06
Los tres hombres frente a mi no dejan de mirarme, siento que ha pasado una eternidad, pero solo han pasado segundos.
Segundos que parecen horas.
—Te dije que se quedaría muda— dice mi padre riendo y toma el hombro de Diego, ambos ríen.
Se burlan.
—Estoy asimilándolo, es un puesto completamente diferente, es el sabor de Cherry sobre mis hombros, es más serio de lo que piensan, yo no le veo lo gracioso— digo cruzada de brazos, pienso que no pueden tomarse este tema a la ligera.
—Tienes mucha experiencia, Serena, Ricardo Monticelli será tu Sous-Chef, no le veo el problema a esta situación ¿acaso tú si, Edward?— dijo Diego a mi padre.
—¿Ricardo? ¿Ricardo en Cherry?— digo sorprendida, él tiene mucha más experiencia que yo. Es imposible. —El tiene más conocimiento sobre cómo llevar la cucina que yo, sería estupido ponerlo por debajo de mi— digo tajante.
—El te vendió como la mejor, Meri— me dice papá tomando mis hombros, es un poco más alto que yo, solo elevo la mirada a él.
Se acerca un pequeño sermón melancólico. —Y antes de que te quejes del cómo te llamé, soy tu padre y yo te puse ese nombre, Marianne— me interrumpe con su mirada.Aunque tenga un lindo significado, no me gusta que me llamen así.
Así te llamaba, Diego, ¿no es así?
Cállate.
No le daré más problemas a mi padre, él puede pedirme lo que sea y lo haré, solo que quiero ver a Diego negociando conmigo un poco. Es todo.
Veamos que aprendió estos años.
—Basta ya, no tienen que seguir con esto, aceptaré.— digo alejándome de los tres, están asfixiándome, me quito la chaqueta y me siento en la silla giratoria detrás del escritorio. —Pero tengo condiciones— digo con una sonrisa de lado perversa, muy perversa.
Me siguen con la mirada cada uno de mis movimientos.
—Te estamos dando todo en bandeja de plata, Serena— dice Diego enfadado.
—¿Estamos? Sabes... aún no puedo comprender como es que llegaste aquí tan fácil, pero es un tema que no tocaré por hoy, ya que papá está incluido en el. —digo con un tono más serio, es el tono que utilizo para hacer negocios.
Kenan lo percibe, lo detecta y solo me mira divertido.
Sabe que es hora de hablar, hora de poner las cartas sobre la mesa.
Avanza hacia conmigo y se posiciona tras de mi.
Ahora somos dos, contra dos.
Mi padre me mira serio y Diego tiene la misma mirada que yo. Retadora.
Retándonos con la mirada.
—Kenan seguirá conservando su puesto como Asistente de Gerente General— les digo tajante y lo digo más para Diego.
No dudo que ese puesto lo quiera para Jonah Soraj, se que tendría que estar aquí y también se que llega tarde a todos los lugares.
Lo vi en la cena de anoche y lo confirmé esta mañana.
Pobre, pobre Jonah. Estás tan embarrado en esto como Diego.
—El puesto será para mi asistente, Serena, lo lamento, habrá cambios en todo y el es...— dice Diego sin pestañear. Pero lo interrumpo, claro que lo interrumpo.
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Uniendo Legados
RomanceLEGADO CHERRY. Regreso. Sin pena, sin vergüenza en su cara, como si nada, regreso. Descubriría sus intenciones, sus ideas que en un pasado desconocido lo hicieron volver y sobre todo descubriría el porqué es el nuevo socio de mi padre. Ni siquiera...