Capítulo Final

4.1K 588 58
                                    

Las gotas de lluvia golpean con fuerza los ventanales en la casa de Jennie, afuera una gran tormenta parece estar formándose pero a Ella parece no importarle.

Camina a paso apresurado hasta el sofá, subiéndose con cuidado. A su lado, el móvil de su madre se encuentra y con su pequeña mano sujeta el teléfono de casa.
Jennie se encontraba en su habitación durmiendo la siesta, e Ella se había quedado en la sala viendo Tiana y el Sapo.

Entonces, una vez sentada moviendo las piernas con algo de nerviosismo, Ella comienza a teclear el número que se encontraba en la pantalla del móvil de su madre.

—¿Si? —la voz de Lisa suena rápidamente en la otra línea, haciendo sonreír a la pequeña.

—Hola, entrenadora Lili.

—Ella, hola —la pelinegra suena un tanto desconcertada—. ¿Cómo tienes mi número?

—Lo he mirado del móvil de mamá sin que se diera cuenta.

Lisa frunce el ceño al escucharla, un tanto confusa.

—¿Está todo bien?

Ella suspira y niega, a pesar de que la pelinegra no puede verla.

—Creo que no.

—¿Qué ocurre? —Lisa pregunta preocupada.

—Mamá está muy triste.

Aquellas palabras son como un balde de agua fría sobre Lisa, quien suspira al escuchar a la pequeña.

—Ella...

—Tía Nay me ha dicho que los adultos también se asustan, y a veces mi mamá tiene miedo. Como cuando yo tenía pesadillas y mamá me construyó un fuerte contra los malos sueños.

Lisa aprieta los labios, sintiendo una presión en su pecho.

—Y sé que si mi mamá se entera de que te he llamado se va a enfadar conmigo, pero no me gusta que esté triste. Y bueno, tú también parecías triste ayer antes de irte y siempre parecen felices cuando están juntas así que he pensado que si tal vez vienes a verla las dos se pondrán contentas ¿Sabes? Pero no tienes por qué hacerlo, tan solo...

Ella realmente suena preocupada, triste. Y Lisa piensa que ninguna niña de siete años debería estar triste por su culpa, mucho menos ella.

—Amor, estaré allí en quince minutos. —es todo lo que dice con cariño, levantándose de su sofá.

—¡Gracias Lili!

[•••]

—Son las mejores, ¿se los había dicho ya? —Jennie dice con una sonrisa en el asiento del copiloto del coche de Nayeon.

Ella quien se encuentra en la parte trasera del coche sonríe antes de darle un sorbo a su chocolate caliente, para seguidamente asentir.

—Unas siete veces desde que hemos salido de casa Jendeukie, pero nos encanta escucharlo. —Nayeon dice felizmente, concentrada en la carretera frente a ella.

Ella y Nayeon la habían despertado esa misma noche de su pequeña siesta, diciéndole que irían a su cafetería favorita a por algo de chocolate caliente. Aquello ciertamente había animado a la castaña, quien definitivamente necesitaba distraerse con algo más que la alejara de sus horribles pensamientos.

—¿Estás más contenta, mami? —Ella pregunta, haciendo que Jennie se gire en el asiento para mirarla.

La forma en la que Ella solo quería que ella estuviera feliz hace que Jennie se sienta la persona más afortunada del mundo.

¡Entrenadora Lili! - (Jenlisa) (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora