Orgullo Presente

Capítulo 6. Esto es lo que siento

Wednesday

Esto es lo que realmente siento? A decir verdad es todo muy confuso, mis padres, que dirían de mi acerca de lo que ha pasado, no es que me importe, nunca he necesitado de su aprobación y mucho menos ahora que me siento totalmente sin palabras, este sentimiento es horrible en el aspecto de quererme alejarme de lo que me rodea.

Sientes algo por Enid? Quién dijo que el amor es algo sencillo cuando es todo lo contrario, y no depende de nadie como para empezar a sentir cosas por Enid, que no es el caso, solo es una amistad o mejor dicho, una pasantía, le estoy ayudando a resolver sus problemas lobiznos. Le dije que me gustaba y fue lo peor que he hecho, incluso desearía arrancarme el corazón y entregárselo a toda costa, preocuparme por su bienestar, tener una vida junto a su lado, es algo nuevo pero interesante y no en el tipo de sufrimiento y sufrimiento me refiero al placentero. Me alegra que haya reaccionado de la mejor manera ante mi confesión, quiero tomar ácido para matar esas arañas en mi estómago, no van nada bien con mi estilo impecable.

Sigue dormida y es lo mejor que puedo pedir, todas las mañanas veo como hace gestos por los sueños misteriosos que tiene, no dudo que varios de ellos sean conmigo y en una situación un poco desnudante, quiero decir diferente, realmente puedo decir que soy muy atractiva, todos en la escuela me miran todo el tiempo y eso me hace sentir un poco cansada, no es bueno ser todo el tiempo el centro de atención, por otra parte mi atención se la roba esa chica rubia, de ojos azules y una sonrisa encantadora, su cabello siempre brillando y demostrando lo linda que es, cuando ella tiene y su voz es inigualable, incluso puedo decir que, por otra parte, es tan atractiva, no sabes cuánta felicidad me dio recibir esas palabras, dudaba de su sería correspondida, incluso por ella y es que no me importa pero ella es...

Sin duda esa lobezna me volverá loco, me volvió loco y solo la he besado, espero que ella sienta lo mismo que yo. Mi felicidad fue poca pero inolvidable, necesito bañarme y llegar a clases 30min antes, cuando salgo la rubia estaba despierto, se veía tan tierna con su pijama y sus ojos parpadeando con dificultad, sin dudar un segundo más la abraze, ella correspondió mi abrazo, con dificultad para respirar pero feliz.

-Qué fue ese gesto repentino? La rubia se separó acomodando un poco su cabello.
-Solo quise expresar mi felicidad, y di que soy amable contigo canino. Ambas sabían que jugaban una con la otra. Por lo menos de parte de la pelinegra, la rubia se puso sentimental, realmente tomaba en serio cualquier apodo como un insulto, la pelinegra tomo de su barbilla y la levantó logrando un click entre miradas, duro unos pocos segundos que se conviertieron en una eternidad placentera. La rubia sintió una suave caricia entre su cabello y mejillas aclarando un poco el malentendido, cerro los ojos cuando sintio unos labios chocar contra los suyos, eran esos labios que conocía instantáneamente y que adoraba, ambas se separaron por la falta de aire, sus pupilas estaban dilatadas. -Me tengo que ir, nos vemos.

La rubia estaba sorprendida, brincaba de la felicidad en su cama, sin darse cuenta habían pasado minutos besandose, incluso la pelinegra no se había dado cuenta de que iba a llegar tarde a su clase.

Enid

No puedo creer que esto esté pasando, justo en el mejor momento, casi tendré mi enlobación y... Pero que estoy diciendo, haber Enid hay que ir lento, sabemos los riesgos que corre una con la otra, que definitivamente hará que me aleje de mi luna, tenemos que formar un vínculo para saber que cada una corresponde a la otra, es en pocos días y necesito estar lista.

Tengo que brillar, hoy es el baile Nevermore y ya se con quien voy a ir. No es que tenga asegurada su respuesta pero el beso de ayer debe significar nada, lo hizo 2 veces e incluso le confesé que me gustaba y fui correspondida, debería de recibir un si, aunque probablemente su silencio lo diga todo. La clase!! Se me hace tarde, quería despertarme con un beso suyo, de todas formas lo obtendré hoy en la noche.

Tengo que hablar con Yoko, aunque a pesar de lo que pasó, tengo demasiado miedo de lo que ocurrió en unos días, necesito experiencia.

-Yoko, necesito hablar contigo. La rubia asustada, afuera del cuarto. -Enid, en que soy buena para ayudarte? Ambas se sentaron en la cama, la rubia no paraba de jugar con sus manos intentando buscar el mejor comienzo para un consejo. -Nerviosa? La rubia alzó la mirada, sus mejillas se tornaban de un color rojizo. -Yo, claro que no. -Entonces? Tus movimientos con las manos te delatan y es difícil no saber que algo malo sucede, llevamos tanto tiempo juntas y te conozco muy bien. -No, para nada, es solo que necesito un consejo o consejos a decir verdad. -Claro, pero antes dime, te estuve esperando toda la noche para ver películas juntas y comer helado hasta desvelarnos, porque es lo que hacen las amigas verdaderas. -Lo siento mucho, se me olvidó, tómatelo con calma, ok? Justo cuando iba a tu recámara Wednesday me beso. Yoko se quitó los lentes a pesar de la luz irritante en sus ojos, ladeó la cabeza frunciendo el ceño. -Que Wednesday hizo qué? La rubia suspiro, era consciente de la reacción de su mejor amiga. -Lo sé, fue algo de golpe. -Por lo menos no te gusta esa fenómeno, menos mal. -Yoko... La rubia era interrumpida entre cada palabra que decía. -A lo que viniste, solo aléjate de ella y evitala a toda costa. -Yoko... -Te ayudo a cambiarte de dormitorio. -Yoko... -Por último, voy a patearle el trasero a esa chica irrespetuosa, quién se cree? Abuso de ti. -Yoko!!! La chica vampiro se inmutó, sin decir ninguna palabra la rubia comprendió que era su momento de hablar y explicar todo lo sucedido. -Le dije que me gusta y antes de que digas algo déjame terminar. Yoko se sostuvo de su frente y suspiro pesadamente. -Me dijo que le gustaba y correspondi su beso, eso fue antes de haberla besado anteriormente. Yoko desepcionada hizo una seña, era obvio que la cuidaba y no dejaría que nadie la lastimara. -

-Para ser una alfa a futuro se te nubla la vista y cometes errores, te comprendo, yo era como tú hace 150 años. La rubia rodo los ojos, era obvio que no estaba siendo de gran ayuda sus comentarios. -Necesito un consejo y no me estás ayudando para nada. Yoko acomodo su cabello, esto iba muy serio. -En que puedo ayudar, se nota que va todo de maravilla y tienes todo bajo control. -Es solo que Wednesday me pone nerviosa, quiero que nuestra relación sea sería, no es que seamos novios, todavía. Pero tengo miedo de lo que suceda y en unos días es.... Yoko la interrumpió completando la oración. -Es tu enlobación, lo sé. Solo déjate llevar y relájate, si ella dice que le gustas deba eceptarte tal y como eres, con tus errores y defectos, especialmente tus impulsos cuando estás en esos días. La rubia la miraba con una confusión. -Eres amiga o enemiga? Lo digo porque parece que te caigo mal. Yoko soltó una risa. -Es broma, sabes que te amo demasiado, es solo que de vez en cuando no es malo hacer un chiste, incluso aunque no lo sea. -Bueno como sea, ya me tengo que ir, hoy vere a mi querida Luna y le pediré que seamos novias entre otras cosas que tengo en mente por supuesto.

Cayendo la noche la pelinegra fue a visitar al castaño, en la cafetería todo estaba muy silencioso. -Justo mi sitio favorito. El castaño alcanzo a escucharla acercándose con un pastel de chocolate. -Porque tu sitio favorito? Si se puede saber. La pelinegra se dio cuenta de que el castaño aún siguiera trabajando. -Desde que entre a Nevermore no he podido tener silencio, especialmente por mi compañera.
-Ya veo, ni te agrada tu compañera, te entiendo muy bien, una ves me tocó... El castaño no pudo terminar su oración. -No es algo que diría en estos momentos, solo que es un poco curiosa en términos más generales. El castaño solto una pequeña risa sarcástica, se sentia más aliviado de que no gustará de su compañera, está vez se iba a encargar de conquistar a Wednesday y nadie se lo iba a impedir, sea por las buenas o en otros casos circunstanciales en las malas.

-Por cierto, ten un obsequio del baile Raven. La pelinegra lo miro confuso. -Por qué creerías que me gusta el chocolate, especialmente el chocolate que solo es un intento del gobierno para que tú paladar aprecie su azúcar y creer que quedes satisfecho cuando lo único que hacen es ganar dinero; yo misma me encargaría de tener al gobierno en mi poder para un bien mayor. Pero antes de irme quiero aclarar que no me agrada lo dulce.

Lo amaría si fuera la actriz que me interpreta, seguramente mi escritor o escritora tiene que ver con esto, tan enamorada de Jenna Ortega, que digo yo misma, es tan hermosa. La pelinegra no sacaba de su cabeza la duda de si estuviera en una historia y si fuera así querría una con final feliz estando con su rubia enamorada de ojos brillantes.