IX

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Con Carlos

Se encontraba rodeado de sus amigos, que le estaban soltando comentarios para molestarlo. Y el de Ferrari ya estaba un poco harto.

- Eh, chavales, ya vale, ¿no? ¿O empezamos a hablar de Max? ¿O de Yuki? ¿O de Taylor? - Los tres se callaron.

- ¿Y tú cómo sabes lo de Taylor? - Habló Alonso serio en español.

- Pues, no eres el único que sabe sacar chisme, amigo. - soltó una carcajada. - Tranquilo, no diré nada, no tengo el derecho. - seguían en español.

- Bueno... ¿Vamos a chismear..? - esta vez fue Checo quien habló, ya en inglés. Aún seguía un poco sonrojado, le avergonzaba pensar que Max y él habían sido tan obvios como para que Carlos se diera cuenta. Quería pasar de tema antes de que se concentraran en él.

- No te avergüences Pérez, todo el mundo lo ha notado, hasta la prensa, solo estamos esperando a que hagáis un comunicado, o algo así. - dijo Pierre calmado. La verdad era que, el tema de Checo y el Verstappen menor estaba en boca de todos, a los demás pilotos les sorprendía que aún no hubieran escuchado ningún rumor, o hubieran tenido que responder alguna pregunta incómoda sobre el tema.

No saben cómo llegaron a estar otra vez de bromas, pero ahí estaban ahora, mirando como Ocón y Max discutían. Esteban les caía mal a todos, era un prepotente, narcisista que se creía mejor que todos. Se estaban riendo del Beta, era imposible que ganara una pelea contra un Alfa, y menos contra Max.

No sabían de lo que discutían pero parecía que le estaba molestando demasiado a Max. La cosa se estaba poniendo fea, a este paso, llegarían a la violencia.

Las feromonas de odio, asco, y enfado llegaban hasta ellos, que estaban a una distancia considerable. Y Sergio decidió que era suficiente, probablemente pensaba en la prensa, no era bueno para la imagen de Redbull que Max se metiera en una pelea, y menos con otro piloto. O puede que pensara en Max, en que, no quería que saliera herido, o que, le molestaba demasiado el olor.

El omega mexicano se levantó, no vaciló, ni siquiera le afectaron las feromonas de Alfa. Era increíble ver a Checo en acción, podría incluso parecer Alfa de vez en cuando, como en esa ocasión. Solía solucionar las cosas con calma e intentando ser dulce y comprensivo, pero esta vez no fue así. Los tres amigos agudizaron el oído para poder escucharlo.

- Max. - hablaba severo, y se paró a su lado. El Alfa no le miró. - Mírame cuando te hablo Alfa. - soltó feromonas de Omega y el contrario lo miró, aún a la defensiva. Tenía los ojos inyectados en sangre. - Para de gruñir, te quiero en la habitación, te quiero calmado para cuando vaya yo. - Max no se movió. - YA

Vieron a Max vacilar, pero, al final siguió las órdenes de su Omega. ¿Y cómo no hacerlo? Era la pregunta.

- Y tú, más te vale no volver a montar otro numerito, Chiquillo. - ahora era el Omega el que soltaba feromonas de odio y enfado. - Porque la próxima vez, no le pararé los pies, es más, me uniré encantado a la pelea. Y sabes que no saldrás de esa. - Ocón ya tenía el rabo entre las piernas, se le podía oler el miedo a kilómetros.

Antes de que Checo volviera con nosotros y que el Beta saliera corriendo de allí, soltó un gruñido. Ese Omega era imponente.

- Por favor, vamos a hacer algo, me tengo que entretener - decía mientras disminuía sus feromonas.

- ¿Y Max? - preguntó Gasly

- Oh, no pasa nada, necesitará tiempo para calmarse. En un par de horas iré con él. - parecía no preocuparse por esa parte.

Y en ese momento, sonó un móvil. Lo que vendría siendo la distracción de Sergio.

- Pues ya sé lo que podemos hacer - Decía Pierre mirando su móvil. - Lo vamos a pasar bien, ¿Me acompañáis? - y todos asintieron. Las ideas del francés no solían ser buena cosa, pero, con esa situación, mejor acabar metidos en líos, a tener a aquel Omega cabreado.

Iban caminando a su destino, y por el camino la gente se paraba y miraba al grupo debido a las feromonas que soltaba Checo. Los omegas lo miraban con respeto, algunos temblaban, y otros incluso lo admiraban, no era común ver un Omega así. Los Alfas y los Betas se apartaban sigilosamente, no querían meterse en el camino de Checo, sabían que podría acabar mal para ellos.

Parecían un escuadrón de protección, aunque, más que para el Omega, era para los demás. Carlos ya había apartado a un par de personas para que no agobiaran al Omega, ellos tampoco querían enfadarlo más.
La escena era muy imponente.

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- Muy bien, ya estamos aquí. - Pierre ya estaba feliz, sabía lo que se venía. - Esto te va a encantar Checo, ya verás.

Las feromonas del mexicano se redujeron una vez más, pero, aún se podían oler.

Entraron al hotel, y antes de siquiera llegar al lugar definitivo, ya se podían oír las risas de varias personas. Se oía un escándalo.

Y por fin vieron lo que pasaba. Varios Omegas y algunos niños estaban jugando allí. Entre ellos, Yuki y Charles.

A Sergio se le dibujó una enorme sonrisa en la cara, miró a Pierre, y sin esperar más, se unió a ellos. El francés se dirigió hacia su novio, se agachó en el borde de la piscina, ya que el Omega estaba dentro, lo saludó con un beso, y recibió a cambio una jalada que lo hizo caer al agua. Al salir pudo oír esa risa que tanto le gustaba oír, y él también rió.

Y luego ahí estaba Carlos, paralizado. Temía que si se moviera esa imagen desaparecería. En ese momento, el Alfa de Ferrari estaba en el cielo, maravillado con las vistas que tenía. Miraba a Charles, a lo que su Alfa reclamaba como su Omega. Estaba mojado, podía ver las gotas de agua caer por su cara, por sus muslos, que estaban medianamente descubiertos, y pos su pecho, que estaba cubierto con una camiseta corta de rejilla, con el pelo despeinado, y un sonrojo en sus mejillas, aún no sé percataba de la presencia del mayor, seguía jugando con el agua, mojando a los cachorros y a los Omegas. Y abrazó a Checo cuando llegó a él.

Empezó a soltar feromonas, no lo podía evitar, con ese precioso Omega no podía evitar hacer ese tipo de cosas, en serio que lo traía loco y más en esa situación en donde el Omega se veía tan lindo y sexy a la vez.

Todos lo empezaron a ver, probablemente porque detectaron sus feromonas, oyó a alguien hablarle, pero él no hacía caso, no quería oír nada, solo, seguía mirando al Monegasco.

Notó que algo se le escurría por la nariz. También lo ignoró, en ese momento no le interesaba. Entonces, vio al Omega sonrojarse, y prácticamente huir de ahí.

Carlos quería ir a buscarlos pero, perdió el equilibrio, y tuvo que sentarse para no caerse. Demasiada emoción para el Alfa. Ahora se sentía mal, ¿Había asustado a Charles?

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Capitulito guapo.
La verdad, al principio no sabía que poner en la primera mitad del cap, pero, al final, me ha servido.
El próximo capítulo es el Décimo, y he decidido , que será un capítulo especial. Será desde el punto de vista de Max, veremos por qué se peleó con Ocón.

¿Os gusta lo que he hecho ahí? XD
Ya lo siento, pero, no podía faltar Taylor Swift.
Hay que aprovechar, ya que es un fanfic, voy a por todas.

El Indicado // Charlos//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora