Te Buscaré En Cualquier Realidad

Fin de semana.

Narra cinco.

T/n llegó primero a la cabaña gracias a la ventaja que tuvo al correr primero, se detuvo en la puerta y dió pequeños brincos de triunfadora "perdedor, te deje atras" me gritaba efusiva, en cuanto me acerque la tomé en mis brazos cargándola del modo típico que unos recién casados tienen cuando entran por primera vez a su nuevo hogar, ella soltó una risa ligera, me detuve un segundo a contemplarla y al parecer eso le provocó un leve color carmesí en sus mejillas.

-Eres tan linda, aveces siento que eres el más hermoso rayo de luz, y que yo como la perfecta tormenta que soy, te apagare, y no quiero eso- digo al tiempo que acaricio una de sus mejillas, ella cierra los ojos con gesto tierno, disfrutando de mi leve caricia.

-Tu me haces sentir cosas que jamás había sentido, y aunque todo esto a ocurrido de la forma más bizarra posible, y no sabemos bien si estamos haciendo lo correcto, yo tengo algo que si es certero- ahora ella acariciaba mi cabello de forma suave -quiero estar contigo, hoy, en el presente- sonreí de oreja a oreja por lo que había dicho,tomé su mentón para acercar su rostro a mi y comenze a besarla, era un beso tierno pero también apasionado y necesitado, entre a la cabaña con ella en brazos, aún seguíamos besándonos, era algo que ya tenía tiempo esperando volver a besarla de esta manera, de forma inconsciente ya estábamos en una habitación de momentos ella se apartaba para poder tomar aire pero no esperábamos y seguíamos con besos apasionados pero a su vez tiernos y delicados.

La recosté sobre la cama y yo me recosté justo a su lado, tomaba su cabello enrredandolo en mis manos, la tomé de la cintura y disminui el pequeño y único espacio que quedaba entre los dos, podía sentir como se tenzaba al sentir el más mínimo contacto conmigo, sus manos jugaban con los botones de mi camisa, dudosa de si era lo correcto desabotonarlos o detener todo alli.

-T/n, cariño no quiero presionarte, yo..- me interrumpio colocando su dedo índice sobre mis labios y con la yema del mismo acaricio mis labios suavemente haciéndome sonrrojar.

-yo quiero esto, quiero estar contigo-

No dude ni dos segundos en cumplir su deseo, le sonrei feliz pues era obvio que también deseaba estar con ella así que ahora la bese con más intensidad, poco a poco los dos nos dejábamos llevar por el momento deseosos uno del otro, acariciaba con ternura cada parte de su cuerpo, juraba que podía tocar las estrellas estando con ella pues así se sentía este precisó momento, como tocar las estrellas.

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-Te necesitaba tanto- digo en voz baja mientras ella estaba recostada sobre mi pecho y yo acariciaba su cabello.

-¿De verdad crees que seremos felices cinco?- me preguntó con voz tenue.

-yo me encargaré de eso linda- bese su frente -Juro por mi alma que te are feliz, a ti y nuestro niño o niña- pude sentir su enorme sonrisa, así que también sonrei genuinamente.

-Vamos a comer,muero de hambre- ella se levantó de la cama envuelta en la sabana, ¡Dios! Hasta envuelta en una saba cualquiera era perfecta, entro a la regadera y la escucho gritar "Ni vengas,mejor haz de comer para nosotros" rei por su comentario y cubrí mi rostro con mis dos manos.

-¡Eres una mandona!- grite para que pudiera escuchar mi comentario.

Me vesti, salí de la habitación, y me diriji a la cocina para preparar la comida y poder disfrutar del lugar.

Después de un rato ella salió de la regadera, entro a la habitación a vestirse y se acercó a mi abrazándome por la espalda.

-Linda, debo seguir cocinando o ¿es que acaso no tienes hambre?- ella resoplo decepcionada y fingiendo un puchero.