[Pov Omnisciente]
En la casa de los Armstrong era un día especial, Sam Sarocha cumplía seis años. La pequeña se mostraba emocionada, ella estaba satisfecha porque por primera vez su madre ojinegra se la pasaría todo un día de su cumpleaños con ella y no como años pasados que solo llegaba en la noche.
Este año era diferente para ella, y eso le gustaba.
Su temática de su cumpleaños sería de sus personajes favoritos del momento, su fiesta seria de la película intensamente, sus madres se encargaron de todo fuera al gusto de su hija.-¿Dónde está, Freen?-preguntó Jim a Becky quien acomodaba el arreglo que colgaría en la mesa de regalos de su hija
-No ha llegado- Becky seguía intentando amarrar el listón para colgar el adorno-.¡Lo logré!
-¿Cómo que no ha llegado?-la chica se cruzó de brazos. Becky bajó del banco donde estaba montada
-No. Le hablé que el pastel no lo habían traído, así que me dijo que iba a pasar a ver-respondió la castaña
-Ah mira, ahí viene- Jim vió a la ojinegra entrar hacia el jardín
Becky no había visto a la ojinegra, quedó embobada ante lo linda que se veía la ojinegra y Freen igual pensaba lo mismo y es que ver a su ex esposa nuevamente era un reto para ella no poder besarla y abrazarla.
-Al fin llegas- Jim besó la mejilla de su amiga
-Tuve que ir a ver lo del pastel-respondió-.Hola Becky
Se acercó a la castaña para poder besar su mejilla pero ésta simplemente desvió su rostro para evitar el contacto con la ojinegra. Freen sintió unas ganas inmensas de llorar, un nudo en su garganta y sus lágrimas apunto de salir, pero se contuvo.
-¿Dónde está Sam?-preguntó mientras aclaraba su garganta
-En su habitación con James y Kade-respondió Jim
Freen simplemente asintió y volvió a entrar a la casa dejando sola nuevamente a las dos mujeres.
Becky estaba de brazos cruzados y la mirada hacía el césped, ella ni siquiera sabía porque reaccionó así con la ojinegra, si ella moría por verla.
Quizá estaba así porque su hija le contó que vio a Freen hablar muy gustosamente con una preciosa mujer de ojos azules, Becky al escuchar eso sintió celos.-Bec, ¿puedo preguntarte algo?- Jim tocó el hombro de su amiga sacándola se sus pensamientos
-Eh... ¿si?-respondió la castaña
-¿Aún quieres a Freen?- Becky comenzó a ponerse nerviosa
Hace días ella contó que estaba en una relación con Kendall, incluso Freen llegó a enterarse por Kade y aunque la ojinegra ya tenía las sospechas muy claras no se atrevía a preguntarle a Becky si estaba saliendo con Kendall, era cosa que ella no debía importarle.
Los padres de Becky le tomo por sorpresa la noticia, pues ellas no se imaginaron que su hija iba a querer volver a tener una relación con alguien más, pero como buenos padres le dijeron a su hija que la iban apoyar en lo que ella quisiera.-Bec... ¿Aún amas a Freen?-volvió a preguntar. Pero Becky no respondió nada
Freen por su parte entró lo más rápido que pudo a uno de los baños que había en la casa. Ella no se contuvo y sus lágrimas comenzaron a caer por su rostro y los pensamientos del pasado llegaron a su mente. Ella sabía que el dolor y sufrimiento que le hizo a Becky iba a seguir pagandolo.
Después de que se desahogara lo suficiente y que sus ojos se quitarán lo hinchado decidió salir de aquel baño para ir a ver a su pequeño hija cumpleañera.
ESTÁS LEYENDO
A promise is a promise
Teen FictionBecky armstrong es una chica de 15 años que queda embarazada de su novia Freen. Será que Freen Sarocha se arrepiente por no haber usado protección, por lo que para Becky fue una bendición para su vida. Freen es obligada a casarse con Becky y así m...