Y el niño no necesitaba nada más, dió su veredicto - me caes bien.