Narrador omnisciente
— ¡Como cambia uno cuando se baña! — Danela rodó los ojos, pasando por un lado de Mauro para entrar a la casa
— Cállate estúpido, no me hagas arrepentirme de venir, — Le respondió dejándose caer en el sillón. — ¿Te falta algo?
Mauro había organizado una reunión / fiesta con la excusa de festejar lo bien que le estaba yendo
—Nada, todo en orden… ¿A qué horas viene Alejo?
—No sé, la verdad, estaba en el estudio y de ahí se viene con los demás, supongo.
Mauro asintió — ¿Nerviosa?
—Un poco la verdad. No me dejes sola que vine solo porque no dejabas de insistir
Era la primera vez que se juntarían todos después de terminar con Indra. Realmente Mauro era su amigo cercano, con los demás hablaba pero no tanto y al ser todos conocidos de su ex pareja le inquietaba un poco sentirse fuera de lugar, ya que obviamente ella y Alejo mantendrían su distancia.
—No te preocupes, vienen más personas que no conoces, te las voy a presentar y sino a lo mucho te quedas con el gordo, nomás no cojan frente a todos — dijo divertido.
—¡Mauro! Sé serio,por favor.— Soltó a la vez que le arrojaba uno de los cojines del sofá
—Bueno, cojan frente a todos pues..— dijo riendo esquivando el objeto que su amiga le aventó.
— Que insoportable eres
[…]
La gente seguía llegando y Danela estaba conversando con Tiago y Daniel, ya que Mauro se había ido a asegurarse que todo fuera en orden. Ambos chicos eran muy agradables, había escuchado de ellos pero no los había conocido en persona.
Volteó un poco cuando sintió algo observada, al hacerlo sus ojos conectaron con los de Alejo, le sonrió y el sutilmente señaló con su mirada hacía adentro de la casa. Danela captó la indirecta, se disculpo con sus nuevos amigos para ir hacía el lugar indicado.
Una vez dentro fue a la cocina ya que estaba despejada, se recargó de espaldas en la encimera colocando sus codos en ella. Instantes después apareció Alejo, quien al verla automáticamente sonrió haciendo que sus ojos se achinaran.
—¿Te diviertes con tus nuevos amiguitos? — preguntó el, después le dio un trago a su bebida
— Son agradables, Mauro me los presentó para que no estuviera tan sola — respondió Danela sonriéndole
—Un genio el Duketo presentándote amigos eh
—Dani es lindo...— Alejo la miró alzando una ceja, haciendo que soltara una carcajada — No seas celoso, gordo... Obvio estoy jugando. — murmuró acercándose un poco, estiró un poco su mano para alcanzar una de las cadenas que Alejo traía puestas.
— Yo no estoy celoso de ver a mi novia hablando con dos hombres medianamente atractivos
—¿Tu novia? — preguntó con una sonrisa en los labios, sus dedos jugueteaban un poco la cadena— es la segunda vez que me dices así eh
—Tampoco lo has negado — dijo
disminuyendo aún más la distancia entre ellos — Estás hermosa como siempre…
Y sin más Alejo la besó suavemente sosteniéndola por la cintura mientras que ella posaba sus manos alrededor de su cuello. Dejándose llevar por la sensación de sus labios, ambos se olvidaron de dónde estaban.
—Ah noo pero mira ¡que bonitos son! — se separaron rápidamente, encontrándose con Mauro quien los miraba con una sonrisa burlona — Miren a los que querían estar en bajo perfil
