X

9 2 0
                                    

Despierto por culpa de un par de rayos de luz que se asoman por mi ventana, y al ver el despertador me percato en que ya son las 8:30am lo que significa que la cosecha es dentro de poco. Pero al voltearme al otro lado de mi cama, todas las preocupaciones por los estúpidos juegos se desvanecen; porque ella está aquí conmigo.

Dormida parece más un ángel que de costumbre. Sus cabellos rubios caen hacia mí mientras ella me da la espalda al dormir, lanzando suspiros de vez en cuando que me hacen querer despertarla y besarla para atrapar con mis labios esos suspiros. Se ve tan hermosa que no puedo evitar pasar mis manos por su suave brazo, ante lo cual ella se sacude al sentir el calor de mano sobre su piel desnuda, pero de inmediato sigue durmiendo plácidamente.

-Nunca pensé verte con tal cara de idiota.

Me doy vuelta de golpe al sentir esa voz y veo a Lucia en el marco de la puerta tomando un café mientras me mira entre divertida y pervertida al verme a mí y Tiffani en la misma cama.

-Para la próxima podrían hacer menos ruido, recuerden que hay una menor de edad.

-Shhhhh... -le espeto para que se calle y no despierte a Tiffani, pero ella solo sonríe irónicamente y me mira con burla, aguantándose una carcajada apretando los labios.

-Ahora resulta que soy yo la que hace demasiado ruido. –me dice burlesca, ¿es que acaso no se cansa de hacer esas bromas de doble sentido?

Me aparto con cuidado de Tiffani para que esta no despierte y me levanto dándole la espalda a Lucia para ponerme mis bóxer que están tirados en el suelo. -¿Qué crees que haces aquí? –Le pregunto un poco enfurecido- Vete!

-Bueno... esta es mi casa así que no pretendo irme a ninguna parte. –responde sacándome la lengua.

-¿Al menos podríamos hablar abajo para que Tiffani no despierte?

-Con respecto a eso... -dice señalando mi cama- Creo que ella ya despertó.

Y es cierto, veo como Tiffani se refriega los ojos y da un bostezo para quitarse el sueño aunque aún parece bastante adormilada, por lo que se empieza a estirar sin darse cuenta de donde está despertando.

-Hola! –grita Lucia haciendo que Tiffani de un salto enorme al escuchar su voz.

-Lucia!!! –le reprendo poniendo una cara total de enojo, y ella solo vuelve a tomar otro sorbo de café y se va sin decir nada más al piso de abajo.

-Oh por dios –exclama en voz baja Tiffani al darse cuenta que está en mi cama desnuda conmigo solo en bóxer en la puerta, y de inmediato sus mejillas toman un color escarlata que la hace ver adorable, por lo que me acerco y le doy un beso en los labios como saludo de buenos días.

-Buenos días –le digo robándole un nuevo beso, aunque esta vez, ella me aparta y solo dura un par de segundos-. ¿Pasa algo? –le pregunto al notar que no acepto mi nuevo beso.

-Esto... esto está mal; no debí haberlo hecho –dice para sí misma.

-¿De qué hablas? –le pregunto alzando su barbilla para mirarla fijamente a los ojos.

-Lo siento –responde ella- Esto no dio haber pasado, lo lamento.

Intento tomarla de la mano para que se calme, pero ella me la suelta rápidamente para luego buscar sus cosas en el suelo y empezar a vestirse desesperadamente. Yo solo la veo decir cosas como "no debí hacerlo" o "esto está mal" y no puedo evitar sentirme triste por sus palabras. Me acerco a ella y la tomo de la cintura volteándola para verla directo a sus ojos y lo que veo me sorprende para mal, veo miedo.

-¿Pasa algo? –Le digo al no saber por qué me mira con tal pavor- ¿Hice algo que no te gustase? ¿Te trate muy duro?

Ella solo niega con la cabeza mientras intenta separarse de mi agarre, pero yo se lo impido tomándola con más fuerza del brazo para evitar que escape sin decirme porque está tan aterrada.

Los Juegos Del Hambre I: Luis (Fanfic).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora