Esta es la historia de un gato hechicero que consiguió sus poderes mediante un error en una máquina del tiempo que hizo que Kylo se volviese mago. Desde ese entonces roba pero las cosas le salieron mal cuando robó a un presidente corrupto
Una semana después, Kylo, viendo el lío montado en la ciudad, se decidió finalmente a parar al presidente Ronald. Salió de la casa donde llevaba durmiendo más de 2 semanas y donde parecía que la dueña no iba a volver. Se paseó por las lluviosas y oscuras calles en un tenebroso atardecer que llevaban al edificio del señor gordo y rubio. El gato fue corriendo acompañado de B.O.B. Mientras corría pudo oír sirenas, gritos desesperados, algún que otro cadáver. Kepo no era lo mismo.
Siguió corriendo y se topó con un señor delgado, con los ojos salidos y con una cicatriz en el pecho que corría de un lado a otro con un cuchillo gritando fuertemente, estaba loco. El chico vio a Kylo y le lanzó el cuchillo tratando de atravesarlo dando un grito en seco. Pero Kylo se lo devolvió con su magia dándole con el cuchillo en el hombro.
- ¡¡¡Aaaaaaarrrgg!!! - dijo exageradamente el chico - ¡¡¡El presidente hace bien en todo lo que hace!!! ¡He matado a muchos rebeldes en su nombre, esta herida no me va a parar! ¡¡¡Viva el presidente!!!
El señor dio la vuelta y agarró una botella de alcohol del suelo, le dio un sorbo, la lanzó contra una pared rompiéndola en muchos pedazos y desparramando el licor restante. Después el señor salió corriendo sin quitarse el cuchillo del hombro.
- Meow - le dijo vagamente Kylo a B.O.B.
B.O.B. Le lanzó al hombre una pequeña bomba a distancia y el hombre explotó sádicamente manchando aquel lugar de rojo. El gato siguió corriendo sin mirar atrás.
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Al llegar a las puertas del edificio, Kylo pudo ver muchos guardias armados con fusiles de asalto y armas varias. Esta vez Kylo no quiso ir a la defensiva escondiéndose y entrar sigilosamente. Fue de uno en uno arañando la cara a los guardias y escupiéndole fuego, por otro lado, B.O.B. se encargaba del resto pegando C4 sigilosamente en sus espaldas, cuando ya los tenía todos, el gato se subió al robot y B.O.B. apretó el botón que hizo explotar a todos los guardias.
Entonces unas sirenas empezaron a brillar y sonar en lo alto de la torre. El gato y el robot subieron por el exterior del edificio, B.O.B. volando y Kylo desafiando la gravedad mágicamente escalando por la pared como si del suelo se tratase.
Mientras subían, unos nuevos guardias salieron de la entrada del edificio, en la parte más baja, y empezaron a disparar al gato. Él esquivaba todos los tiros fácilmente con su agilidad felina y seguía avanzando rápida y seriamente hacia arriba. Sin embargo, una bala alcanzó a B.O.B.
La bala no le hizo mucho daño, pero el robot empezó a bajar de velocidad lentamente. Cuando el robot parecía que se caía, el gato agarró con los dientes uno de sus brazos y siguió avanzando sin detenerse, pero esta vez esforzándose por llevar a su amigo.
- ¡Gatillo! - dijo B.O.B. emocionado
- Meoooooooooowwwwwwww - Maulló el gato seriamente
Entonces Kylo llegó a la última planta, el despacho de Ronald Trampas
