2014 (pt. 2)

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Madrid, España
31/12/2013
12:36 PM
Temporada 2013-14

Besos iban y besos venían, pero las que no se iban eran sus ganas de pasar a mayores con aquel hombre. Nunca habían ido más allá de unos pequeños toqueteos y ya se estaba hartando, deseaba que Angelito Di María pudiera saciar su calentura.

Che, che, pibe — Posó una de sus manos en su mejilla y la otra la dejó acariciando su cintura. Estaba sentado sobre la cama con el mayor encima, se sentía satisfactorio — V-vos, va... Bueno, yo quería decirte algo desde hace un tiempo — Una sonrisa por parte del otro hizo que siguiera hablando — Yo te amo. Y no te lo quise decir antes porque no estaba seguro si de verdad yo sentía eso y... y.. — Cómo las manos de Luka tomaron sus hombros repentinamente, se calló.

Eres lindo si quieres — Para él su español mal hablado era lo más lindo que había escuchado en su vida, era majestuoso.

El más bajo volvió a besarlo, solo que ésta vez, tomó su mano y la dirigió a su entrepierna. Cómo cualquier ser humano hubiera hecho, al principio se sorprendió por tal atrevimiento, aunque más tarde entendió las intenciones del muchacho encima suyo. Por eso, comenzó acariciando la zona por encima de la ropa, pasando a escuchar como unos pequeños suspiros empezaban a quedar atascados entre sus bocas. Tomándolo entre sus brazos en una especie de abrazo, lo obligó a levantarse y lo llevó a la cama, dónde lo hizo acostarse para luego ponerse encima suyo. Antes de que los besos volvieran, su camiseta de escurrió por las manos de su hombre.

Poco a poco iba desabrochando la camisa que llevaba. Si, era treinta y uno de diciembre, pero, ¿Por qué Luka se alistaba más de once horas antes? No encontraría una respuesta convincente, ¡Apenas había comenzado el día y él ya estaba en traje! Cómo sea, le restó importancia.

Continuó besando los labios ajenos, dejando que sus dedos recorran libremente el abdomen sin protección del otro. Con su mano libre se tomó el trabajo de bajar el cierre y abrir el botón del pantalón del mayor. Con esa misma mano tomó la cintura del otro y empezó a dejar un camino de besos que iniciaba en su rostro, terminando en su parte baja, dónde se frenó para mirarlo desde aquella zona. Iba a suceder lo que hace tanto tiempo anhelaban; iba a pasar algo que los ponía nerviosos, más que nada al más bajo.

— ¿Puedo? Ver como el otro asentía sin prisa y con una sonrisa, hizo que sus pupilas se exparcieran por el resto de sus ojos, a la vez que preparaba su memoria para captar ese momento que nunca borrará de sus recuerdos.

Sentir como el más alto le proporcionaba una lamida por encima de la tela, hizo que casi se desmayase por el placer proporcionado a su cuerpo. Di María lo notó; sintió como ahora el menor dejaba que sus labios estimulen esa zona por encima de la ropa interior que aún llevaba consigo. Su boca inconscientemente dejaba escapar los suspiros que se esforzaba en callar, tapando ésta con una de sus manos para evitar pasar vergüenza, le daría pudor que su pareja que no es su pareja lo oyera en un estado tan deplorable. Se dió vergüenza cuando la lengua del contrario tocó sin nada de por medio allí abajo y casi grita de la emoción y la... Excitación. Se dió vergüenza cuando el moreno lo notó y rió victorioso; también se avergonzó cuando Ángel se dió cuenta de lo sensible que eran sus "partes íntimas".

Todo el mundo sabe lo que sucedió después, un simple "te quiero" y a dormir, por supuesto. El más bajo lo convenció de que alguien los podía ver, a pesar de haber sido él quien había invitado al otro a pasar al siguiente nivel, sucedía que su compañero de cuarto podía aparecer, aunque estuvieran comiéndose a los besos, pensó en eso un poco tarde, por suerte nadie los vió. El rubio cayó en sus brazos y en los de Morfeo, mientras él acariciaba su cabello y en su mente cantaba algunos versos de diversas canciones. Una de ellas era "Beso a Beso" de, obviamente, La mona Jiménez. No era una canción de amor, simplemente se le había aparecido en la mente y lo hizo pensar.

Encontrarse otra vez -MODRÍA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora