Give Me Attetion

Capítulo IV - Taquicardia

Mina despertó primero que Momo, por supuesto. Se dio cuenta de que todavía le había costado dormir, debía estar demasiado cansada para despertarse temprano. Decidió darle a la niña 10 minutos para despertarse.

Cuando terminó ese tiempo, fue a la cama de la mayor y la meció.
-¿Momo? Despierta vamos... - continuaba Mina, hasta que notó el sudor frío de Hirai. - Hirai... despierta, deja de asustarme así. ¡Momo, hola!

La mujer japonesa abrió los ojos, sintiendo su pecho casi estallar de dolor. Estaba teniendo un efecto secundario que casi nunca ocurre: taquicardia. La medicina que tomó Momo estaba hecha de cocaína, un estimulante, para mantenerla despierta y concentrada. Pero a veces, el plan fracasa.

Momo ni siquiera podía hablar, no podía sacar aire correctamente y el dolor no ayudaba en eso. Por esta razón el sudor frío. Ella estaba en el dolor, durmiendo.

-¡¿Padre?! ¡Padre! - Gritó Mina al escuchar los pasos apresurados de su padre que llegó a la habitación en unos segundos. -Momo se siente mal, ¡no sé qué pasó! ¡Se despertó así!

-Cálmate, vamos a llevarte al médico y ya vas a ir a la escuela, tu madre y yo nos encargaremos. - Decir eso no calmó para nada a Mina. Vio a su padre tomando a su amiga en sus brazos y llevándola directamente al auto. Iban al hospital y no permitieron que Mina faltara a clase para estar al lado de Momo.

-Ah... me preocupa tanto, mamá. ¿Cuándo va a mejorar todo esto? - se preguntó Mina mientras caminaba hacia la escuela. Llegaste un poco tarde, pero aún puedes ingresar a la primera clase.

No supo de Momo hasta la hora del almuerzo, cuando recibió un mensaje.

[Momoring]: HEEEY a viva!

[Minari]: ¿POR QUÉ TARDASTE TANTO EN MENSAJEAR?

[Momoring]: ¡Estaba durmiendo! Cuando llegué al hospital me dieron un medicamento que me dio mucho sueño...

[Minari]: ¿Pero qué pasó? Estabas bien de madrugada, te despertaste sudada y así...

[Momoring]: Taquicardia, y como tenía ansiedad, empeoró la situación. Es por la medicina. Tu padre tiene razón, tal vez necesito cambiarla

[Minari]: ¡¿Tal vez?! Momo casi mueres frente a mí. No quiero tener esa visión de ti teniendo dificultad para respirar nunca más.

[Momoring]: Relájate, estoy bien. ¡Hasta voy a comer! Gracias por su preocupación, pero estoy completamente bien y saludable.

[Minari]: Eso lo veo 'sano'. De todos modos, come. Después hablamos

[Momorando]: ¡Claro! Hasta luego.

'Hasta luego'. Mina sabía que a Momo le podía dar un infarto en cualquier momento por culpa de la medicación, sabía que podía perder a su amiga, eso pronto mejoraría la situación. Al menos no era un 'adiós' o un 'adiós', eso definitivamente dolería más.

-¡Ey! ¿No eres tú la chica que sale con esa chica rara? - Mina tenía sus pensamientos cortados y miró hacia arriba. Ver a una chica con el pelo castaño y corto, otra con el pelo largo y rubio.

-Lo siento, pero ¿de quién estás hablando? - Myoui se levantó del banco donde estaba sentada. Cruzando los brazos.

- Bueno, ¿De quién más? Hirai Momo. Esa chica es rara, ya sabes, te veo en la escuela con ella.- Dime... ¿ella tiene alguna enfermedad? - La chica que habló estaba completamente relajada, la del lado trató de ocultar su vergüenza, pero ella seguía ahí.

- Ouh... si claro, la enfermedad de no haberte dado todavía un puñetazo en la cara. Wow, que niña tan enferma, no veo la hora de golpearte en medio del patio. ¿Si supieras? - Mina no aceptaba que le hablaran así de su mejor amiga. Viví años con Momo para saber por qué estaba en ese estado y me niego que alguien le dijera una mierda.

- ¿Wow, que entonces muerdes? ¡Llegué para saber por qué sigue mirando a mi amiga! Eso es raro, ¿sabes? No sé que mierda sea, pero tienes que pedirle que se detenga. - La chica se había puesto completamente a la defensiva.

- Minatozaki Sana. Eres tú de quien Momo estaba hablando ayer entonces, ¿no es así? - Mina dirigió su mirada a la chica de pelo largo. -Eres muy bonita, pero puedes estar segura de que Hirai miraba a todo menos a ti. Se estaba enfocando en un punto fijo cerca de ti, no en tu cara. No te preocupes, ella no te matará. - Myoui recogió su bolso que estaba en el suelo, respiró hondo y miró a la chica de pelo corto. -Pero te mato si vuelves a decir algo sobre ella. Hirai es completamente normal, el único enfermo aquí eres tú. Deberías tratarlo niña no se encuentra un terapeuta y de seguro ayudará a tu maldita cabecita.

Mina acaba de salir de ese lugar, yendo con unos amigos de su clase. Jihyo estaba atónita por eso, nunca había escuchado a alguien enfrentar tanto. Sana, en lugar de sentirse aliviada, se sintió incómoda. Si Momo no la miraba a ella sino a un 'punto fijo', ¿en qué piensa tanto esa chica?