El error de conocerte

Una tonta no tan tonta

Ya había pasado unos meses desde que nos conocimos.

Ya habíamos salido la cantidad de veces posibles.

Él había demostrado su afecto hacia mi.

Yo todavía no.

¿Qué? Soy lo suficiente extrovertida para caerle bien a quien me cruze, pero tambien lo suficiente introvertida como para no poder decirle lo que siento a cualquier persona.

Y es obvio que, si se trata del que me gusta, me va a costar el doble.

Pero esta noche vamos a volver a salir.
Por lo que será esta La Noche:

Le voy a decir todo lo que pienso de él, y que sea lo que Dios quiera.

Ok, ya estoy lista hace  unos minutos, en los cuales Mark tendría que haber llegado.

Pero no, no llegó. Tampoco responde mis mensajes ni llamadas.

Y me estoy empezando a preocupar.

Quizás se le hizo tarde, o algo así.
Pero me hubiera avisado, ¿no?
¿Es normal que llegue más de media hora tarde cuando siempre llega diez minutos antes?

Aún así, espere más de una hora, revisando mi celular repetidamente, viendo si el horario era el correcto, intentando que me responda los llamados o los mensajes, saliendo a la puerta a esperarlo.

Pero nada.

Sin respuesta alguna.

Probé una última llamada, nada.

Me rendí.

Desilucionada, estaba por ponerme el pijama, cuando me llegó un mensaje.

Mark ♡: Lo lamento.
                 Paso algo realmente 
               inesperado.
                 Mañana te cuento.
              

Oh, era grave.
 
Yo: ¿Quieres que vaya a tu casa?

Me arrepentí cuando lo vio y no respondió.

Mark ♡: No, gracias.
                 Prefiero estar sólo.
                 Nos vemos Pimpollo.

¿El querer estar sólo?

Es algo que nunca quiere, siempre quiere estar con alguien al lado, sea un amigo o su hermano.
Pero decidí no intervenir.

Si quiere estar sólo, mejor dejarlo sólo.

Yo: Nos vemos, Mark.

Desilucionada, me puse mi pijama, y fui a prepararme la cena con pocos ánimos.

Sonará egoísta, pero creo que no hay otra noche en todas las que faltan en que me anime a enfrentarlo.

Pero, ya que, no hay que adelantarse a los hechos, capaz necesita tiempo.
Estaba mal en la escuela, y podría ser que se quiere tomar un tiempo para estudiar y arreglar sus (muy) bajas notas.

Oh no.

¿Y si lo ofendí con algo?

Tonta, seguro era eso.

Ahora no me va a hablar nunca más.
Voy a estar sola por el resto de mi vida.
Nunca voy a conseguir a alguien que me aguante en todas mis etapas emocionales.
No voy a estar en pareja jamás.
En ningún momento de mi v...

Clik clik.

Mark ♡: Pensándolo mejor, si, ven.
                 Pero que sepas que no tengo                 la mejor comida.

Inmensamente agradecida a su repentino cambio de decisión, voy rapidísimo a cambiarme.

Ahora ya no eres tan tonta, te volvió a hablar.

Cierto.

Y me alegro por eso.

Salgo lo más rápido que puedo a esperar un taxi.

¿Podré confesarme ahora que casi todo el rumbo de la cita cambió?

Y si puedo hacerlo, ¿reaccionará bien?

Preguntas que no debería darle tanta importancia, pero les estoy dando mucho más de lo que me imaginaba darles.

Y ¿Salió bien?

Si, pero no.