Betrayers

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Después de encontrar el teléfono de Sana abandonado, las chicas se sintieron más desesperadas que nunca.

La esperanza de encontrar a Dahyun y Sana disminuía cada vez más, hasta que Mina recibió un mensaje con una ubicación y un mensaje que decía: "Si tanto la amas, ven a por ella". Mina sabía que el mensaje era de Sana, por lo que tomó el carro de Jihyo y se fue hacia la ubicación indicada.

Finalmente, Mina llegó a la cabaña aislada donde se suponía que estaba Sana, y allí la encontró esperándola afuera. Mina salió del carro y le preguntó a Sana sobre Dahyun, pero Sana decidió enfrentarse a ella y reclamarle todo lo que había hecho.

—¿Cómo pudiste hacer esto, Mina? ¿Cómo pudiste robármela? —preguntó Sana con enojo y tristeza.

—Sana, no te robé nada. Dahyun tomó su propia decisión, ella quiso irse conmigo —respondió Mina con calma.

—Pero tú la persuadiste, la manipulaste —acusó Sana con una voz llena de ira.

—Eso no es verdad Sana. Dahyun tomó su propia decisión, ella sabía lo que quería —replicó Mina.

Sana se acercó a Mina con ira en sus ojos. —Tú eres la única que la ha hecho infeliz. La has alejado de mí y ahora está herida por tu culpa —dijo Sana con un tono amenazador.

Mina trató de mantener la calma, pero la tensión entre las dos chicas era palpable.

—Sana, no estoy aquí para pelear contigo. Solo quiero saber dónde está Dahyun y llevarla a casa —respondió Mina con firmeza.

—Pues no la vas a tener, Mina. Dahyun está mejor conmigo, lejos de ti —dijo Sana con determinación.

Mina se dio cuenta de que Sana no iba a ceder fácilmente.

—Sana, por favor, deja que la vea. Quiero asegurarme de que está bien —suplicó Mina.

—No, Mina. Tú no la mereces. Tú no la quieres como yo lo hago —dijo Sana mientras se acercaba a ella cada vez mas.

Mina dio un paso hacia atrás, temerosa.

—Sana, ¿qué estás haciendo? —preguntó Mina con voz temblorosa.

Pero Sana no estaba dispuesta a escucharla.
—¿Cómo pudiste pensar que podrías tener a Dahyun para ti sola? ¡Ella también es mía! —exclamó Sana, agarrando a Mina por los hombros y sacudiéndola con fuerza.

Mina trató de liberarse del agarre de Sana, pero era inútil.

—¡Sana, suéltame! Yo no le hice nada a Dahyun. Fuiste tu la que la alejó —dijo Mina, tratando de calmar a Sana.

Pero en lugar de calmarla, estas palabras parecieron encender aún más la ira de Sana.
—¡No! ¡Tú eres la obsesionada! ¡Si no hubieras estado cerca de Dahyun, ella seguiría a mi lado! —gritó Sana, agarrando una navaja de su bolsillo.

Mina retrocedió horrorizada mientras Sana avanzaba hacia ella con la navaja en la mano.

—¡Sana, por favor, detente! No tienes que hacer esto —imploró Mina, intentando escapar.

Pero Sana ya estaba fuera de sí.

—¡Cállate, Mina! ¡Tú eres la culpable de todo esto!

Dahyun se dio cuenta de que la tensión entre Mina y Sana había alcanzado un punto crítico y decidió intervenir.

—¡Sana, detente! ¡No puedes hacer esto! –gritó Dahyun, tratando de detener a su ex pareja.

Pero Sana no la escuchó y siguió avanzando hacia Mina con la navaja en la mano. Mina trató de esquivarla, pero Sana logró acertarle una puñalada en el brazo. Mina cayó al suelo, gritando de dolor.