10장

84 24 0
                                    

—¿Cómo es que te gusta fumar está porquería? —pregunto Jin mientras tosía aquella sustancia tóxica.

Humo blanco salió de su boca, pero a Jes no le importo porque ya estaba poniendo el cigarro de marihuana de vuelta a la suya con una sonrisa.

—Porque me relaja, pero tú tienes alergias, así que para ti no cuenta. —sonrió pareciendo ya ida en otra parte, sobre todo por sus ojos muy rojos que denotaban que no estaba conectando sus neuronas muy bien.

—Como sea, solo acepte venir porque no quiero ir a la escuela. —Seokjin bufo mientras sentía un poco de comezón y dolor de cabeza repentino.

Después de esto tendría que tomar mucha agua.

—Te apoyo, la escuela es una mierda. —ella entonces salto del suelo y se incorporó. —Pongamos una tienda de churros.

Seokjin la ignoro en su divague mientras seguía mirando el techo con algo de angustia pegada en su rostro.

Estaba huyendo de sus problemas por primera vez.

Si Jes tenía razón y le gustaba Hoseok, entonces no sabría qué hacer con dicha información. Es decir, todo fue tan repentino que no tenía ni idea de que hacer. También dándose cuenta que había estado demasiado ocupado tratando de ser perfecto que sus procesos afectivos hacían otra persona que no sea él mismo, no habían evolucionado y se habían quedado en cuarto grado cuando se puso colorado porque una niña le dijo que era lindo.

Entonces era pobre y escaso en esto de tener novios o novias en general.

¿Ahora qué? ¿Acaso estaba pensando en declararse? ¿Y parecer un tonto porque al inicio lo odiaba y ahora le gusta su presencia?

Mierda, es hasta tonto decirlo: "Bueno, antes me parecías molesto, pero entonces cuando me sonríes y me abrazas, me gusta de alguna forma, ¿quieres ser mi novio?".

Eso era patético y delirante.

Hoseok se reiría.

Pero tal vez no.

Tal vez como en un cuento de hadas, Hoseok iría a sus brazos y le diría que lo correspondía totalmente.

Si, puede que Hoseok este un poco enamorado, pero eso no quiere decir que los sentimientos no puedan cambiar, como le pasó a él. Tal vez Hoseok ahora haya disminuido su gusto por él y lo mandé a la mierda porque se demoró en darse cuenta que le gustaba.

Mierda, hasta él se hartaría de sí mismo.

Siempre cabía la posibilidad de que Hoseok se haya cansado de él y entonces Seokjin quedé como un tonto por tratar de enmendar su error. Hoseok tal vez haya cambiado ahora que lo conocía un poquito más y seguro y no quiere esa retribución porque no sentía nada ya.

Si corazón se hundió un poco con aquel feo descubrimiento y sentía que se asfixiaba.

—Mi madre está aquí—soltó de repente Jes con una cara de sorpresa.

Seokjin se dio cuenta que la puerta principal sonaba y que Jes ocultaba su droga debajo de su cama desesperadamente.

Seokjin se levantó con pánico y le pregunto: —¿Qué hago?

—Lárgate, inepto.

Y entonces lo sacudió paga que se fuera por la ventana, de la misma forma en la que había entrado porque no debían saber que se la pasaron toda la madrugada en una cafetería nocturna hablando sobre sus líos homosexuales.

Seokjin casi se disloca una pierna bajando por el árbol, pero por lo menos salió ileso.

Miro su casa y no quiso estará allí, no de buen humor para escuchar a su madre, así que decidió caminar un poco antes de decidir qué hacer.

ゴーテルDonde viven las historias. Descúbrelo ahora