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Aplausos marcados resonaban en todo el salón vacío, él volteó hacia atrás con una expresión de asombro se suponía que solo él estaba ensayando. Bajó su rostro y tomó sus cosas para proceder a irse, sin embargo la voz de su coreógrafo lo detuvo.

- He visto ese tipo de precisión pero hay algo diferente en tí... expresas exactamente lo que la pieza requiere -. Dijo con una sonrisa.

Beomgyu le observó con fastidio a la misma vez resoplando.

- ¿No hay un pero? -. Preguntó manteniendo su rostro molesto.

- Definitivamente no.. tienes todo lo que un bailarín desearía tener.

- ¿Por qué tanto halago? Dígame que quiere sexo y lo resolvemos, déjese de tanta cursilería... suena estúpido-. Taehyun negó y apretó sus labios en una línea.

- No Beomgyu, en ningún momento he pensado en tí sexualmente. Las personas pueden querer todo de otras pero en mi caso no es eso lo que pido -. Beomgyu arqueó una ceja con diversión.

- Oh,. Debería sentirme ofendido pero sabe que no lo estoy... Señor Kang creo que usted debería ser poeta en vez de coreógrafo o no espere ¿Le gusta la poesía barata? -. Kang sonrió sin mostrar sus dientes.

- Sí, me gusta la poesía, el arte, el baile entre otras cosas que lleven el sentido de la vida.

Beomgyu se carcajeó

- Me hará llorar señor Kang, ¿Sabe lo que pienso? la vida es solo una estación antes de llegar al otro lado del túnel. La muerte está a solo un paso... Nuestros huesos y órganos son tan delicados que en cualquier momento pueden dejar de funcionar, la gente suele decir que se debe vivir cada día como si fuera el último, estúpidos quizás la muerte los alcancé antes de que empiecen su día. Y bueno quiero terminar esta charla sentimental con su permiso -. Kang extendió su mano para ayudarle a levantarse pero él negó y apoyó su peso en sus piernas para incorporarse.

- Nos vemos mañana Beomgyu-. Este se rió irónico.

- Sí es que amanezco vivo-. El rostro de Kang cambió a uno preocupado - Ay no me diga que no tiene sentido del humor. Nos vemos -. Salió a pasos lentos de la academia de ballet.

Kang tomó camino hacia su despacho, abrió la puerta se sentó en su cómoda silla y cerró sus ojos.

No dejaba de pensar en la dualidad que poseía Beomgyu, trataba de descifrar porque cuando bailaba parecía un ángel volando sobre el piso de madera, pero al acabar la pieza lírica toda esa magestuosidad se iba por completo y eso lo confundía demasiado.

El niño era reacio a los halagos, detestaba ser el centro de atención y huía rápidamente al sentirse especial por un momento.

Iba caminando hacia su departamento con sus audífonos a todo volumen, las gotas de lluvia empezaron a pringar su cara y se apresuró a llegar para cubrirse y evitar un resfrío.

Cuando ya estuvo dentro se deshizo de sus zapatos y no pasó por desapercibido su imagen en el espejo. Se veía horrible, sus ojeras parecían eternas, sus clavículas se notaban demasiado, sus cachetes que antes eran regordetes ahora estaban sobados, levantó su camisa y observó los cortes frescos. Sentia asco y corrió al retrete a vomitar, claro está que su estómago solo dejaba salir agua y ácido gástrico. Sus manos empezaron a temblar y su cuerpo colapsó, tenía la opción de pedir ayuda pero no lo iba a hacer. No quería dar lástima era suficiente con lo que él sentía hacia si mismo.

Pasaron alrededor de dos horas y él aún seguía tumbado en el piso del baño. De sus ojos no salían lágrimas pero tenía una sensación de que algo estaba a punto de explotar en su pecho, su respiración se entrecortó, llevó sus manos hacia su pecho pasándola de arriba hacia abajo tratando de calmarse solo que no lo conseguía.

Observó las bolsitas que se encontraban en el casillero del baño, se paró con dificultad y tomó una de estas. Trazó una línea con una navaja que tenía ahí mismo y la inhaló sintiendo un piquete en su nariz...

Se sentía harto de vivir pero era muy cobarde para morír. Sí Choi Beomgyu al que "no le importaba nada" le temía a la muerte.

La droga empezó a hacer efecto y su mente se nubló por completo, lo hacía sentir en "paz"... que triste cuando el efecto se acababa y volvía a su miserable vida.

Los moretones en sus pies empezaban a tornarse más dolorosos gracias a la obsesión que tenía a lastimarse para evitar los malestares Psicólogicos. Ese baile Etéreo solo alimentaba más sus ganas de soltar todo lo que llevaba cargando sin éxito claro está. Todo lo que hacía era meramente por desquitarse en si mismo.

No sabía en qué momento empezó a sentirse tan desvalido, trataba de hallar al Beomgyu que alguna vez fue felíz pero desgraciadamente su jodida memoria en modo de defensa le hizo olvidar.

Las palabras de Kang resonaban en su cabeza aún nublada por la droga.... Detestaba que ese hombre tuviera razón.

Es tan absurdo y estúpido la manera en como quiso abalanzarse a sus brazos y desahecerse de su desastre y llorar como un niño.

Es un ser humano claro está. ¿Qué se iba a esperar? Un niño asustado de sus propias emociones... sirve en algún momento hacerse el fuerte hasta que el cerebro se lo toma personal y te bloquea. Tan irónico que al mismo tiempo te pasa factura a tu cuerpo.

No sabe cuántos minutos u horas pasaron solo tenia una ansiedad de comer como si no hubiese un mañana.

Culpa. Eso presentaba cuando estaba completamente saciado, las arcadas se hicieron llegar pero el sacó fuerzas de dónde no tenía para no echar el alimento.

Los demás dirían que necesita ir a un psicólogo, pero lo que no sabían era que Beomgyu había acudido a más de 3 Psicólogos en los últimos 2 años.

No tenía solución. Árbol que nace torcido nunca su rama endereza...

Kang Taehyun pensaba todo lo contrario. Confiaba plenamente que aún los árboles torcidos tenían una forma de enderezarse.

Eran tan diferentes,.. como un rompecabezas impar pero en este mundo siempre hay un camino aunque esté lleno de piedras y rosas con espinas venenosas.

Taehyun creía en los propósitos y Choi Beomgyu tenía uno según él.




𝔸𝕟𝕘𝕖𝕝𝕤 𝕝𝕚𝕜𝕖 𝕪𝕠𝕦 || 𝕋𝕒𝕖𝕘𝕪𝕦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora